𝐎𝐧𝐞 𝐒𝐡𝐨𝐭𝐬- 𝑻𝒐𝒌𝒚𝒐 𝒓𝒆𝒗𝒆𝒏𝒈𝒆𝒓𝒔

𝑪𝒉𝒊𝒇𝒖𝒚𝒖 𝑴𝒂𝒕𝒔𝒖𝒏𝒐.

4 Noviembre 2005

Mi mano tomo un paquete de comida para gato, para después ponerla en la pequeña canasta para caminar hacia los collares que estaban cerca de ahí, uno con estampado de vaca llamo mi atención, sonreí  con emoción poniéndolo también dentro de la canasta.

Camine a la caja donde me esperaba el chico que era encargado del turno, agite mi mano en forma de saludo y con una sonrisa me recibió.

-¿Encontraste todo lo que buscabas? - Me recibió la canasta para subirla al mostrador.

-Uh, me hace falta la arena ¿De casualidad tienes en almacén?- aquel chico solo asintió y se metió a este.

-¿Cargarás esto tu sola hasta tu casa? -salio con una bolsa mediana para dejarla dónde estaba mi mandado.

-Estas vez no ha venido mi abuelo, pero para eso tengo mi mochila- la quite de mis hombros para  mostrarsela.

-Mi turno acaba en unos quince minutos, ¿Te parece si te acompaño?- me ayudó a meter las cosas a mi mochila para mirarme fijamente- Hace mucho que no veo a tu madre, me gustaría pasar a saludar.

-¡Claro! ¿Te espero afuera?- este nego para después pasarme la silla donde estaba sentado- Mamá estará gustosa de verte después de tanto tiempo.

-Me pegará con el periódico por desaparecer mucho, como solía hacerlo cuando éramos pequeños- Solto una leve risa mientras se apoyaba en el mostrador sosteniendo su cabeza.

-¡POR CIERTO! Oh dios casi se me olvida- me levanté y corrí a la mochila a un lado de este- Te traje un pequeño obsequio- le extendí la pequeña cajita.

-Oh ¿y esto?- miro fijamente la caja para después recibirla y abrila- Son galletas! ¿En forma de gatitos?- alzó la mirada y me sonrió de lado.

-En efecto, quería regalarte unas de vampiro pero mamá me regaño- suspiré y lo abrace-

-Despues de todo no todos los días se cumplen Quince años ¿No, baji?- me recibió el abrazo con mucha fuerza, haciéndome quedar sin aire.

-Gracias idiota, te quiero mucho- pasó su mano por mi cabello y me sonrió- es hora de irnos andá, iré a avisarle a la señora que ya me voy, espera afuera.

Me separé de él para tomar la mochila y salir, ya era tarde no tardaban en cerrar la tienda las calles estaban tranquilas y mucha gente quitaba los arreglos de halloween, la mayoría empezaba colocar los adornos de navidad me ponía un poco melancólica por la simple razón de que nunca tuve amigos con quién salir a festejar.

-¿Lista? Vamos- empezó a caminar rápido, un suspiro salió de mi ¿Para que diablo me dice que vayamos juntos si se va a ir corriendo? Me detuve al ver que el lo hizo para después voltearme a ver- Vamos sube.

Mi cara fue de terror al ver una motocicleta frente mío, mi mirada se dirigía al mounstro ese y a la motocicleta.

-Estas loco si crees que me subiré a esa cosa después de lo que pasó! - lo apunte enojada y a la vez con nerviosismo.

-Solo fue una vez! Además tenía 11 años cuando paso, no sabía mucho andar en motocicleta, ahora soy todo un experto, anda mueve tu tracero y súbelo a la maldita moto- me quito la mochila para después alzar su pierna y patearme detrás.

-Sube tu primero, o me voy caminando- me miro con una ceja alzada para después mover su mano señalando la banqueta- Bien! Me subiré pero no por eso!- Me subí lentamente y me acomode.

-Pero esto me pasa por andar amigando con un  pandillero más orgulloso que yo, pero algún día me voy a largar a el extranjero para cambiar mi identidad y vivir con puros gatos para después morir sola- Murmuré molesta para recibirle la mochila al idiota que me miraba con burla.