"Primer recuerdo... espera, ¿recuerdo?"𝐀𝐮. 𝐒𝐨𝐮𝐥𝐦𝐚𝐭𝐞.
╴╴╴╴╴╴╴╴╴╴╴
Las olas golpeaban la madera del barco, provocando un suave meneo, similar al arrullo de una madre cansada. Oscura, la noche lo era, llena de penumbra y misterios, cuál reinaba el extenso mar, calmando los rugidos de las bestias y brindando santidad. Sus parpados se abrieron, logrando divisar el patrón de tejidos color crema sobre su cabeza, moviéndose a los lados, Shanks se encontraba arriba, sin exactitud si estaba dormido o despierto.
Sus manos tomaron las sabanas jalándolas para tapar su rostro con inquietud, sin siquiera percatarse que sus movimientos llamarían la atención del pelirrojo. —Buggy, ¿estás despierto?—La voz del chico fue como un suave murmullo que hizo estremecer todo su cuerpo; su tono de voz no fue alto, más bien, fue lo suficiente solo para ser escuchado por el chico de hebras turquesas. —Lo estoy.— Respondió sin balbucear, más porque sentía su cerebro demasiado cansado como para pelear con aquel arriba de él.
—El capitán está empeorando.-- Menciono el mayor de manera dócil. —Lo sé.— Respondió de la misma forma. —Divirtámonos lo más que podamos, esta es nuestra aventura.— Shanks estaba llorando, lo supo al momento que comenzó a temblar y su voz se entrecortó entre pequeños hilos. La voz aniñada del chico se rompía repetitivamente y comenzó a nombrar en repetidas ocasiones al chico bajo de él.
Buggy no sabía que responder ante ello, eran pocas veces en las que el pelirrojo derramaba lágrimas o siquiera se quejaba. Lo odiaba, odiaba verlo de tal manera. Tanto era su sentimiento que lo único que pudo hacer era extender su mano con la intención de tocarlo, lo cual se reprimió al escuchar su voz, nuevamente.
—Buggy.— Shanks le volvió a llamar. — ¿Sí...?— Respondió de manera tenue y con clara preocupación en su voz. — Es hora de que despiertes.— La melancolía se convirtió en un suave escalofrío, que recorrió todo su cuerpo. Se puso de pie inmediatamente con la intención de observar al pelirrojo. — ¿Shanks? ¿Estás...?— Su mano se extendió en su dirección, tomando las telas entre sus dedos y jalando con fuerza de estas.
Sus parpados se abrieron de golpe, reacciono a su entorno, hallándose entre paredes blancas. Las singulares luces cegaron su vista por momentos, obligándole a bajar su rostro refugiándose. Pero tal fue su sorpresa al encontrarse algunos tubos de ensayo con muestras médicas a los lados. Sus orbes se detuvieron en unos cuantos papeles, comenzando con su lectura y comprendiendo la situación. Se encontraba trabajando en la empresa de su antiguo maestro Rayleigh.
— Señor Buggy, ¿se encuentra bien?— Una voz femenina capto su atención, su mirada se elevó encontrándosela, su compañera, ayudante y mejor amiga, Alvida. Asintió con notable cansancio, preocupando a la femenina, quien suspiro en rendición y se dignó a acercarse al rostro del hombre. — Veamos.— Los dedos de la mujer rodearon el rostro de Buggy, comenzando a percatarse de su alta temperatura, preocupándola. — No es tan alta, pero se nota que se encuentra irritado, lo más conveniente seria que descanse.— Buggy asintió, pero el cálido tacto de la mujer le hizo sentir demasiado cómodo, por lo tanto, se recostó sobre sus manos, rodeándolas con las suyas.
Alvida rio ante ello. El conocer aquel hombre desde hace tiempo le había ayudado a notar el extraño comportamiento que tuvo desde la mañana. Buggy, con sus veintisiete años, aún no encontraba su pareja destinada y eso era una situación algo lamentable para el hombre. Pero nunca le había afectado en gran tamaño de acuerdo a su trabajo, a él le encantaba su trabajo, por lo que era muy eficiente. Por ello, el observarlo tan pálido y con notoria irritación le alarmo.
Un dolor similar al de una punzada golpeó la cabeza del de hebras turquesas. —¡Suéltala! — Seguido del constante palpitar, contradictorio a las palabras que resonaban en su cabeza, mareándolo en sobre medida, soltó las manos de Alvida, alejándose. Quien le vio confundida ante el pequeño arrebato que mostró ante ella.
—Lo lamentó, no me siento muy bien.— Asintió insegura y se alejó lentamente del hombre sin dejar de observarle. Buggy, en su contrario, cubrió sus ojos con una de sus manos, para después acariciar el puente de su nariz. Alvida no pronuncio ni una palabra ante sus acciones. —Me retiraré por hoy, Alvida.— Se puso de pie, para comenzar a ordenar los papeles sobre la mesa, pero las manos de la mujer le detuvieron. —Lo haré yo, ve.— No le miro de nuevo, más bien se dedicó a organizar las cosas que el hombre había utilizado antes. Buggy sonrió tenuemente, para luego darse la vuelta y dirigirse a la salida del lugar, no sin antes tomar sus cosas.
El camino a casa fue considerado monótono, hasta que su mirada conecto con una de las tiendas del otro lado de la carretera. Una licorería. —A Shanks le gusta el licor, sería bueno comprar un poco.— Musito en pequeños murmullos, para luego esperar por el semáforo, que le cediera el paso.
Cruzo, con sumo cuidado y se dispuso a entrar. —Buenas noches...— Recibió una respuesta cordial por parte del empleado, para luego ser cuestionado. —¿Busca algo en especial?— Buggy, no supo qué responder, ¿qué se supone que debía comprar? No conocía a Shanks. Negó suavemente y se dispuso abandonar el sitio, hasta que una pequeña voz aniñada resonó en su cabeza acompañada de una pequeña risilla. Su mirada se dirigió al vendedor nuevamente. —¿Tienen sake honjoso? — El vendedor asintió, para luego guiarle por la extensa tienda.
Al llegar a su departamento, realizo la misma rutina diaria. Limpio, organizo y se dio una pequeña ducha, para luego tomar asiento frente aquel balcón que le brindaba vista a la ciudad. No era impresionante, pero era algo significativamente relajante para el hombre. Tomo con cuidado la botella, poniéndola entre sus piernas y comenzando a leer aquello escrito en la etiqueta. —Sinceramente, parezco un idiota comprando este sake, ¿por qué le hago caso a un niño?— Suspiro, para luego abrir el recipiente y beber un sorbo de golpe. Quizá el hecho de que este mantenía su 76% de licor en la etiqueta, fue lo suficientemente provocativo para Buggy.
—¿Quién eres Shanks?— Musito en un suave murmullo antes de perder todo sentido, junto a aquella botella casi vacía a su lado. Luego de una charla interminable consigo mismo.
————————————
Estaba comiendo mientras arreglaba esto.
¡Intentaré volver con ritmo! Creo que deje muy clara la trama de esta serie. ¿No? ¿Les gusta?
ESTÁS LEYENDO
𝐈𝐌𝐁𝐄́𝐂𝐈𝐋 ━━━━━━━━ 𝐒𝐇𝐀𝐍𝐆𝐆𝐘. (PAUSADO)
Fanfic𝐒𝐇𝐀𝐍𝐆𝐆𝐘| "Shanks..." Las divulgaciones de su mente a conjunto de sus sentimientos lo mortificaba. ¿Quien era esa persona que aparecía constantemente en sus sueños? Sabía su nombre, pero no más de ello. Sabía que lo amaba, pero ¿porque no...