Poema que realicé hace un par de años a favor del duelo y desamor. Trata de amores viejos que convertí vía metáforas peludas de acuerdo a mis propias experiencias. Es doloroso, pero importante.
Hoy tuve un sueño muy extraño, fue muy hermoso, me trajo muchos recuerdos y lo agradezco. Soñé con Joeycito, en una especie de multiverso en el que aparentemente había desaparecido. Llegaba pronto a la casa, -la Joeycie cueva- y oía su ligero maullido, muy diferente al de otros felinos porque solía ser suave y gentil, recordé que mi madre tendía a no oírlo porque es medio sorda por la edad, así que él aprendió a tocar la puerta del negocio y tocarla con su patita cuando quería algo; de inmediato lo reconocí y me eché a llorar, abrazándolo. Estaba sucio, lleno de polvo, lodo y otros tantas cosas, yo suelo ser super picky, pero eso no me importó y lo abracé de todas maneras. Abrí de prisa y lo llevé adentro, traía una enorme cadena de metal amarrada al cuello, se notaba que la había roto de la desesperación, así que se la quité y lo bañé, me clamaba por un baño caliente, el primero que tomó por su cuenta y sin hacerme dramas gatunos. Así que terminé, lo sequé y lo mimé,viendo sus cicatrices y pensando en llevarle al veterinario al día siguiente, de una forma tranquila porque teníamos toda una vida por delante, cargándolo entre mis brazos, pude sentir su calor y su amor nuevamente. Luego llegaron mis papás a verlo, y les dije que ahora sí lo cuidaran bien, rompí en llanto y les dije que lo había extrañado tanto...Y de repente, desperté.Todavía sentía el remolino de emociones dentro de mí. Me dije, "Fue sólo un sueño" y la realidad me golpeó fuertemente mientras recuperaba la conciencia. Joeycito falleció hace dos años, no se perdió. Yo pude ver su pequeño cadáver y lo enterré personalmente, aquella noche lloré cómo cuando muere un familiar, porque para mí, Joey era mucho más que una familiar para mí.Pero aún así, abracé mis sueños y me sentí feliz de poder verlo, de tocar su suave pelaje. Estoy realmente feliz porque pude quitarle esa cadena y yo también me liberé, lo quise mucho, y lo dejo ir, libre, de regreso a Mictlán.
Adiós Joeycie.
MagAnzu: este texto lo escribí en Noviembre 2019 ese día que soñé con mi gatito, les paso una foto de él:
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