Eres mi mayor pecado (Completa) #wattys2022

Capítulo 47

Sofía:

-Venga date prisa que llegamos tarde -una voz que no conocía se escuchó desde mi posición. Avancé por el pasillo y llegando al salón me fijé en la mujer que había con el pequeño.

Era la misma con la que había pillado a Álex al salir de la universidad, la madre de Derek.

-Oh, hola Sofía, perdona no quería despertarte -fruncí el ceño.

-¿Sabes mi nombre? -pregunté extrañada.

-Si, Álex no ha parado de hablar de ti -En su rostro no había desaparecido aquella sonrisa-. No le digas que te lo he dicho o me matará -terminó diciendo soltando una carcajada.

Me resultaba difícil creerlo. ¿para qué iba a hablar de mí? La relación que teníamos era muy complicada.

-Supongo que hablará más de su novia -dije señalándola con la mirada. Nada más darse cuenta de que hablaba de ella soltó una carcajada muy sonora que me hizo sentir mucha confusión.

-Mamá no es su novia -la voz de Derek se escuchó ante aquella situación algo tensa.

-Cariño ve a la puerta y espérame ahí -anunció poniéndose a la altura de su hijo. Cuando Derek se alejó Bárbara aún tenía aquella sonrisa en el rostro.

No era ningún chiste y no le encontraba la gracia.

-Perdona por haberme reído así, pero es que no me puedo creer que hayas pensado que yo era su novia, Álex no tiene novia.

No pude evitar notar dentro de mí una pequeña decepción por aquellas últimas palabras.

-No perdóname tú a mí, no tengo ningún derecho a meterme en tu vida -la interrumpí suspirando. No estaba siendo justa con ella.

-Verás... -aquella palabra la pronunció con cierta duda, parecía que estaba debatiendo en sí decirme aquello o no-. No creo que te acuerdes, pero yo estuve ahí cuando Álex te sacó.

Mi ceño se frunció. ¿A qué se refería?

-Me refiero al bar nocturno -murmuró por lo bajo mirando en dirección a Derek.

Mis ojos se abrieron. ¿Qué? ¿En serio? ¿Pero qué hacia ella ahí...? Al mismo tiempo que mi mente se preguntaba aquello empezaba a atar cabos.

-¿Eres...? -no me atrevía a pronunciar las palabras y dejé que lo hiciera ella.

-¿Prostituta? Sí -susurró con una sonrisa amarga-. Los dos tenemos un pasado demasiado doloroso del que intentamos huir sin mucho éxito. No pude encontrar nada mejor, y aunque así fuera hay personas que compartimos que se encargan de que no me contraten en otro sitio así que... es como una especie de prisión de la que cuesta mucho salir.

Estaba horrorizada con lo que había dicho. Tenía que haber una forma, siempre la hay.

-Tiene que haber una forma, siempre la hay -me negaba a creer que estaba condenada a eso.

-Esas formas desaparecen cuando eres la persona que está metida en un problema ¿verdad? Y si no tienes el poder suficiente... no tienes nada que hacer -¿A qué se refería con aquello? ¿Es que me lo había dicho con segundas?

-Tú no sabes nada de mis problemas -soné algo borde al decir aquello, pero fue automático. No me gustaba por donde iba y se estaba equivocando.

-Lo siento, tienes razón, no debí de haber insinuado nada.

-Mamá ¿nos podemos ir ya? -pronunció con una mueca de aburrimiento.

-Me tengo que ir -su sonrisa volvió a su rostro para despedirse y le devolví el gesto.