5 de abril del año 2019
*Omitió escribir querido diario*
Recuerdo las calurosas noches de invierno en casa.
Tenia que decir que amo a los gatos. A los niños, y a los estúpidos elefantes, pero. Lloraré al contarte esto, de una manera educada, por que esta es una histeria, es decir, historia... Educada, continuemos:
al lado de mi amado gato <<pequeño gran señor gordo Louis>> calurosas por el vapor del café y la cobija que me envolvían en un sentimiento de amor confortable.
Recuerdo el amor de la compañía de aquellos seres que tanto amaba. y sin embargo sigo amando envuelta en un mar de confusión, ahora es un mar que en este lugar me conforta más que saber de ellos.
Mi esquizofrenia me dice que estoy loca, mi mente me dice que hay algo más.
no puedo recordar lo que pasó. Y ahora que estoy sola me pregunto: ¿Es acaso mi culpa el estar aquí?.................................
"Colette"
La maldita enfermera que le había quitado el gato a Colette la interrumpió tocando la puerta para proceder a abrirla y entrar a su habitación.
Colette la consideraba una desgraciada desde que le quitó al gato y lo mando afuera. Un acto que a decir verdad perdonó debido a que atrajo a su mente un recuerdo:
Colette tenía una coherencia impecable y perdonaba con facilidad, y aún que desde que le quitaron al gato lo veía cambiar constantemente del color que conocemos a distintos colores pardos y manchados en su cuarto: se sentía apática al pensar que tuvo un ser vivo real que la acompañaba en sus manos un momento:
El problema es que fue un momento muy breve. Y ni siquiera fue real.
Colette respondió amablemente.
"¿Que se te ofrece rutilia?"
<<perra>>
"¿Dormiste hoy?" dijo la enfermera.
"No, como indicaron para el estudio de hoy, no por un estudio, sino por qué no pude"
"Si bueno son las 7 de la mañana, es hora"
Colette Cerro su diario y se aproximó a la puerta, debido a la ansiedad y el no poder estar quieta estaba escribiendo parada.
articuló mientras caminaban en dirección del laboratorio.
"Recuérdame para que es el estudio"
"Es posible que aún no hayan dado con el diagnóstico adecuado, ningún medicamento te funciona. Sigues teniendo alucinaciones fuertes, cómo dices..."
Colette calló, mientras continuaba caminando. La enfermera seguía hablando, pero Colette no la escuchaba.
Comenzó a imaginar al señor gordo Louis al final del pasillo y se sintió nostálgica. De repente en verdad había un gato blanco con negro al final del pasillo.
"¿Ocurre algo?"
Dijo rutilia.
"¿Eh? Oh.. si... Digo no."Terminado el estudio Colette se dirigió a la cafetería y el mismo gato la estaba siguiendo, cuando de repente se fue.
"Disculpe, ¿Ha visto un gato gordo y bicolor que habla?"
Pregunto al paciente del hospital más cercano que encontró, a lo que esté le respondió con una sonrisa.
" Todo el tiempo"
Colette comprendió que preguntarle a los demás enfermos no le serviría de nada. ¿Debía seguir al gato ella misma y preguntarle? <<¿Que buscas de mi?>> Cuando lo comprendió,
Comenzó a imaginar al amigo que hace unos días le había pedido que saltara a su muerte para recuperar su séptima vida.Pensó: lo hice, somos amigos ¿Cierto?
"Los mejores "
dijo alguien detrás de ella, era el gato.
"Entonces, ¿Lo logré?"
Dijo Colette sin extrañarse, y continuó alegre.
"Estás aquí"
Entonces estaba preocupada Porque entendía su situación.
"¿Otra vez triste?"
Le dijo el gato.
"No finjas Louis, no tienes que preguntar, estás en mi mente"
El gato la miró, el gato lo sabía, y le dijo.
"¿Por qué me creaste Colette?, ¿Me escuchas?. Colette... Colette... ¿Con quién hablas?"..................................
Era invierno del 2017
Collete estaba sentada en el comedor con el resto de su familia y amigos en una noche que le parecía tan larga como amena.
Escuchaba.
"Colette... ¿Con quién hablas?"
Este era el recuerdo que el suceso del gato real le despertó.
Y sin embargo esa fue la primera ocasión en la que se le vio actuando de manera extraña. Una ola de comportamientos fuera de lo normal con la consecuencia de una madre que la niega.