Capítulo. 2

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Mi primer día del instituto no pudo ser peor, todo empezó así ...

Me levanté como todas las mañana, luego fui al armario donde escogí la ropa que ponerme, una camiseta negra con un bugdoll francés en blanco, y después unos vaqueros ajustados  con unas mustang negras. Después de haberme vestido, fui al cuarto baño donde me cepillé mi largo pelo oscuro. Recordé en ese momento que iba ser mi primer día de instituto, por lo que decidí maquillarme un poco. Así, conseguí resaltar mis ojos verdes. Cuando acabé en el cuarto de baño decidí desayunar.

—Buenos días Cassandra, ¿preparada para tu primer día de clase?—Comentó tía Liss mientras me pasaba los cereales.

—Me hace mucha ilusión.— Respondí con algún tono sarcástico.

—La abuela te tiene un regalo para ti. ¡Corre a ver qué es!—Resaltó Liss

Fui corriendo hacia la habitación de mi abuela. La encontré sacando una caja misteriosa del armario, de ella sacó un collar de plata que sostenía un anillo.

—Esto fue de tu padre... pruébatelo.— Dijo ella, entregándome el precioso collar.

Lo coloqué alrededor de mi cuello. Cuando tocó mi piel, no lo pude creer pero me estaba dañando, poco a poco, la piel. Creí que sería un especie de alergía. Mi abuela me miró asustada durante unos segundos. Entonces se puso a buscar en un cajón y encontró una cuerda. Tras ella pasó el anillo. Y me lo puso:

—Así, la plata del colgante no te hará ningún daño, cariño.— Comentó ella fingiendo una sonrisa. Algo le estaba preocupando

—Gracias, abuela— Agradecí mientras me jugaba con el curioso collar.

Preparada para el día que me esperaba, me dispuse en camino hacia el instituto. Por el camino puse música para que se haga más alegre el trayecto. Al llegar al instituto me quede algo impresionada ya que nunca había podido estar en un centro educativo. Y así comenzó mi día en el instituto...

Cassandra DráculaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora