capítulo 20

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Seis meses han pasado desde la última vez que vi James,y la verdad es que no sé cómo sentirme, me siento confundida, agotada, abrumada, desilusionada, nostálgica y sobre todo vacia

Nunca creí que el amor me hubiese ablandado tanto, nunca me espere que viniendo de mí me pudiese enamorar de alguien, pero aquí estoy, enamorada hasta la última célula de todo mi ser

Yo no soy quien para dar lecciones de amor, pero lo que se es que debería haber disfrutado más aquellos momentos juntos, aún sabiendo toda la verdad, porque lo bueno dura poco dicen

Toda mi vida luche por ser alguien reconocida a nivel mundial, y hoy en día lo estoy consiguiendo, he dejado  la base,es decir, mi vida como militar

No negaré que me duele el hecho de heberme alejado de algo tan importante para mí como ha sido eso,me crié prácticamente en la base, siempre veía por la ventana de la oficina de mi padre aquellos hombres y mujeres que iban decididamente a entrenar para en algún momento de sus vidas salvar, y proteger a su país, siempre los admire, y cuando tuve oportunidad no me lo pensé dos veces y entre, pero claro esta, como doctora titular, no iba a renunciar a mi otro sueño

Ahora mismo me estoy preparando para verme con un gran amigo, que también vive en Argentina

Quince minutos después salgo de mi casa para verme con el en un café

Al llegar, me acerco a la mesa donde el esta sentado

- Simon - digo sonriendo

- Hola -  dice

Pedimos lo que vamos a tomar y nos sentamos a charlar

Varias horas después, Simon ya se tiene que ir, y yo también, me queda una gran noche de estudio por delante, estamos a Octubre, y yo el año que viene me graduo, tengo que dar lo mejor de mi

Paseo por las calles de Argentina dejando que el viento sople en mi cara, "¿Que estará haciendo James?" esa es la pregunta que siempre suele rondar por mi cabeza

Al llegar a mi casa, me pongo una sudadera y unos pantalones de pijama mientras que  dejo que "Him & I" suene el los altavoces de mi casa

Con una copa de vino entre mis dedos,subo la música a todo volumen y dejo que mis preocupaciones se vayan, y que mejor forma de hacerlo si no bailando

Bailo al son de la música, intentado no pensar en aquel preso que me tiene loca, pero me es imposible,me lo imagino conmigo, aquí, ambos bailando como si no hubiera un mañana, ambos con una copa de vino entre las manos y disfrutando el hecho de estar juntos

U par de horas después, me detengo, y pienso en lo que debo hacer ahora mismo, sentarme a estudiar, sin interrupciones, por lo que dejo mi copa de vino a la mitad - que es lo único que me he tomado, un poco - apago la música y me siento a estudiar

Las horas pasan, y cuando menos me quiero dar cuenta, ya está amaneciendo

Por lo que me levanto de mi escritorio y me dirijo hacia la cocina para prepararme un cafe

Después de desayunar, me dirijo a la universidad, donde al llegar me siento en las filas de en medio, esperando a que venga la gente

La gente va viniendo, algunos me saludan y cada cual se va con su grupo de amigos, hasta que llega una señora mayor, rondará los sesenta años, su canoso pelo hace que sus ojos azules se iluminen más, busca un lugar donde sentarse con la mirada, no dudo en acercarme a ella y ofrecerle que se siente conmigo cosa que acepta encantada

Llega el profesor, y la clase transcurre rápidamente

Me causaba intriga el por qué la señora está en la clase, por lo que al salir de clases  me acerque a ella y le pregunte tímidamente

- Disculpe - comienzo tímidamente - ¿Le puedo hacer una pregunta?

-Hija, si lo que vas a preguntar es por que estoy aquí - dice con una sonrisa para que yo asienta levemente con un poco de vergüenza - Mi marido murió hace dos años por una enfermedad, los médicos nunca supieron el porqué murió,y tampoco intentaron nunca hacer algunas otras pruebas para ver que tenían, ellos simplemente decían que era algo inexplicable, pero yo siempre supe que no fue así, así que con la herencia que el me dejó, me metí a la carrera, porque me siento culpable por no haber podido ayudarle en algo, el sufrió solo, aunque yo siempre estuve a su lado, siempre me desesperaba el hecho de no saber lo que pasaba, así que intento buscar alguna cura para que otras personas no tengan que pasar por lo mismo que paso mi marido - explica conteniendo las ganas de llorar - Me tengo que ir, ya ha llegado mi hijo a por mi - dice haciendo una leve señal con la cabeza hacia un chico apoyado en un Mercedes

Se marcha sin darme tiempo a responder mientras que me dice con la mano "adiós" gesto cual correspondo

Me fijo en su hijo, un hombre rubio de ojos azules, medirá 1,90 si calculo bien, y es muy guapo, pero no más que James "¡No caigas estúpida! ¡Olvídale!" me digo mientras me doy una bofetada interna

Agarró el móvil rápidamente para marcar el telefono de Simon

-Hoy se va de fiesta - sentenció

-Pero-le interrumpo

-No pero ni peras, acabó de ver a un tío que me ha hecho replantearme lo del otro - digo, y el ya sabe a lo que me refiero

- A las nueve y media paso por ti - dice para colgar

Me voy a mi casa, pero justo antes tengo que ver si tengo correo en el buzón, lo abro y Agarró las cartas que hay, facturas, más facturas, una postal de Marc y Evelyn, más facturas... y una carta con un sobre rojo sangre

El miedo se apodera de mí por lo que me voy corriendo a mi casa y me meto dentro, dejo mis cosas en la encimera de la cocina y agarro el sobre con las manos temblorosas, y con cuidado lo abro

"Querida Adelina

Te echo mucho de menos, esta carta no es para asustarte, ni nada por el estilo, solo para que sepas que dentro de muy poco me van a soltar, y no dudaré en ir a verte, he estado meses en tu búsqueda, y por fin he dado contigo

Tu preso favorito

James Miller "

Me agarro a la silla para no caerme, y intento que mi respiración se regule, y con cuidado consigo no caerme

" Me está espiando "pienso con miedo

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El resurgir [#2] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora