Una vida contigo

Voy por ti

Yeimmy dudo un buen tiempo, en si ir o no ir donde Charly, era una persona muy orgullosa, odiaba aceptar que alguien más tenía razón y mucho más pedir perdón

Luego de una media hora pensando, salió tomo las llaves del auto y subió a el , busco en internet la dirección del hotel que le dijo Charly y fue hacia el.

Antes de subir miraba el hotel una y otra vez como si se tratara de un juego mortal el entrar allí.

Charly lo llamaban de un número desconocido y el contesto

-¿Aló?
-Caribonito mañana te toca la primer cuota, no se le olvide
-Ah mijo todo bien

Charly no recordaba el pago, y maldijo, el pensaba poder cancelarla con el primer pago de la canción con Quimera, pero ese proyecto ya no se iba a hacer y estaba un poco desesperado sin saber que hacer, hasta mañana se lanzaría "otra oportunidad" y en el primer día no recogería todo

Yeimmy luego de procesarlo, había decidido subir, pero evitó ser anunciada por lo que el no la esperaba todavia

Charly estaba angustiado, sin saber que hacer para evitar meterse en problemas, cuando escucho que golpeaban la puerta, miro extrañado, pero recordo que Yeimmy le dijo que iría, dijo para sus adentros "La indiferencia con ella al parecer funciona, haberlo sabido antes" y río suavemente, se miro al espejo, organizo su cabello y se colocó una camiseta. La dejo esperando un tiempo frente a la puerta mientras la observaba por el ojal, ella estaba llena de ansiedad y miraba el reloj cada diez segundos, cuando vio que ella se iba a retirar abrió la puerta

Charly al verla no dijo una palabra y solo abrió los ojos mostrando su impresión

-¿Puedo seguir?
-Hacele decía inclinando su brazo hacia dentro de la casa
Charly tomaba el cuaderno en el que escribio sueños, lo cerraba y lo guardaba en un cajón.

Yeimmy se sentó en una orilla de la cama

-¿Bueno y entonces? te escucho, dijo Charly.

Yeimmy miraba hacia todo lado y todavía no empezaba a hablar.

-¿No tenes nada que decir?

-Ay Charly ya, déjame organizar mis ideas

-Okey, okey... Decía el levantando sus manos y posicionandose reclinado en una pared

Yeimmy lo observaba, tan atractivo como siempre con esos ojos azules, que no dijo nada y se levantó sin una palabra previa lo besó.

El le correspondió el beso por un momento pero luego la separó de el.

-¿Que pasa? Dijo ella
-Tu crees que las cosas se solucionan con un beso Yeimmy
-¿Es enserio?¿Te beso y eso es lo que vas a decir?

Charly mordía su labio inferior porque le encantó el beso, extrañaba los labios de Yeimmy pero se resistió a caer de nuevo como perro faldero

-Cuando sepas que quieres decir volves le dijo abriendo la puerta

Yeimmy lo miro con enojo y salió rápido de la habitación maldiciendo

-Este imbécil cree que que, le voy a rogar entonces, no mijo... Está muy equivocado

Se subió de nuevo hacia al auto y se devolvió a la casa.

En el momento en que Yeimmy salió Charly seguía pensando en que hacer para pagar la cuota de su deuda, empezaba a caminar en círculos por la habitación, pensaba una y otra forma, pero nada era una buena idea.

Se fue a dormir ya no sabía que hacer, así que pensó que era lo mejor esperar hasta mañana

Amanecía de nuevo, el amanecer sin Yeimmy lo estaba matando poco a poco, odiaba infinitamente estar así con ella pero también sabía que Yeimmy le debía disculpas y no iba a continuar así como si nada, cuando el siempre estaba detrás de ella y muchas veces sin cometer errores, ese día luego del beso de Yeimmy la noche anterior se sintió mejor y más decidido, Charly llamaba a Quimera.

Ella apenas escucho su teléfono y vio su nombre en la pantalla no dudo en contestar

-Hola mi rey dijo ella
-Hola quimera ¿Cómo estás?
-Bien, pero no tan bien como tú
-Necesito hablar contigo ¿estás sola?
-Si, para ti siempre estoy libre
-Dame la dirección de dónde te estés quedando y salgo para allá

Quimera corrió a arreglarse, se maquillada, alistaba su cabello y se vestía con ropa sensual, algo corta y con escotes.

Charly bajaba las escaleras para subir a su auto y enfrentar la situación con la seriedad que lo ameritaba, pensó por un momento en algo que lo salvaría de otro mal entendido, así que volvió a llamarla

-Uy pero estás ansioso por verme contesto Quimera
-¿Sabes?, mejor veámonos en la cafetería del hotel prefiero no subir
-Uy pero tranquilo que no va a pasar nada de lo que te arrepientas
-Quimera ¡porfavor!
-Bueno no importa aca nos vemos, y me dejó invitar lo que quieras me gusta tu lado detallista si lo sabías...
-Quimera yo ya sal...

No se escuchó más, Charly no había terminado su frase
-¿Charly?¿Rey?¿Estás ahí?

Quimera remarcó pero el celular sonaba apagado, ella supuso que se le había descargado el celular o que había quedado sin señal porque ya iba en camino a donde ella se encontraba.

Siguió arreglándose y poniéndose atractiva para la visita de aquel hombre que alborotaba sus hormonas, con la ilusión de que ese día tuvieran un encuentro pasional, que estaba esperando desde que lo vio de nuevo aquella noche en el club de Medellín.

Paso aproximadamente una hora y Charly no aparecía, Quimera volvió a llamarlo pero el celular seguía dirigiendo a correo de voz, pensó para ella misma:

-Ya se arrepintió, no entiendo en qué momento se volvió tan indeciso. Si era un arrebatado loco... Eso era lo que a ella le encantaba de el.