Amor no correspondido...
Me despierto a la misma hora de siempre, nunca puedo dormir pasadas las 4, es como si tuviera una alarma automática y mi cuerpo sepa a que hora exactamente debe levantarse pero solo que una poco averiado.
Me levanto de la cama y voy directo al baño con Toby (mi perro) todavía recuerdo cuando me lo dieron, era un perro de la calle y lo habían abandonado, lo encontramos en un campo que había detrás de mi vieja casa, su madre estaba muerta a su lado con sus hermanos y la enterramos en el mismo lugar que la encontramos. Cuando vi a Toby supe que era el, tenia que ser todos sus hermanos estaban saltando y tratando de llamar la atención pero él, estaba apartado a un lado y me miraba con esos ojos que no me pude resistir, puede porque me haya identificado con él. Suplicando que me vean de entre todas las personas, que alguien me elija por encima de todos.
Cuando salgo del baño ya bañada son las 4:39 hoy no tengo nada que hacer, normalmente en vacaciones consigo algún trabajo de verano pero hasta ahora no conseguí nada o tal vez es que no hay buscado realmente. Me visto y bajo las escaleras, tomo una manzana y salgo por la puerta de casa con toby a hacer mi recorrido diario. En realidad es de noche pero mi barrio no es peligroso y aunque lo sea, de chica me hicieron estudiar defensa personal, mi padre siempre me dijo "nunca esperes que te salven, puede que al final la única que pueda hacerlo seas tú" eso fue una de las cosas que me dijo antes de morir, a veces lo extraño tanto que siento que esta a mi lado, escuchándome y diciéndome "todo va a estar bien princesita" recuerdo que me enojaba ese apodo pero en estos momentos daría todo por volver a escucharlo una vez mas, y me abrace como solía hacerlo, dormirme en sus brazos tal y como solía hacerlo.—me rio para mis adentros—siempre termino en le mismo lugar, en donde él solía traerme.— me salgo de mis en pensamientos, cuando alguien se aclara la garganta a mi espalda y me doy la vuelta para verlo.
—No sabia que alguien mas venia a esta hora a una plaza.—me dice con una sonrisa de lado, esta vestido como alguien que saldría a esta hora a una plaza si es que eso es posible, es alto pero no traje mis lentes y me es difícil verlo bien.
Le doy una sonrisa en respuesta y me doy la vuelta —Es mi salida mautina.
—Creo que tenemos diferentes conceptos de lo que es la mañana según yo aun es de noche.— se sienta a mi lado.— Entonces... siempre sales a esta hora?
— ¿Te gusta hablar en la mañana?
—Noche y si, soy de esas que las mandan callar porque no quieren que siga hablando normalmente es con alguna grosería pero la gentes siempre es creativa. ¿Que hay de vos?
— No, para nada, pero a mi padre le encantaba, solía ponerme los auriculares para no escucharlo, no soy una persona muy charlatana pero ahora daría un ojo de la cara para que me hable cada mañana—paro de hablar, porque me doy cuenta que le estoy contando mi vida personal a un extraño— perdón, no se porque te conté eso.
Me mira en silencio y ahora que puedo verlo de cerca, me doy cuenta que tiene ojos miel, me encanta este color.
—No hay problema, la gente normalmente me cuenta sus problemas, creo que tengo eso que a la gente le genera confianza. Si me preguntas a mi, me encanta escucharlos a veces las personas necesitan descargarse pero no lo hacen porque no tienen con quien y ahi es donde aparece mi gente.
—Gracias, por escucharme digo, pero si tengo amigos.
—¿Que gracias? Son 200 pesos—admito que me saco una pequeña risa que necesitaba— ahi esta.
—¿Que cosa?
—Tu sonrisa, sabia que era hermosa.
No se porque pero eso ultimo hizo que mi corazón latiera un poco mas rápido de lo normal y no pudiese sacar mi mirada de él hasta que él volviese a hablar.
— Me tengo que ir, pero me alegra haberte sacado una sonrisa.—dice mientras se levanta el banco.
—Gracias—le digo con una sonrisa y él me la devuelve.
— Ha y nunca dije que no tuvieras amigos, solo que no tenias con quien realmente hablar.
Y así se fue, y en ese momento creí que no lo volvería a ver nunca mas y por eso me guarde cada gesto, cada sonrisa porque fue en ese momento que decidí enamorarme pero lo que no sabia que esos ojos color miel me iban a destrozar y hacerme la persona mas feliz al mismo tiempo.
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Mi amor no correspondido
Teen FictionDina es una chica que tiene problemas para dormir y siempre se levanta a las 4 de la mañana porque no es capaz de seguir durmiendo (que obvio tiene un porque) pero que pasa si te digo que en una de sus salidas nocturnas se encuentra con alguien esp...