Viernes 23 de Julio de 2010. 6:40 am.
Harry se encontraba en su hogar, deseando por dormir mas, deseando por no despertar para tener que ir a la maldita escuela.
No sabia lo que encontraría, no sabía que ese día encontraría a la persona que unos meses después, robaría su corazón, robaría su aire, robaría su alma.
6:45 am.
Anne Cox empieza a tocar con desespero la puerta de su joven hijo, no podía llegar tarde a la escuela, seria malo.
- ¡Harry! ¡Despierta! ¡Tienes que ir a la escuela de verano! Vamos cariño, es ahora, ya es muy tarde, levantate maldito perezoso.
- ¡Mamá! ¡YA CALLATE! ¡INTENTO DORMIR! ¡NO IRÉ A LA PUTA ESCUELA!
- ¡NO ME GRITES EDWARD! ¡AHORA LEVANTATE!
- ¡DIOS! ¡YA CALLATE!
- ¡LEVANTATE AHORA STYLES! O... desconectare toda forma que tengas de entrar a internet para jugar tus malditos juegos online. Tu de-ci-des.
- "Maldita sea"-. ¡Esta bien! Ya me levante, ¿Feliz?.
- Muy bien, apurate que no llegaras tarde. Ya no vas a volver a reprobar el año cariño ¿me oíste?
- "Ya no vas a reprobar el año cariño"- Dijo Harry repitiendo fastidiosamente lo que dijo su madre-
- ¡Deja de repetir lo que digo y apurate!
- Si si ya callate.
Harry y Anne no tenían una buena relación desde hace unos años atrás.
El creía que merecía todo, y ella que era un gran perezoso bueno para nada que no sabia a que hora se convirtió un patán como su ex marido.
7:00 am
Harry salió corriendo de su casa, después de ponerse unos skinni jeans negros, una camisa blanca y unos converse de el mismo color de esta. Sus rizos alborotados, brincaban exageradamente cada que daba un paso adelante para poder alcanzar el bus.
Llegó a la maldita escuela unos minutos después, la entrada a la escuela era a las 7:20 y el iba llegando 7:21.
Esa escuela, aun de verano era muy estricta, pero a el, le venia valiendo pito que fueran así, la puerta ya estaba cerrada, y no podía entrar, su madre el aclaró, que si sabia que no llegaba a los cursos, ella misma regalaría la computadora de su hijo y quitaría el internet para que el ya no jugara mas online, estos eran la vida de Harry, no había lugar a donde fuera donde no llevara su celular para seguir jugando, eran su vida, hasta que alguien más llegó y arrebató el puesto de sus amados videojuegos.
Parece que el no fue el único que llego tarde, había un chico, muy lindo, de estatura baja, de ojos celestes mas azules que cualquier mar, que cualquier cielo, que cualquier otra cosa, su tez blanca, sus pómulos se veían excitantes, sus labios carnosos y rosa pálido mordibles, su cabello sedoso, sus dedos tocables, y su cuerpo deseable.
Todos estos pensamientos pasaron por su cerebro, haciendo que el mismo se sobre saltara, nunca había sentido eso por nadie que no fuera de el sexo femenino, ¿que le estaba pasando ahora? Esto no era normal en el, le excitaba cualquier cuerpo que fuera femenino ¿Que le pasaba ahora con los masculinos?
- ¡Dios mi madre me va a matar!- Dijo aquel ser que lo hizo excitar en ese mismo instante, su voz sonaba tan angelical y tan sensual al mismo tiempo que era enfermo para el-
- ah...- Fue todo lo que salió de la boca de harry.-
- ¿Ah?- Dijo aquel extraño-
- Ah...- Di algo Harry di algo, pensó el- Ah... Si... Si... A mi también.
- Oh, y ¿A ti que te van a hacer?- Preguntó extrañado-
- Me... -Dios sus ojos son tan hipnotizantes, ¿Digo la verdad?, dios ayudame pensó de nuevo- Solo me... Solo me regañaran y ya, eso es todo.
- No, a mi me castigaran no jugando fútbol, eso es malo, es muy malo.- Harry odiaba a cualquier persona que le gustara ese deporte, pero parecía que a esta no, pero, el seguía con la idea de que, era tan idiota correr atrás de una pelota y a eso llamarle "Deporte"-
- Oh, a mi no me gusta el Fútbol...
- ¿QUE? ¿Como no te puede gustar? Es un deporte hermoso.
- Am... Bueno... Es que...
- Es que nada, yo te diré todo lo bueno de el fútbol.
- Esta bien,-Dijo Harry aun hipnotizado aun- esta bien...
- ¿siempre eres tan "Misterioso"?- Dijo aquel extraño formando "comillas" con sus dedos-
- Am... ¿si?
- Que horror, debes cambiar eso, pero bueno, me caíste bien.
- Ah... I-igual.
- Por cierto, soy Louis Tomlinson.
- Yo soy Harry, Harry Styles.
- Bueno, mucho gusto.
- Igualmente- Dijo el ruloso estirando la mano para saludar a el nuevo "amigo" que hizo, Louis estrecho su mano y Harry sintió un escalofrío recorriendo toda su espina dorsal, ¿eso era normal?.
