XXIII

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Buenos días que tal, parece un buen día tal parece que la muerte dejo de seguirme, ve siéntate rápido pequeña compañía que he estado apunto de morir a causa de mi propia sangre.

Comenzó el día como cualquier otro sintiéndome bien pero pasando las horas mi cuerpo comenzó a fallar , mi vista se nublo y caí al suelo.

Desperté en el hospital tal parece que mi exceso de sangre desbordo y produjo un hematoma dentro de mi cuerpo desmaye y desmaye.

Vi a mis seres queridos también sufrir viendo como se les acaba el oxigeno en la sangre , como nuestro propio cuerpo dejaba de funcionar poco a poco en cuestión de horas.

Con lagrimas en los ojos quise verte denuevo y sentir esperanza a mi lado como si el mundo no me quisiera comer una vez mas. Sin embargo estuviste un tiempo y te fuiste.

Me dejaste aqui olvidado viendo como mierda me moría, me quede solo tanto que hasta mis enemigos vieron por mi salud , lo que odiaba me extendieron la mano , los doctores me negaron la entrada con la excusa de que debía morir.

Con enojo y rabia rebase todo esto viendo como mi familia no mejoraba , con enojo , con rabia vi acabarse todo frente a mis ojos, con malos diagnósticos de los doctores y yo siempre tenia los correctos.

La carga de saber que esta vez si no tengo la razón condenaría a muerte a mi familia , era una sensación horrible debía ser aun mas inteligente que un desgraciado de medicina que estudio un chingo que no supo que hacer y diagnostica a lo tarugo.

Estaba gritando de dolor y no estuviste ahí.

Porque te buscaba tanto?

Ahora desarrolle mas habilidad y se logro recuperar la familia gracias a Dios.

Hace poco mi sangre volvió a fallar pero ahora recupere mi vitalidad y los míos también.

Es una tontería pensar que solo por ver pasar la muerte frente a mi familia mi carácter hacia los que no velaron por mi los desaparecí como humo y aquellos que velaron por mi los junte como hermanos.

Rasgue todo lo que tenia para poder salir de esta muerte inminente y salí vivo.

"Sin embargo solo recibirás mi espalda , si sigues mis pistas y no escucharas nunca mas mi sonido al caminar porque perdí el sentido de saber como amar"

Susurro Nilck antes de tomar su ultima pastilla.

-Duodécima carta, La sangre de una lagrima.

-Nilck



"Una Noche Fría , Un Café Caliente y Una Historia Que Nunca Termina"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora