No supe cómo llegué aquí....
- a, no?, No sabes?
Bueno...si sé pero no sé porqué, si me amaban tanto... porqué me llamaste?
- eso tú deberías de saberlo querido ¿Recuerdas cómo llegaste aquí?
Si... aún
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Era un día como cualquier otro, solo que lluvioso y muy frío, me gustaban esos días ya que mi familia me dejaba estar dentro.
Se me dificultaba caminar lo admito, eh estado con ellos desde hace ya ocho años, jeje los mejores de mi vida sí.
Recuerdo que estaba en la sala de la casa y ellos se encontraban en la cocina muy unidos.
De pronto... comenzó ese sufrimiento
No podía mover parte de mi cuerpo y mis patas estaban temblando, era un dolor horrible y comencé a llorar para que mis dueños se fijaran lo que me pasaba ya estaba viendo borroso pero seguía al tanto
Mi amada familia...como los quiero tanto
Me llevaron a casa de la abuela, amo estar donde ella. Ahí me pusieron una correa y me ataron a un árbol de almendra, como olvidar la frescura y la sombra de ese árbol....haha
Yo seguía llorando de esos dolores insoportables, mi familia estaba preocupada y de la nada, comenzaron a llorar comigo.
Yo les decía "no se preocupen estaré bien" " luego jugaremos y saldremos a pasear"
Era más que evidente que no me entendían y al escucharme lloriquear rompieron en llanto...
"¿Este es el adiós?" Pensé, aún no estaba listo, no todavía, tenía mucho que hacer y decirle a mi querida familia.
Todos estaban reunidos ahí, esperando nada más
Yo quería irme de ahí,
Si ese hiba a ser mi despedida no quería que ellos me vieran sufrir y partir así pero algo me impidió...la cadena a la que estaba atado al almendro no podía irme de ahí y alejarme de ellos.
De la nada, un niña se me acercó más a mí y la saludé meneando mi colita. Ella casi en llanto me levantó la oreja derecha y me susurró al oído
"No te preocupes por nosotros, ya hicistes más que suficiente, te quiero y siempre te querré, no me enojaré si te vas. Solo...no nos olvides.
Claro que no los olvidaré
Aquellas palabras fueron lo último que escuché y dentro de unos minutos ya estaba de nuevo, pero está vez podía verme a mí mismo en el piso sin moverme. Todos estaban llorando aún más al lado de mi cuerpo,
¿Ya no puedo hacer nada más?
Comencé a ladrar para hacerles saber que estaba ahí con ellos, que no estaba mal ni nada, quería repetirles lo mucho que los quiero y les agradezco, quería abrazarlos por última vez al menos
No...no estoy listo aún- llora
Estuve horas con ellos sin que notaran mi presencia, lo único que podía hacer era verlos y llorar juntos.
Ví como me abrazaban cuando dejé de moverme, ví cómo me cargaron, ví como me enterraron y llevaron flores del jardín y mi juguete favorito, ví como se despidieron.
Fue tan doloroso. Estar ahí sin que te noten y verlos sufrir sin poder hacer nada.
Ya era muy viejo...
Así...fue como llegué hasta aquí supongo...
- así es cachorro, la vida no es injusta, todo tiene su propósito, a veces pierdes y a veces no, todo es justo aquí, a veces tienes que aprender a dejar ir lo que más amas, es una prueba para ti y ellos, pero no fue para eso que te llamé, no era para arrebatarte todo.
No?
-no, es porque en mi ejército celestial necesito a alguien más...como tú mi pequeño
De veras?
- sí, así es, eres el indicado
Supongo que sí puedo, aunque no quiero alejarme de mi querida familia.
- no hay problema de eso, puedes ir con ellos cuando quieras, además que tú labor es protegerlos a ellos de todo mal
Acepto.
Luego de admitir ya mi final, unas puertas se abrieron de par en par, ya era momento de entrar...no había vuelta atrás, no podía hacer nada ya
- vamos...
¿Soy un buen perro?
- el mejor...fuiste el mejor que pudo haber...
