1

56 7 0
                                    

Las clases, habían empezado ya en Londres, todos los estudiantes estaban emocionados, otros no tanto, ya que se venían demasiadas responsabilidades, y pues era volver a la aburrida y sencilla rutina de todos los días, ir a la escuela, trabajos, regresar a la casa y tener tareas y pendientes para entregarlas a los profesores. Las vacaciones de verano habían pasado demasiado rápido. Apenas empezaban las clases y los jóvenes ya querían que las vacaciones de invierno llegaran.

Para Brian May, un chico de 24 años y con excelentes calificaciones, pensaba que no era tan malo, pues aparte de volver a sus estudios, significaba ver a sus amigos otra vez, ver a John y a Freddie, quien tenían varios y largos años de amistad. Con ellos podía mostrarse como realmente es, ellos no lo juzgarían por nada. Les tenía bastante confianza, y pues eran la compañía perfecta para el, ya que sus padres, en si lo amaban demasiado, en eso no había duda pero... desde que tiene memoria, casi nunca pasaban tiempo con el por estar en el trabajo, pudo entender que necesitaban trabajar para que el pudiera estudiar, tener vestimenta y comida pero a medida que pasaba el tiempo, ya tenían una situación —económicamente hablando— estable, pero aún así, seguían sin ponerle atención. Por eso desde temprana edad, se había estado refugiando en la biblioteca de su casa, le habían llamado la atención los diferentes temas literarios de todos esos libros llenos de polvo, que estaban en su hogar.
Cada vez que se sentía solo, iba a su lugar preferido, para que con todos esos libros, con criaturas fantásticas y las más bellas doncellas del reino le hicieran "compañía" y pasara su tiempo, que dejara de pensar en la ausencia de sus padres.

Cuando se hizo un poco más grande, también empezaba interesarse por la astronomía,leyendo e investigando sobre las maravillas del universo. Ese era siempre su pasatiempo, su rutina, ir a la escuela, regresar a su casa y leer un libro tras otro. No era alguien muy sociable, no tenía ni la menor idea de cómo hacer amigos, hasta que un día todo eso cambio, conoció a sus dos mejores amigos. Que hizo que su rutina — que en ciertos aspectos le cansaba— se volviera más interesante y divertida.

Pero volviendo al presente, El chico de ojos hazel se estaba preparando para poder ir a sus clases, tenía bastante emoción de volver a ver a sus amigos.

— Brian, cariño, llegarás tarde a la escuela...
Dijo su madre quien estaba con el desayuno listo, en el comedor. El desayuno era la única comida del día que compartía con sus padres.

— Ya voy mamá...— finalizó poniéndose sus zapatos, para después tomar su mochila e ir a la planta baja.
— Buenos días padre, madre...— los saludo sentándose en frente de su papá.

— Buenos días Hijo...— dijeron ambos padres al unísono, mientras que Ruth le entregaba su desayuno, con una taza de té caliente, hacía demasiado frío y Harold, su padre, mantenía su vista en el periódico que estaba leyendo...

— ¿Estas emocionado por tu regreso a clases? — dijo la madre del rizado mientras también se sentaba a comer su desayuno, acompañando a Brian y su padre...— Si madre, ya quiero volver a ver a mis amigos...— contesto de forma amable mientras tomaba la taza humeante de té entre sus manos.


La familia May terminó de desayunar, y salieron de su casa, los padres de Brian hacía el trabajo y el se dirigía a la escuela. Las temperaturas eran demasiado bajas, haciendo que se acomodara bien su bufanda y empezara a caminar hacia el instituto, disfrutando la bonita pero fría mañana.

🌕

Por otro lado se encontraba, un chico rubio, de nombre, Roger Taylor , preparando el desayuno, para el y para su padre. Tratando de hacer el mejor esfuerzo posible para no despertarlo y hacerlo enojar, no era conveniente que sucediera todo eso, o al menos para el.

𝐵𝐴𝐽𝑂  𝐿𝐴 𝐿𝑈𝑍  𝐷𝐸  𝐿𝐴 𝐿𝑈𝑁𝐴 [𝙈𝙖𝙮𝙡𝙤𝙧]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora