ADVERTENCIA.
El siguiente libro puede contener lenguaje zoes que puede resultar ofensivo para algunos espectadores, consumo de sustancias nocivas para la salud, escenas no aptas para sensibles. Se recomienda discreción.
"La sed de sangre y venganza...
El capítulo contará con algunos temas fuertes y/o sensibles para ciertos espectadores, si eres sensible a estos por favor abandona la lectura y evita dejar malos comentarios.
El siguiente capítulo puede contener lenguaje zoes que puede ser ofensivo para ciertas personas, escenas con contenido gore y/o descripciones graficas fuertes, referencias y/o escenas de abuso sexual, el siguiente capítulo no es apto para sensibles.
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se recomienda discreción.
Previamente...
- ¡No te permito que le hables así! - Se acercó ChangBin, quitando de forma brusca a Chan, para seguido subirse sobre su captor, para seguido tomarlo de la camisa y azotarlo contra el suelo.
- ¡¿Quién te crees?! - Pregunto Minho - ¡Acaso crees que no me puedo defender! ¡Jodete ChangBin! - exclamó, y en respuesta ChangBin dejo de azotar al contrario, levantándose para comenzar una discusión con Minho.
- No puede ser.... - Dijo I.N mientras se masajeaba la cien - ¡Podrían dejar de discutir!
....
- <<Los odio, no se por que los hice debutar>> - pensó Chan, mientras tenía que estar gimiendo, se avergonzaba y sabía que sería así hasta el día de su muerte.
Seungmin le hizo señas "Lo estás haciendo bien", cosa que Chan tomo muy mal, le dio una cara de culo, para seguido sacar el dedo medio en mensaje de "jodete"
...
Su captor, estaba siendo retenido por los tres chicos, si buen era un poco más fuerte que ellos, no dejarían que escapara. Se encontraba forcejeando mientras que los chicos pensaban en que hacer, ¿deberían asesinarlo?, no era mala idea pero no era lo correcto, Minho tomo el cuchillo en sus manos, estaba decidido, tenía que hacerlo, debía asesinarlo.
- Vamos.... Hazlo, si es que puedes - Dijo para seguido soltar una carcajada y tirar la cabeza hacia atrás cerrando los ojos.
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Oscuridad... Todo lo que veía era oscuridad, no había nada más que oscuridad, entonces despertó.
- ¿Chicos? - Pregunto con la vista nublada mientras podía ver tres sombras sobre él, ¿Acaso eran ellos?
- ¡Cierra tu maldita boca! - exclamo Minho, Felix fácilmente había reconocido su voz.
- ¿Minho.... Eres tú? - pregunto confundido, no podía levantarse, sentía como le presionaban el cuerpo.
