"Es más fácil soportar la muerte sin pensar en ella, que soportar el pensamiento de la muerte." (Blaise Pascal) _ Leyó a mediana voz. Esto... _ ¿Cuánta verdad tiene?, ¿acaso yo eh de poder en tender el pensamiento acaparador y amargo de la muerte?, la verdad es que me da miedo si quiera pensarlo, y no es que por ahora tenga razones para hacerlo, pero... lo que si quisiera comprender es que ¿Por qué, si íbamos tan bien con cuentos tan hermosos como los de aquellas princesas de lagos cabellos dorados como el oro, ahora tengo que leer cosas tristes?¿por qué tengo que cambiar?
_ Señorita Sallow, ya usted tiene 13 años y sus buenos padres me han encomendado la misión de darle de leer algo más acto para sus clases, no todo en la vida señorita serán príncipes hermosos y doncellas de piel aterciopelada, la vida señorita, la vida gira entorno a la filosofía, la vida, la vida es mucho más seria que eso y mucho más ahora que la han de valer.
_ ¿Seriedad? ¡Me estás diciendo que aquellos caballeros de que arriesgan sus vidas por el bien del amor, o ya sea por sacrificio no es seriedad!
_ Señorita, se ha molestado tanto que el color de su cara ahora le hacen juego al color de los rizos capilares, le pido que por favor respire y siga leyendo, que esto es importante para su aprendizaje, no ha de molestar a su padre. _ Tomándola de los hombros.
_ Baja los hombros y continua leyendo.
_ Ya usted, señorita, tiene la edad suficiente para pillar ciertas cosas ¿Comprende? _ Dijo Robert mientras se acercaba a ella.
_ Si no eh de comprender la razón por la cual los pensamientos de la muerte no son escuchados, mucho menos los de la vida, que deben ser mas enrevesados.
_ Me refiero, señorita. _ Dijo mientras acariciaba su pierna. _ ¿Alguna vez?... Señorita usted... ¿Ah comprendido lo que realmente es el sumo de la vida?
_ Le pido caballero que si por Dios, o dependiendo si cree en otro ser supremo... le ruego, que quite su mano, no valla a ser que yo llame a gritos a mi buen padre y lo eche, o a suerte... lo mate...
_ Por favor, tu muy bien sabes que tu doncellez la merezco... _Tocándole la entrepierna. _ Así que se buena conmigo y devuélveme con ella lo que te eh enseñado todos estos años, porque de ti también eh aprendido y me has enseñado todo... Menos... A no mirarte...
_ ¡Le pido por segunda y ultima vez que no me toque! _ Dijo Noveria mientras se levantaba con fuerza y corría hacia la puerta.
_ Robert corre de tras de ella y la toma del brazo con fuerza. _ ¡No vas a ninguna parte! ¡Y te juro por Dios que si cotorreas algo de lo sucedido te clavare una daga en el coño! en vez de algo que podría gustarte más... ¿Comprendes Libertina? _ Le dijo Robert mientras lanzaba una pequeña risilla.
_ ¡Le ruego señor! ¡Que yo no diré nada! _ Responde Noveria mientras sus ojos se llenan de lagrimas. _ ¡Me lastima, Por favor!
_ Acercándole su rostro al suyo. _ Tus ojos son tan hermosos... Son tan esplendidos como las esmeraldas. _ Dijo Robeth mientras acercaba su cuerpo con fuerza al de ella. _ Y tus muslos... _Tocándolos. _ Son tan suaves y tersos...
_ ¡Déjame!¡Robert por piedad! _ Dijo ella mientras forcejeaba.
_ Te voy a clavar mi polla tan fuerte que vas a regresar pidiendo más señorita, de eso puede cerciorarse... _ Dijo susurrando en su joven oído.
