Capitulo 04 - Final Encantador

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Grandes golpes comenzaron a escucharse en la área boscosa del país de te, árboles comenzaron a caer sin ninguna explicación hasta que apareciendo al escucharse otro gran golpe salió el pelinegro que bloqueaba su rostro con su antebrazo, los golpes parecían más fuertes y buscaba la manera de detenerla..

- Me tienes asombrada, resistes los golpes que hubieran matado a cualquiera haces que me intrigas más - decía la Senju.

- Cada golpe viene dirigido a mi pecho busca mi corazón, debo hacer lo posible para contraatacar - solo decía mientras sus heridas curaban rápidamente.

- Regeneración instantánea eso es un problema - solo decía la rubia.

- Perdón por la espera, ahora puedo contra atacar - decía el uchiha.

- Naruto por qué diablos no la acabas de un solo golpe - decía Kurama.

- Así como sasuke quiero despertar mi Sharingan en esta batalla, se que ella quiere matarme así que me será de mucha ventaja - decía el pelinegro.

- Debo acabarlo rápido, no activa su Sharingan acaso cree que no lo necesita para luchar conmigo - decía la rubia.

- Bien, de acuerdo el estilo de batalla de tsunade así podré acostumbrarme a su taijutsu - decía el rubio frunciendo sus manos, cuello y pies.

- Que cree que hace - se preguntaba.

- Perdón por la demora - solo exclamó.

- Vamos no ten.. (Puff) ahhh - sintiendo todo el dolor del puñetazo que el uchiha había conectado en su estómago.

- Creo que puedo estar a su ritmo - decía el pelinegro.

- Que demonios ocurrió, mis piernas están temblando mi estómago me arde acaso ese golpe fue grave, aunque mi cuerpo este curandose el dolor persiste - decía callendo de rodillas y escupiendo saliva.

- creo que me pasé - solo decía el rubio.

- No digas tontería sigue con la batalla - solo dijo isobu.

- Acaso te rindes tsunade - San - decía el pelinegro.

- Rendirme... Jamás me he rendido y no lo haré contra un idiota como tu - decía adolorida.

- Entiendo, entonces seguiré - decía mientras realizaba sellos de manos.

- Estilo de fuego - Jutsu bola de fuego - comenzando a expulsar una inmensa llamarada hasta crearse una bola de fuego que se dirigía rápidamente hacia la Senju.

- No me jodas - solo refutó chocando sus manos en la tierra encrustandola y levantarla como un fuerte muro el cual choco con la gran volá de fuego provocando una gran explosión saliendo expulsada..

- Me sorprende que ella haya podido hacer eso, su fuerza sobrehumana siempre me ha llamado la atención - decía el uchiha al ver una gran cantidad de humo al su alrededor.

Madara solamente quedó en silencio miraba de un lado a otro buscando la precensia de la Senju pero parecía imposible tal acto, hasta que de forma instantánea el pelinegro miraba casi en su rostro aparecer el puño de la rubia que hiba directo a terminarlo pero el asombro fue que este la desviara enseguida, golpeando el suelo y crear un pequeño cráter..

- Ya me preguntaba que hasta cuando activará tu Sharingan - decía la rubia al ver los ojos color escarlata junto a ellos tres tomoes..

- Debo agradecerte ese puñetazo hubiera sido un dolor de cabeza para mi, pero sabía que era la única manera de despertar mi Sharingan - decía el uchiha.

- De qué diablos hablas aho.. (Puff) - solo mirando aparecer al pelinegro frente a ella para de un solo caer inconsciente.

- Fue estúpido naruto y arriesgado - decía Kurama.

- Valió la pena, aunque si hablamos de tsunade la suerte nunca está a su favor - decía este comenzando a cargarla.

Los minutos pasaron el pelinegro solamente admiraba el paisaje de la villa cuando poco a poco escuchaba los quejidos de la Senju denotando su conciencia..

- Así que ya despertaste - decía el pelinegro de forma neutra aún observando la villa.

- Por qué tienes tanta fuerza, no mire tu último ataque - decía la rubia.

- No te preocupes ya te cure las heridas, veo que cuando en tablas una batalla solo buscas regenerar las heridas externas pero las Internas no, por eso flaqueabas en tus ataques el dolor te impedía seguir luchando - decía el pelinegro.

- Y ahora que harás, vas a matarme - pregunto.

- Creo que teníamos una apuesta si no me equivoco - decía alzando una copa de sake.

- Así que buscas embirracharme y así propasarte conmigo - decía la rubia.

- No soy de esos tipos tsunade - San solamente trato de disfrutar el momento - respondió mirando a la rubia con una gran sonrisa.

- pues eso quiero ver, desde ahora te digo no soy tan fácil como a las que te rodeas - solo dijo tomando al copa y tomar un sorbo.

- Eso lo sé - solo decía.

Ya comenzaba a caer las 3 de la mañana ambos seguían caminando por la villa hasta que la Senju deteniendo su caminar indicaba que ya había llegado a su destino..

- Así que hasta aquí hemos concluido nuestro encuentro - decía el pelinegro.

- Eso parece - decía dudoza.

- Bueno, me dio mucho gusto conocerte tsunade - San espero más adelante poder vernos y disfrutar como la velada anterior - decía el pelinegro.

- Solamente exentaremos la pequeña discusión de hace poco - decía la rubia haciendo que ambos comenzarán a reirse.

Los segundos pasaban y ambos solamente se miraban mutuamente hasta que la mejilla de la ojo miel comenzó a sonrojarse, el pelinegro por su parte parecía agitado hasta que de forma simultánea ambos comenzaron a acercarse y entrelazar sus labios en una pasión desenfrenada, la rubia entrelazaba sus manos en la nuca del pelinegro para seguir con los besos apasionados y el uchiha la levanto haciendo que se entrelazara sus piernas en su cintura..

- Segura que quieres seguir - decía el pelinegro rompiendo el beso.

- Creo que esa no era la pregunta - decía la rubia.

- Cuál es tu habitación - pregunto.

- La segunda a la izquierda - decía aun besando al pelinegro y llegar a la habitación para seguir con la diversión.

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