— ¿A un prostibulo?
— No es un prostibulo —gruñó Cinco.
— ¿Quién está aquí? ¿Klaus, Vanya? ¿Probablemente Allison? Apuesto a que es Allison.
— Ninguno de ellos.
— Oigan, niños, no pueden estar aquí —dijo una rubia.
Niño Cinco, yo por lo menos me veo de 16.
— Hola, linda. ¿Qué tal si haces una excepción? —dijo Cinco sonriendo. Con razón va a pasar el apocalipsis—, ¿a qué hora sales?
— Es muy joven para ti —susurré.
— ¿Sabes qué? Entraremos por nuestra cuenta, gracias —dijo jalándome del brazo al interior de... ahhh, es un bar. Por fuera parece prostibulo con tanta gente con poca ropa.
— Suéltame —murmuré apartando mi brazo.
— Vamos —dijo volviendo a jalarme del brazo.
Pasábamos por entre la gente, ganándonos varias miradas. No sé si por ser unos niños en un bar, o porque hay una chica unos 20 años más joven que ellos. Nos sentamos en una mesa al frente.
— Es incómodo estar aquí, ¿a quién buscas? —murmuré— Si lo que quieres es ver un privado, ellas no te lo darán.
— Cierra la boca —dijo sin verme—, eres algo irritante a veces
— Es de familia. Déjate de juegos y dime quien de nuestros hermanos está aquí. Por un momento pensé en Ben, pero él está en el cielo.
— Es demasiado joven para ti —dijo una voz a nuestro lado.
— Es lo que yo dije —dije y volteé a mi costado—, mono —sonreí.
— Hola, Ophélie.
— Me da gusto verte, Luther —dijo Cinco sin dejar de ver a la chica que bailaba en el escenario—, y al parecer también se te disminuyó la edad.
— Pero ve a tu hermano —dije golpeándolo en la frente—, casi se te salen los ojos —a Cinco casi le da un tic en el ojo.
— ¿Qué quieres? —cuestionó Luther.
— Que dejes de actuar como un stripper inseguro y te sientes con nosotros —Luther acercó una silla y se sentó—. ¿Cuánto tiempo llevas aquí?
— Un año. Gracias a ti.
— Lo siento, Luther, imagino que no fue fácil.
— Pensé que los demás habían muerto —dijo viendo en dirección a unos hombres—. Tengo que hacer... —murmuró levantándose.
— Luther, espera —Cinco lo tomó por el brazo.
¿Qué tiene con agarrar a todos del brazo?
— Luther, te entiendo, ¿okey? Yo sé cómo es estar varado en el tiempo, pensando que así vas a vivir el resto de tu vida. Escapando, sin saber si algún día volverás a ver a la gente que quieres. En un mundo donde nada te es familiar, pero Luther, no estas solo. Tenemos que encontrar a los demás, porque el fin del mundo llegará otra vez en diez días. Y no tengo idea de como evitarlo.
Luther pareció pensarlo.
— Me importa un carajo —dijo y se fue.
— Tan lindo —dije.
— No ayudas, Ophélie.
— No es mi culpa que te dijera que no. Si quieres voy y hablo con él.
ESTÁS LEYENDO
60-talet
Fanfiction60-t|| Dónde una de las advertencias de Cinco sobre viajar en el tiempo, se cumple causando complicaciones y cambios en los años sesenta. FEMALE OC x FIVE HARGREEVES