Neon Lights [ClexaAU]

Capítulo 5: ¿Qué sucede contigo?

Capítulo 5: ¿Qué sucede contigo?.

— ¿Qué te traes? — preguntó Bellamy cuando Lexa entró a la habitación. —

— ¿Qué me traigo con qué? — respondió mientras tomaba uno de los mandos de la PlayStation —

— ¿Qué hacías en la habitación de Clarke? —

— Hablando con ella. —

— ¿Sobre qué? —

— Sobre el clima cara de hamburguesa ¿vamos a jugar o qué? —

Lexa odiaba que su amigo se pusiera tan pesado cuando se trataba del tiempo que pudiera pasar junto a Clarke, había sido así desde siempre y aquello era algo que a Lexa le molestaba mucho, habían pasado tantos años y aún no entendía porque Bellamy la celaba tanto, y más con ella, que sabe que no la tocaría, nunca.

< ¿Nunca? >

La idea de Lexa era quedarse allí esa noche, podría pasarlo en su casa, tranquila, descansando sin ningún tipo de ruido o molestias, pero no, prefería pasar aquel día libre con las personas que más quería, con las personas que sentía su familia de alguna manera.

Lo que si no tenia, eran ganas de soportar los celos irracionales de su amigo. Lo bueno era que sabia que se le pasaría pronto, más que nada cuando estuvieran sumergidos de lleno con algún juego de la PlayStation.

Luego de su segunda derrota, Bellamy decidió poner el juego en pausa e ir a la cocina por algo para beber mientras esperaban que el repartidor de pizza llegara.

— ¿Por qué no cambias esa cara? — preguntó Lexa luego de golpear a Bellamy con el pie. —

— Es increíble que nunca pueda ganarte un maldito partido de futbol. —

— Soy la mejor, debes admitirlo. —

— Haces trampa. —

— Es un maldito videojuego, ¿Cómo se supone que haga trampa? —

— No lo sé, pero lo haces, eres una maldita tramposa. —

Bellamy tomo uno de los cojines que estaban sobre la cama y la golpeo en el rostro, algo que Lexa no se lo esperaba ya que le hizo voltearse gran parte de la cerveza encima. La mini guerra con cojines termino cuando el timbre sonó.

— Déjame pagar esta vez. —

— Estas en mi casa, eso significa —

— Significa que eres un gilipollas y yo voy a pagar la pizza. —

Lexa se alejo de Bellamy y salió de la habitación, hurgueteó en sus bolsillos mientras iba caminando hacia la puerta de entrada.

— ¡Un minuto! — gritó cuando el timbre volvió a sonar. — disculpa, estaba buscando el... —

Lexa se quedo callada justo en el momento que abrió la puerta, del otro lado no se encontraba el repartidor de pizza. Por más que intento evitarlo, la cara de pocos amigos e le instalo rápidamente cuando volvió a ver a aquella mujer, estaba casi segura de que ella no la recordaba, pero Lexa sabía muy bien quien era.

— Hola, lo siento... ¿Se encuentra Clarke? —

— No. — mintió aun siendo consciente de que no debía hacerlo. — digo, no lo sé. —

— Oh... ¿Podrías...?

— Claro, dame un minuto. — dijo mientras cerraba la puerta detrás de sí. —