Seventh

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Encarar a la realidad suele ser difícil. Lo fue para Sunoo antes de tener que darle fin a lo suyo con Sunghoon.

Últimamente las cosas no funcionaban entre ellos, Sunghoon llegaba estresado del trabajo y cualquier cosa lo irritaba, sumándole la paciencia inexistente que Sunoo tenía, todo explotó.

Por un tiempo, Sunoo lo entendió, dejo que Sunghoon le gritara y lo tratará mal porque al final de cuentas sabía que la situación pasaría, o esa era su motivación, solo que él también tenía sus propios problemas como lo eran la escuela y la presión de su familia.

Era un dia tranquilo, Sunoo se encontraba en la mesa del comedor de su departamento con Sunghoon mientras hacia unos trabajos que debía entregar dentro de dos días. Después de un par de horas Sunghoon regreso a casa con ese humor que lo caracterizaba esos días, no sabía el porque, ya lo había intentado hablar pero el contrario no había puesto de su parte, y él estaba bastante ocupado para seguir insistiendo.

Las cosas pasaron bastante rápido, Sunghoon fue directamente hacía él para reclamarle un par de cosas sin sentido, Sunoo lo ignoraba, pero llegó a un punto en el que las palabras de Sunghoon lo rompieron y entonces él también se puso a la defensiva, gritándole todo lo que lo habia estado molestando ese tiempo, que él no era el culpable de sus malditos problemas, y que gracias a sus comentarios de estos últimos días su ansiedad había regresado. El silencio reino unos segundos en el comedor, y después se escuchó un "Si no te gusta, entonces solo desaparece" por parte de Sunghoon antes de que este diera media vuelta y fuera a la habitación.

Sunoo se sentó, reflexionando todo lo que había pasado hace unos momentos mientras que de sus ojos rodaban las lágrimas y él ni siquiera se daba cuenta de eso.

Lo pensó mucho, él sabía que tal vez Sunghoon había dicho eso por la situación, pero aún así Sunoo estaba convencido de lo que haría, por eso mismo, esa noche no durmió y se encargó de terminar sus trabajos mientras lloraba, la mañana siguiente se fue a la escuela antes de que Sunghoon despertará, y regreso antes de que el contrario lo hiciera.

Ordenó el lugar como si nada hubiera pasado, tomo sus cosas y las empacó para llevarlas hacía el auto que su madre le había regalado tiempo atrás.

Su objetivo era irse antes de que Sunghoon regresará del trabajo, había colgado ya su mochila en sus hombros, era lo último que faltaba, pero cuando iba hacía afuera se encontró con Sunghoon entrando al lugar.

Ambos se miraron y ninguno se movió, Sunghoon fue el primero en reaccionar y dió un paso hacía enfrente para tomar una de las manos de Sunoo.

"¿Saldrás a esta hora?"

Sunoo solamente asintió, no sabía si podría hablar sin quebrarse después de haber tomado su decisión.

"Bebé, sobre lo de anoche, yo quier-"

"Está bien, ¿Si?, ya no tiene importancia, solo hay que olvidarlo.."

Los labios de Sunghoon se abrieron para decir algo pero al momento se cerraron, sorprendido por la forma tan rápido en la que su novio había dejado pasar esa discusión.

"Debo irme, no me esperes para cenar, ¿Okey?"

Sunghoon asintió lentamente, y antes de que Sunoo se alejara, lo atrajo hacia su cuerpo para dejar un corto beso sobre sus labios. Sunghoon no tenía idea de que ese sería el último. "Te amo" Murmuró al separarse.

Sunoo sonrió levemente, y tomó todas sus fuerzas para poder responderle con un "Y yo te amo a tí" antes de salir.

El resto solamente pasó, Sunghoon se sentó en el sofá y observo todo el lugar, había algo extraño, lo sabía, pero no entendía el qué. Pasaron horas cuando decidió darse un baño y entonces al abrir el armario noto que las cosas de Sunoo no estaban, comenzó a entrar en pánico, reviso todo el lugar y no había nada de Sunoo.

Entonces repitió la escena de hace rato en su mente y se dió cuenta de lo obvio que era todo, Sunoo pidiéndole que no lo esperé para cenar, las llaves de su propio auto en mano, cuando a él ni siquiera le gustaba manejar, y después el rostro de su novio, sus pequeños y largos ojos hinchados, como si horas atrás hubiera estado llorando, su fina nariz teñida de un rojo y sus mejillas del mismo, y después estaba la parte más importante y era que Sunoo no lo había dejado disculparse, si tan solo él lo hubiera hecho, tal vez lo hubiera detenido. Pero no, él se dejo llevar por el momento e ignoró el temblor en los labios de Sunoo mientras lo besaba y le decía que lo amaba.

No, eso no podía estar pasando. Él no quería perder a Sunoo. No quería que las cosas terminarán ahí. No, todo menos eso. Él no quería que las cosas pasarán de esa forma.

Cuando tomó su teléfono y marcó el número de Sunoo se dió cuenta de que definitivamente ese era el fin. El celular de Sunoo era lo único que quedaba de él en esa habitación, y estaba debajo de su almohada, timbrando por la llamada de Sunghoon una y otra vez.

Si algo caracterizaba a su novio era que nunca soltaba su celular porque ahí tenían todos sus recuerdos. Pero Sunoo lo había dejado, habia solamente desaparecido como Sunghoon le había dicho, y con ello, dejando su objetó más preciado en poder de Sunghoon.

𝐅𝐎𝐑𝐆𝐄𝐓, (sunsun)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora