III » I heard a rumor...

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Hyungwon alzó una ceja extrañado cuando las risas desaparecieron apenas introdujo la llave en la cerradura de su morada. Entró a casa invadiendose de un olor a comida chatarra y bebidas energéticas. Si eran bebidas energéticas, ¿Verdad?

Aquellas latas tenían que ser bebidas energéticas.

Tan rápido como pudo se cambió de zapatos, después colgó su mochila en el viejo perchero detrás de la puerta, fue entonces cuando se dirigió al intento de sala de estar. Como era de costumbre su hermano menor estaba sentado de piernas cruzadas en el suelo, Hyungwon bromeaba sobre que ese sitio tendría el trasero de Hyeongjun marcado, ya que siempre se sentaba ahí, era normal para Hyungwon llegar y encontrar al menor sentado haciendo tarea o viendo la televisión y ese día no era la excepción.

Ahí estaba el menor, viéndolo desde abajo con una sonrisa, su par de ojos grandes y llenos de vida.

Pero no estaba solo.

Del otro lado de la mesa había una presencia desconocida para Hyungwon. El mayor seguía teniendo una mueca de disgusto en su cara, el contenido de aquellas latas lo tenían intranquilo.

—¡Llegaste temprano!— dijo Hyeongjun con una sonrisa. Hyungwon asintió.

La curiosidad lo carcomía, Hyungwon se tiró en el sofá soltando un suspiro, ambas figuras en el suelo lo miraban extraño. ¿Acababa de romper una burbuja de ambiente?

No creía. Esa era su casa. Pensó Hyungwon.

¿O la rompió?

Se acomodó en el sofá para tomar una lata de la vieja mesita de centro, tomó de su contenido sin previo aviso.

—¡Hyung no...!— dijo Hyeongjun estirando sus brazos para intentar evitar que bebiera el contenido, pero no fue lo suficientemente rápido. Hyungwon sintió la mezcla de sabores en sus papilas gustativas, dulce y agrio, de reojo leyó la leyenda del envase.

Bebida carbohidratada sabor Sandía y cítricos.

Hyungwon suspiró aliviado.

—¿Hum?— dijo dejando la lata sobre la mesita.

—Es que esa no era mía— dijo Hyeongjun en una mueca, su cara era una mezcla de asco y de pena. Hyungwon abrió los ojos —Es de mi amigo— dijo.

Hyungwon miró a la persona del otro lado de la mesa, había estado ahí siendo un espectador y no había mencionado nada.

—Buenas noches— saludó la persona, Hyungwon alzó una ceja, no muy seguro, ¿Era de la edad de Hyeongjun?

—Es un amigo del instituto, estamos haciendo un proyecto— dijo el menor.

Así que sí era del instituto.

¿Desde cuándo el instituto permitía uniformes entallados? Se preguntó Hyungwon a sí mismo.

El menor se removió en su lugar causando que Hyungwon lo mirara, tomó un par de hojas esparcidas por la mesita para evitar que se fueran a manchar, fue entonces que Hyungwon se cuestionó desde cuándo permitían los tatuajes en las instituciones educativas. Recordó cuando acompañó a Minhyuk en su cumpleaños dieciséis a hacerse un tatuaje de una ballena, sí, a escondidas de sus padres.

Es que a esa edad no saben lo qué hacen, pensó Hyungwon.

—Por cierto, soy Changkyun— saludó el extraño para Hyungwon.

—Soy Hyungwon, su hermano mayor— dijo, el menor asintió. Hyungwon se preguntó que tan irresponsable tenía que ser para que fueran las casi diez de la noche y el menor siguiera usando su uniforme institucional —Por cierto...¿Qué bebida es esa, eh?— preguntó curioso, realmente desconocía su procedencia e incluso el envase era desconocido para él.

A little bit of love » Hyungki [ EDITANDO ] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora