Parte uno

1K 65 5
                                    

Advertencia: puro sexo. Y Yoongi celoso (aviso para que no lo veáis tierno, los celos son tóxicos we)

Pd: se me ocurrió escuchando Swalla de Jason Derulo.

~[♡]~

Min Yoongi llevaba observando desde hace un buen rato a cierto chico de pelo rosa divertirse con quien supuestamente era el hyung de aquel alocado grupo que se juntó para pasar la tarde.

Estaban en el piso que compartían Yoongi y Jimin desde hace unos meses, aunque el mayor de ambos no quería que se juntaran allí, el menor hizo caso omiso y en plena regañina de Yoongi, Jimin ya había avisado a Jin y los demás para que viniesen.

-maldito algodón de azúcar...- pensó Yoongi al ver la cercanía entre Jin y Jimin. En esos meses de convivencia Yoongi pudo saber lo inocente que podía ser Jimin, pero también pudo saber lo buenísimo que estaba. Jimin era la tentación en persona y Yoongi sabía perfectamente que un día de esos perdería la cabeza por su culpa.

Jimin actuaba tan tiernamente, cuando hablaba con él, el pelinegro se derretía al ver sus hermosas facciones: su rostro de bebé, su sonrisa que provocaba que sus ojos se cerrasen, su esponjoso pelo rosado que cubría su frente dándole un aspecto más tierno, qué decir sobre cuando se avergonzaba... sus pómulos se hacían más notorios dejando ver un color carmesí sobre estos y tímidamente se cubría con sus manitas.

Si para Yoongi esto era una tentación, imaginaos cuando el chico aparecía caminando con poca ropa a través de la casa. La primera vez que lo hizo, la mandíbula del mayor casi roza el suelo y acabó encerrado en el baño intentando aliviar su dolorosa erección. Jimin iba con un ajustado bóxer negro que apretaba y resaltaba la musculatura en sus muslos, sus abdominales estaban marcados, tal vez no tanto pero lo suficiente para hacerle caer la baba a cualquiera, su cuerpo en sí era el pecado. Yoongi se las tuvo que arreglar para no saltarle encima.

Volviendo a la situación actual, Jimin se encontraba jugando al piedra, papel y tijeras con Seokjin tan ajeno a todo y todos. Un gruñido leve se escapó de su garganta al ver como Namjoon se unía al par y se puso al lado de Jimin para a continuación rodear su cintura con su brazo izquierdo.

Afiló la mirada e hizo lo posible para no ir a atacar cual fiera. Sus ánimos decaían al percatarse de que él no era nada para Park Jimin.

La falange medial de un dedo índice empujando su barbilla hacia arriba de manera suave rompió ese debate mental en su cabeza. Intentó fulminar a quien le había hecho eso, también intentó ocultar un poco su vergüenza.

-Se le estaba cayendo la baba, hyung- la voz de Jungkook se hizo presente y Yoongi le golpeó el brazo con un poco de fuerza al notar la burlona voz de su menor, Jungkook se quejó pero aun así se quedó al lado del mayor, sentándose en el sofá - Hacen buena pareja ¿No?-, Yoongi miró de reojo a Jimin y Namjoon quienes estaban algo acaramelados. Podía notar las mejillas rojas de Jimin desde su lugar y eso le provocó unas ganas de ir directamente allí y matar con sus propias manos a Namjoon.

-Lo que me faltaba...- Hizo el amago de levantarse pero Jungkook le sujetó del brazo.

-¡Hyung no sea así! Jimin ya es un adulto, no se comporte como un padre celoso No prestó atención a lo que le dijo su menor ya que la histeria recorrió sus venas al ver como su mochi estaba siendo abrazado ahora por Taehyung, este lo mimaba como si fuesen novios de hace años.

-A la mierda todo- susurró soltándose del agarre de Jeon. Mironeó el salón y cogió a la primera persona que se le cruzó: un Hoseok intentado buscar algún aperitivo. El pobre se asustó al sentir como alguien lo tiró de su brazo, por un momento hasta creyó que lo habían capturado in fraganti robando comida, Hoseok era bastante asustadizo. Pero se le pasó al ver que era Yoongi y su corazón pudo volver a latir.

Swalla  •YoonMin• [OS]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora