Nunca más estarás sola, Luz Noceda.

2.6K 161 91
                                    

ni madres, me da pinche hueva poner advertencia, quizá la única es que los 3 tendrán 17 años en este au, así podrá haber cosas un poco más explícitas (hablando de caricias, obviamente), disfruten chic@s 🥰🥰🥰

💞

Una sonrisa se dibujó en los labios de una muchacha latina, esta se dirigía a una pequeña cabaña la cuál se encontraba en uno de los valles de la rodilla izquierda del Titán, sus manos heladas las apretó ligeramente para resguardar algo de calor que tenía en su cuerpo, era otoño y sin dudas el frío característico del lugar se hacía notar conforme los minutos transcurrían; la razón de estar en ese lugar era que sus dos amantes la esperaba allí, no tenía demasiadas expectativas de lo que fuera, esperaba que no fuese una barrabazada, porque de ser así les gritaría, y les gritaría mucho por la indecencia de eso, pero no les creía capaz de hacer eso, por ahora.

Vio aquel acogedor domicilio tallado en madera, propiedad de los Bligth. Amity estaba en uno de los parales, tomando una taza de té de hadas con miel, el humo que salía de la misma desprendía ese dulce y suave aroma que se esparcía por el aire. La humana llegó a abrazarla con cariño, premiándola en su llegada con un leve beso en sus labios, uno muy suave y corto.

—Hola amor —saludaba la humana—, ¿cómo estás?

—Bien cariño, ¿y tú? veo que estás algo helada —comentaba y respondía la muchacha de cabello teñido, dejando su taza en el respaldo.

—Oh, sí, es que no pensé que haría tanto frío y me vine con este suéter, es algo sencillo y no da nada de calor —menciona ella, sintiendo el frío escurrir en su nariz—. Espero y no resfriarme, sería el colmo que eso pase.

—Lo sé, pero, tranquila, Hunter y yo te cuidaríamos.

—Jeje, gracias chicos —agradecía la morena, sonriendo.

—¿Ya llegó Luz? —interrogaba una voz ronca y masculina en el fondo de la cabaña.

—Ya querido —comentaba la chica-; ven a saludarla.

El muchacho rubio salió a recibir a la chica, Luz se le abalanzó abrazándolo con fuerza y cariño, llenó de besos su rostro, el muchacho sonreía con cada beso de la latina, bajándola al suelo le correspondió de la misma manera, rellenando su rostro de muchas caricias, mientras tomaba sus manos.

—Luz, estás helada —decía Hunter—, incluso adentro hace algo de frío, parece como si hubieras metido las manos en un hechizo de hielo.

—De hecho, así fue, por error toqué una de las hojas que tenía esa runa y cargué como por 2 minutos el hielo, por suerte no me quemé —respondía, agitando levemente las manos.

—Ay no Luz, y con este clima solo se te resecaran más —Amity tomó la mano de su compañera, metiéndola en la bolsa del abrigo, en la otra sostenía su taza—. No queremos que se lastimen tus manos, sino, ¿qué tomaremos cuando salgamos a pasear?

—La verdad no sé chicos, no sabía que esa hoja se iba a encender —dijo Luz en su defensa.

—Ten más cuidado cariño —comentaba Hunter, entrando de nuevo—, mira, ¿Qué te parece?

La muchacha vio el fondo de esa casa, era muy hogareño y acogedor, más por la brisa cálida que cubrió su cuerpo al escuchar como la puerta se cerraba, Amity se fue unos instantes atrás para abrazar la cintura de su pareja, estaba algo sonrojada por el acto, pero era algo que disfrutaba de hacer.

nunca más estarás sola, Luz Noceda.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora