Me acuerdo de aquel día ¿quién diría que la chica que se sentó enfrente de mí en mi curso de japones iba a ser la chica que me condujera a tí? en ese instante esa chica solo había saludado, no habíamos hablado.
después de 5 ó 6 semanas, después del examen de nivelanción, esa chica que mi hermano y yo habíamos bautizado como ''chibi'' nos pusimos a armar un rompecabezas, en ese momento, tanto por el tamaño de ella y su actitud, le calculaba unos 9 ó 10 años de edad. La pasamos bien ese día, aunque no pudimos armar el rompecabezas, estúpidos rompecabezas japoneses. Chibi y yo empezamos a hablar por facebook, como siempre, me gustaba molestarla, le decía chibi aunque a ella no le gustara, ya que suena débil y tierna, todo lo contrario a ella, le hace ironía al sobrenombre.
Chibi me presentó a una chica, en la cual la bautizé en mil sobrenombres, no había un momento en que no paraba de inventarle un sobrenombre, claro eso los inventaba con el plazo en que la conocía, ¿te soy sincero? ¿quién diría que chibi tendría en ese entonces 13 años? ¿ y quién diría, que yo, alguien que siempre había dicho que nunca le iba a gustar alguien menor que yo, que se había burlado de mis amigos por gustarle a chicas menores que ellos, me llegaras a gustar? en el momento en que chibi te me presentó tenias su misma edad, en ese momento no me gustaste, si no fue en el plazo que te conocí. Había algo que me llamaba de tí, eras linda, cachetona, cuchi, hermosa, creativa, inteligente, odiosa, me encantabas, eras todo lo que yo deseaba de una chica, con solo un detalle, que no eras pelirroja, pero eso no es de importancia, pero eso no era todo, había algo que me atrapaba, que me hacía esperar que te conectaras para hablar contigo.
Chibi planeaba días para vernos, pero por razones x, nunca se pudierón. Recuerdo aquella tarde del 2 de agosto, eran alrededor de las 3, y solo eran un par de semanas antes del estreno de aquella película, tu estabas en ese Centro Comercial que solo queda a media hora caminando de mi casa, yo, por supuesto te lo coemnté así que improvisamos, me vestí lo más rápido posible y como no tenía dinero, me tuve que ir caminando, tu estabas comiendo, y por causa de tus brackets nuevos, tenias que comer lento, así que tenía tiempo. Llegué, quedamos en vernos en la librería, pero no fuí a la librería si no que fuí al comedor, a buscarte ahí, pero no te ví, del largo camino y de tanto pensar y emoción de que nos íbamos a ver se me había olvidado, empezé a buscarte, tenias que estar en algún lado bajé al segundo piso y bingo mientras caminaba, en un cruce, ahí estabas, más linda en persona no me lo creía, por fin te veía, te saludé, e presenté como si fuera la primera vez que nos conocíamos, empezamos a caminar a buscar la librería, bajamos al primer piso y entramos, hablamos y estaban esos silencios, no incómodos, al menos no para mí, yo estaba contigo y eso me gustaba, no hubo beso, pero no me importo mucho, al menos te pude ver.
Solo estuvimos por media hora, luego te tuviste que ir, me arrepentí por no pedirte en que nos tomáramos una foto, me acordé en el camino a casa, seguimos hablando por facebook, siguió el tiempo, y cada vez que contaba la experiencia todos esperaba un beso, y cuando decía que no hubo se decepcionaban, y empezabas algunos con la burlas, que fastidiosos
Aquél 31 de enero, hasta ahora me parecía uno de mis mejores día, pasé todo un día contigo, concía a tu madre, aunque no intercambiamos muchas palabras. Pero, ahora comprendí que no fué un buen día para tí hasta el momento en que metí la pata, alrededor de las 3:30 te pedí que nos besáramos, después de haberte mordido un cachete, luego de tantos no que me diste, proseguí a robarte uno, eso te hizo molestar, y fué la causa de que te comportaras así conmigo, cuando supé eso de túí, entendí que no debía seguir estúpidos consejos de mis amigos, entendí que por ahora te querías centrar en los problemas que tienes ahora y no en el chico que piensa que me puede conseguir con ese movimiento para chicas fáciles, no quería hacerte sentir así, no digo que seas así, fuí un imbécil que se movía según sus amigos. De ahora en adelante, me moveré solo, no lo sé si me darás una segunda oportunidad, no creo. Pero, me alegraría mucho si me la dieras, se que esto te podrá sonar a palabrerías, pero te lo podría demostrar con hechos, y si no me la das, te agradezco por todos esos momentos, que, aunque no nos vimos, no pudimos vernos en persona y no pudimos ser algo, me hiciste reír, me hiciste disfrutar, tu y yo detrás de una pantalla hablando, era todo lo que tenía, y fue lo mejor que he hecho. Gracias por todo y perdón por todo. Eres grande aunque midas un poco mas de 1.50, espero que estés bien, y que en nosotros dos no halla resentimiento.
Como siempre, te querré, nunca te olvidaré aunque eso es lo que tenga que hacer, yo estaré bien, ya me las arreglaré por tapar este hueco, ya que la mayoría tengo yo la culpa, me encantó verte dos veces, y me hubiera encantado más que nos hubiéramos besado como es debido.
Ahora te dejaré tranquila, preocúpate de tus problemas, yo me preocuparé de los mios, los dos seguiremos nuestros caminos.
Sin mas nada que añadir, me despido, espero no para siempre, Te quiero, Ángel, Te quiero y siempre te querré.