⌊Tᴇᴍᴘᴛɪɴɢ⌉ •KookTae•

➵𝕮𝖆𝖕𝖎𝖙𝖚𝖑𝖔/𝟓

Las cosas entre Jungkook y Taehyung estaban bien, solo que el mayor de los dos siempre se apartaba cada que el rubio se acercaba mucho o cuando este lo ponía nervioso, aun así lo trataba como lo trataba desde un principio.

－¿Así que es así?, va una semana completa buscándote－ le dijo el castaño saliendo cambiado del cuarto de vestuarios.

－Buscándonos－ corrige Jungkook siguiéndolo a la salida.

－Oh no, no me metas en esa, ambos sabemos que lo hace por ti－ nego de inmediato, codeandolo divertido mientras se despidia de sus otros compañeros.

－¿Así?, entonces dime, ¿cuándo dejara de alejarse de mi?－ pregunto casi como si fuera un berrinche.

－El esta tímido, ¿entiendes?, no es de alejarse de la nada, el enfrenta las cosas－ explica notando a su tierno amigo esperando dentro del auto mientras se arreglaba el cabello con ayuda del espejo del auto, Taehyung era todo un caso －solo que contigo es diferente, por eso esta así, dale tiempo...

－No se que más hacer－ se quejo otra vez soltando un gran suspiro, necesitaba que Taehyung le de boliya o sino entraría en una crisis interna, nunca antes lo habían evitado de tal modo.

－¿Por qué no dejas la amabilidad y lo acorralas?－ dijo Jimin antes de que entren al auto, teniendo esa casi peligrosa y brillante idea.

－¿Cómo?, ¿tu quieres que me eche de la casa?－ contesto incrédulo, antes ya lo acorralo, no quería tener más problemas, solo quería intentar ser sutil pero Taehyung tampoco lo dejo.

－No lo hará, hazme caso－ le guiño un ojo abriendo la puerta del auto, pero la volvió a cerrar en el momento para susurrarle algo －además ya te masturbaste frente a el, ¿qué podría salir mal?...

Luego de eso Jimin se metió en la parte de atrás del auto luego de soltarle un guiño.

Jungkook se quedo tieso en cuanto lo escucho, se había olvidado de ese mínimo detalle, ya que después de ese día no dejaba de pensar en Taehyung, su perfecto rostro sonrojado aparecía hasta en sus sueños, incluso llego a imaginar que todos sus clientes poseían el rostro del hermoso pelinegro para poder hacer mucho más placentero el momento.

Por el otro lado, Taehyung al no escuchar de lo que hablaban simplemente saludo al primero que entro de forma animada, luego miro al costado viendo como el rubio se conservaba quieto fuera de la puerta del copiloto.

－¿Le pasa algo a Jungkook?－ pregunto curioso llamando con las manos al chico que aún se conservaba tieso y afuera del auto.

－Últimamente esta un poco más cansado, ya sabes... ahora que esta bailando más seguido tiene más clientes de lo común－ Jimin le dijo como si nada sacando su celular para ver sus redes sociales.

Por aquella respuesta Taehyung frunció un poco el ceño, sin entender del todo su enojo por aquello que sintió cuando escucho la palabra "clientes", pero sin prestarle atención al sentimiento incomodo, abrió la puerta del copiloto y sorprendió al menor del otro lado, sacándolo de su ensoñamiento.

－¿Qué esperas?, vamos... tengo hambre－ le reclamo Taehyung medio en broma, notando como las mejillas blancas de Jungkook ahora se sonrojaban notablemente.

Esperen, ¿el también se podía sonrojar?, ¿por qué nadie le dijo nada antes?, ¿o es que acaso no lo había notado hasta ahora?.

Quito su mirada del menor, esperando a que este subiera y que no le contagiara su sonrojo; y todo aquello paso por la atenta mirada de Jimin, quien sonrió malvadamente, es que sabia que en un par de días aquellos dos iban a tener algo y podía apostar por aquello.