Pérdida De Voz. [ Todobaku +18 ]

| ¬ I N T R O D U C C I Ó N ¬ |

Mié, 29 de Septiembre.

>>><<<>>><<<

El lunes había llegado, lo que significaba que tenía que volver a los dormitorios de la Academia.

Bakugo caminaba por las calles dando pisadas fuertes dejando claro que : "acércate y tu muerte es segura."

No estaba de humor... Bueno, ¿cuándo estaba de humor?

Exacto, nunca.   

No le gustaba convivir con los extras, como él solía llamarlos, pero aquello no era del todo cierto. Con el tiempo había aprendido a tratar con ellos, incluso podía afirmar que les tenía un grano de afecto... Claro, el cenizo jamás lo admitiría.

Pero como siempre, él  prefería su soledad. Últimamente la pasaba más tiempo sólo que con el bakusquad como le decían algunos, había aprendido a ser más observador y analítico... Sin embargo, cada vez sentía, con más frecuencia, que él no encajaba con ellos.

Todos decían que tenía pasta de ser un villano... Bakugo no quería eso, él quería ser el Héroe número 1 y estaba dispuesto a luchar por su meta, pero la opinión pública le afectaba de sobremanera, aunque no quisiera admitir aquella verdad.

Suspiró cansado por el camino que habían tomado sus pensamientos, él también era humano, él también podía sentir...

Estaba tan sumido en sus pensamientos que no se había percatado que había chocado con  algo, más bien alguien, lo que llevó a que ambos cayeran de sopetón en el pavimento.

— ¡Atrapen a ese delincuente! — Gritaba la policía señalando un punto detrás suyo.

En cuanto se recuperó, se volteó para ir en busca de aquel imbécil que se interpuso en su camino. Grande fue su frustración al darse cuenta que la policía le había perdido el rastro.

¡Mierda!

— Muchacho, ¿te encuentras bien? — Los dos policías se acercaron a él, estaban preocupados que el villano pudiera haber usado su Particularidad en el momento que esos dos habían chocado.

Por el contrario, Bakugou frunció el ceño con frustración, ¿tan débil creían que era?

—...

Bakugou quería gritar varias barbaridades, quería hacerles ver que no era débil, pero su voz no salía.

Los policías le miraron confundidos, el rubio cenizo habría la boca, movía sus labios y manos tratando de que le entendieran.

¡Mierda! Debe ser la Particularidad de ese bastardo el que no me pertime hablar.

— Chico, ¿podrías decirnos con palabras lo que te sucede? No te entendemos tu extraña manera de querer comunicarte. — Dijo el policía número dos, como había decidido llamarlos el menor.

Bufo enojado. No se podía ser tan estúpido para no darse cuenta de la situación... o eso creía.

Sacó de su maletín una pluma y una hoja, en la cual escribió :

"  ¡Malditos extras! ¡No puedo hablar por la particularidad de ese hijo de put*! "

— ¡El vocabulario, muchacho! — Le regañaron los mayores.

Rodó los ojos con fastidio, ya llegaba tarde a clases. Ya entendía porque los Lunes eran el peor día de la semana.

.