Llamamé... Spider-Punisher

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En este momento, en la casa Parker, Peter estaba sentado en el sillón de la casa con la mirada puesta sobre el techo.

El de cabello castaño estaba muy pensativo con lo que ha acabado de pasar, realmente ya no se sentía seguro sobre lo que debía de hacer a partir de ahora.

Casi como de manera instantánea, el voltea a ver hacia una ventana que se encontraba ahí, y ahí ve que el clima estaba sin duda sombrío.

El cielo era cubierto por enormes y pesadas nubes grises, ademas de que la lluvia estaba cayendo con algo de fuerza mientras los relámpagos también estaban sonando con igual fuerza.

Sin duda el tener que ver un ambiente tan gris y oscuro como ese no le estaba ayudando en nada, y eso si era un hecho.

Perder a sus tíos sin duda suponía algo realmente grande y complicado para su vida, todo ha cambiado en varios aspectos posibles. 

Ahora... ahora el se había quedado solo, completamente solo en este mundo.

Y lo que lo hacia peor, era que eso había pasado por culpa suya.

Pero en ese momento, sus pensamientos se terminaron por disipar cuando escucha como alguien estaba tocando la puerta desde afuera.

Por lo que tras dejar salir un suspiro desde lo mas profundo de su boca, el chico se termina levantando del sillón en el que se encontraba para ir hasta la puerta.

Al momento en que se encuentra frente a la puerta, el de apellido Parker se queda como si estuviese meditando lo que estaba por hacer hasta que al final toma la perilla de la puerta para girarla y así terminar por abrir la puerta.

Es al momento que abre la puerta en el que el castaño ve que quien le acababa de tocar para que le abriera era un hombre que rondaba alrededor de los 40, con el cabello oscuro y ropa de estilo militar totalmente negra, sin embargo lo que en ese momento resaltaba en su ropa era el enorme emblema de la calavera blanca que estaba el frente de su camisa.

Al verlo, Peter estaba con una cara de no saber que decir ni mucho menos de que pensar al respecto.

-Hola Peter Parker, tenemos que hablar. -dijo el hombre con una expresión sumamente seria en el rostro.

...

En este momento, los dos ahora se encontraban en la sala de la casa Parker mientras Peter traía dos vasos de agua, uno para cada uno.

-Mi nombre real es Frank Castle, y podría decirse que soy un viejo amigos de tu familia para ser mas exacto... un viejo amigo de tu padre. -dijo el hombre ahora conocido como Frank con lo ultimo a la vez que dirigía su mirada hacia el muchacho.

Lo ultimo que escucho salir de la boca del hombre hizo que Peter abriera sus ojos a mas no poder, llevaba ya bastante tiempo desde que llego a saber algo de su padre, sabiendo solo que murió junto con su madre en un accidente de avión.

-¿Mi padre dices? -pregunto Peter quien aun estaba algo anonado por lo que escuchaba.

-Si, fuimos compañeros durante la preparatoria, pero después de la graduación perdimos el contacto ya que el fue a la universidad y yo me termine enlistando en el ejército, en los Marine para ser mas exacto. -dijo Frank con lo ultimo para luego tomar un sorbo de su vaso de agua.

-Entiendo, pero si tu me conoces es porque mi padre y tu se volvieron a encontrar en un punto posterior, ¿o me equivoco? -pregunto Peter con lo ultimo a la vez que arqueaba una de sus cejas.

-Se ve que eres tan perspicaz como tu padre chico, pero no, no te equivocas. -decía Frank para luego dejar salir un suspiro y empezar a hablar de nueva cuenta. -Unos años después de que me uní a los Marines, pedí un permiso para poder estar con mi esposa y mis hijos, un día que salimos me encontré con tu padre, para ese entonces el y tu madres ya se habían casado y... estaban a la espera de su primer hijo, o sea tu. -termino de decir el hombre a la vez que señalaba al muchacho.

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