Una Virgen Para La Millonaria Rusa

CAPÍTULO 1

-Vamos, Camila. ¿No querrás llegar tarde a tú propio cumpleaños?.

-Ya voy- respondió Camila a su compañera de piso mientras acababa de arreglarse. Cuando miró al espejo, quedó sorprendida por la transformación.

Habiendo crecido entre pastos de ganado, en el centro de California, la idea que Camila tenía de arreglarse era ponerse unos vaqueros limpios y unas botas. Pero hoy era su veintiún cumpleaños y sus amigas habían insistido en celebrarlo en Imperium, una discoteca nueva de San José. El local tenía normas de etiqueta, y para sus amigas había sido un placer prepararle el modelito perfecto para la fiesta.

-¡Camila!

-Voy. Voy.

Su vecina Dinah le había prestado un vestido palabra de honor plateado, que se ajustaba a las curvas a la perfección.

Al ser un poco más baja que ella, el largo del vestido resultaba más modesto en Camila, le llegaba justo por la mitad del muslo. Se giró una vez más frente al espejo. Sus radiantes ojos marrones se fijaron en el reflejo, y vio como su pelo castaño caía en hondas, tenía buen aspecto.

Cuando salió del cuarto del baño, sus tres mejores amigas silbaron y jalearon, mientras ella se daba una vuelta para mostrar el resultado. Ally, Dinah y Normani, sin dejar de reír comenzaron a cantar un desafinado cumpleaños feliz, y su compañera de piso, Ally, le plantó delante un cupcake con una vela encendida. Camila sonrió a sus amigas, pidió un deseo y sopló fuerte para apagar las velas.

-Espero que hayas pedido un nuevo novio- dijo Normani en cuanto salieron por la puerta.

-Shawn no tiene nada de malo-replicó Camila- Me ha pedido disculpas por no venir esta noche, tiene que trabajar. Además, prefiero pasar mi cumpleaños con vosotras.

-Aunque no hasta muy tarde ¿Vale?  Tengo una entrevista por la mañana.

-Ejem, ejem- replicó Ally a la vez que arrastraba a su amiga al coche.

                     *********

Cuando llegaron a la disco, la fila daba la vuelta a la esquina, Camila iba a ponerse al final, pero Dinah la agarró por el brazo y siguieron caminando hacia la puerta.

-Está noche no hay filas para nosotras- dijo Dinah aproximándose al cordón. Unos de los porteros se adelantó al ver acercarse a las chicas. Sonriendo alegremente, le dio un abrazo a su hermana Dinah y las invitó a pasar.

-Feliz cumpleaños, Camila

-Gracias, Seth- dijo Camila entrando en la discoteca, y luego le dio un codazo a su amiga susurrando- Me alegro de que tu hermano trabaje aquí. S

-¡Venga!- exclamó Normani cuando subieron a la plataforma que había sobre la pista de baile- arriba hay mejores.

Cuando las chicas se acomodaron y pidieron sus bebidas, Normani y Ally se inclinaron sobre la barandilla para echar un vistazo a la pista.

No eran ni las diez de la noche, y la discoteca estaba en pleno apogeo. Un montón de cuerpos ondulantes se movían al ritmo de las mezclas de música dance.

Examinado a la gente, las chicas descubrieron en la pista de baile una figura familiar. Dándose la vuelta, Ally hizo un gesto a Camila y a Dinah, que se unieron a ella en la barandilla. Camila bajó la mirada para ver a Shawn bailando con una morena vestida con una camiseta sin mangas y una falda corta.

Camila se agarró con fuerza de la barandilla al ver a su novio besando a la chica mientras salían de la pista de baile. Se instalaron en la barra, pero ella se quedó de pie entre las piernas de él, mientras continuaban acariciándose y besándose.

Rodeando a su amiga con su brazo, Dinah le preguntó:

-¿Quieres que le diga a Seth que lo eche?.

Enderezando los hombros, Camila negó con la cabeza.

-No, tengo una idea mejor- y cogiendo su teléfono, empezó a escribir un mensaje para Shawn.

-Hola cielo, te echo de menos. Esto no es lo mismo sin ti. ¿Como va el trabajo?
-Muy aburrido. No puedo creer que me hayan hecho venir hoy. ¿Y tú que haces?
-Ya sabes, con las chicas. Dime. ¿Que opinas de mi modelito?
-¿Me has enviado una foto?
-No, pero si te giras y miras para arriba lo verás.

En cuanto Shawn levantó la vista vio a Camila y sus amigas observándolo. La morena parecía no tener ni idea de lo que estaba pasando e intentó abrazarlo de nuevo, pero él la apartó a un lado. Mientras Camila lo miraba fijamente con su copa en alto, el móvil de Shawn anunció la llegada de otro mensaje:
-Vete a la mierda.

Camila se dio la vuelta, dibujó una sonrisa en su rostro y miró a sus amigas. Levantó su copa y se la bebió entera, agitándola  después, haciéndole una seña a la camarera.

-Vamos a emborracharnos- propuso Camila a sus amigas, quienes rápidamente acabaron con sus copas para pedir otra ronda.

Bueno, el primer capítulo, es de madrugada aquí pero no lo voy a poder subir hasta mañana en la mañana creo, en fin pongan una estrella que es más difícil de lo que pensé que sería, cualquier error ortográfico me lo dicen para corregirlo, bye besitos