_ El color de la mejillas de Noveria era cada vez más y más rojo, tanto que llegó a alcanzar la tonalidad de cada uno de los rizos de su cabello, las palabras que decía Robert jamás las había escuchado en su vida, ni siquiera por alguien más... Ella estaba totalmente petrificada, sus articulaciones se negaban a moverse, a pesar que correr era lo único que en ese momento pensaba con cada una de sus neuronas, su cuerpo la había traicionado, su cerebro no podía procesar el hecho de que su profesor de filología desde hace mas de 4 años le estuviera desabrochando aquel vestido de satén con una rapidez igualada a los caballos de carrera, tenia miedo de llorar, gritar o siquiera hacer un sonido, ya que Robert podría matarla, entonces solo se limitó a a realizar todo lo que el le mandaba y a rezar para que todo acabara pronto.
_ Bésame. _Dijo Robert mientras bajaba sus bragas.
_ No refuto, ella jamás había besado en su vida, hubiera parecido que la presión del momento la enseño a hacerlo en un intervalo pequeño, no quería morir y por eso a pesar que sentía como si le desgarraban el coño y las entrañas en el momento que Robert introdujo su polla ya que ni ella misma se había tocado en sus trece años de vida, decidió gritar internamente aunque por el dolor intenso no pudo contener sus ojos, los cuales, ya estaban llenos de lagrimas.
_ Los minutos parecen días cuando se sufre. _ Dijo Noveria en su mente.
_ Se que te gusta. _ Repetía Robert una y otra vez mientras tocaba el pequeño pezón de Noveria.
_ ¿No vas a responderme? ¿ Después de haberte hecho una dama ejemplar? _ Dijo Roberth mientras apretaba con firmeza las nalgas de Noveria.
_ Si señor... _ Respondió Noveria con voz entrecortada, encogiéndose de hombros y escondiendo su cabeza.
_ Ya sabia yo que eras una buena zorra, y eso me gusta. _ Masturbándose en cima de ella.
_ Ella sentía que que el momento era eterno, sentía que nunca terminaría aquella tortura, tanto que sus ganas de vida automáticamente fueron invertidas, hasta que sintió un liquido caliente que corría por su espalda en como pequeñas salpicaduras, no quiso levantar su rostro, tenia nauseas, quería que todo terminara ya, y efectivamente llego el momento en el cual ya no sentía tan rudos golpes en su parte baja, le dolían las piernas y le costaba moverse por dos razones, una era la sangre que se escondía entre las grietas del piso de madera que fluía de su coño, el cual le dolía, era el miedo que logro petrificar todo su cuerpo. Después de unos minutos toma las fuerzas para levantar su cara y observar si Robert seguía en el estudio de su padre donde era de costumbre ver sus clases, jamás había estado tan agradecida en toda su vida al ver que Robert ya se había marchado, y para mas desgracia, no encontraba su vestido por ninguna parte.
_ Si abro mis labios el peso de este pecado que se me ah otorgado por injuria de la vida caerá sin lastima alguna sobre mi. _ Dijo Noveria mientras se limpiaba las lagrimas. _ ¿Cómo viviré con esto? el vendrá de nuevo y mis fuerzas no serán suficiente para detener las suyas... ¡Y juro por mi amada gata Dudu que no podre aguantarlo mas de una vez!, y para agregar mas peso a mis desgracias no me creerán porque ser mujer... Y es de asegurarse que si mi padre se entera que eh perdido mi doncellez al no estar yo casada me pondrá el peor de los castigos. ¡Dios mío tocan la puerta!
_ ¡Hija mía!_ Tocando la puerta.
_ ¡Es mi padre! ¡ Si me encuentra en este estado ah de matarme estoy segura de ello! ¿Qué puedo hacer yo ahora?, Dios te ruego que me ayudes. _ Dijo pensó Noveria sobresaltándose. _ Mande buen padre. _ Respondió desde dentro del estudio.
_ Hija mia, es para informarle que saldremos tu madre y yo a pagar los impuestos de la casa, pero antes, necesito un abrazo para que me compartas aquellas suertes tuyas mi hermosa hija. _Gira la perilla y entra al estudio.
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Noveria Sallow
Misterio / SuspensoNuestra protagonista Noveria Sallow vivirá en carne propia un mundo mental sumergido en el el egoísmo, la mentira y el caos, donde las acciones de ella y otros personajes nos harán dar vueltas en el retorcido mundo del suicidio, ¡Ah destrucción, que...