Bruno Lombardi, 29 años.
El mafioso y narcotraficante más temido del país, todo el mundo lo considera como el rey de la mafia, cruel, sin sentimiento alguno, si alguien se interpone en su camino simplemente lo elimina.
Victor Moore, también uno de...
--Muy bien, si, te he dicho que si mierda!! Tal vez en una semana viaje para allí, adiós!--Dije cortando la llamada
Estoy harto de negociar y que den tantas vueltas para trasladar la mercancía, tengo que ir personalmente yo y verificar que todo salga bien y no vuelva a ocurrir.
Dejé mi celular en mi escritorio y me acerqué a uno de los estantes donde tenía todo tipos de licores y me serví un poco en en vaso.
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Tomé un sorbo hasta que tocaron la puerta de mi oficina.
--Adelante--Dije
Entró erik uno de mis hombres de seguridad.
--Dime erik--Dije serio
--Señor, tenemos a la chica, esta abajo en la sala--Dijo
--Genial erik, traigan a esa perra aquí--Dije bebiendo de mi vaso
--Si señor--Dijo saliendo de la oficina
Me senté en mi silla mientras esperaba ver a esa perra! La maldita hija de perra de ese maldito que me estafó, ella pagará por lo que hizo su padre, victor moore no sabe con quien se metió, y su querida hija pagará por eso.
Luego de un rato escuchaba gritos ahogados hasta que abrieron la puerta y pude ver a cuatro de mis hombres de seguridad y a la chica, tenía sus ojos vendados con un lazo negro y otro lazo en la boca para que no gritará, también tenía sus manos atadas a su espalda, la perra gritaba igual y era insoportable.
--Aquí esta señor, como usted lo pidió, la raptamos cuando salía del centro comercial--Dijo uno de mis hombres de seguridad
--Buen trabajo, sueltenla en el suelo--Dije serio
Uno de los hombres la empujó bruscamente y calló al suelo de rodillas, no dejaba de sollozar como una niña su pelo castaño claro casi rubio le cubría el rostro que apenas se le veía.
--Pueden irse--Dije
Una vez que salieron cerré la puerta con llave y me acerqué a ella.
--Sabes porque estás aqui!!?--Pregunté
--Humm hmmm--Solo soltaba gritos ahogados mientras negaba y lloraba
--Seguro que no sabes perra!!? Estas seguraaa!!!?--Grité en su oído
--Hummm hmmm--Negeba desesperada
--Bien... haré que te creo, pero yo te diré porque estas aquí, más bien... por quién! Sabes por quien dulce hanna? Por el maldito de tu padre! Por ese hijo de puta tu estas aquí, el me estafó... y tu pagarás por eso, le daré donde más le duele, y quién más que su querida hija!--Dije riendo
--Humm!!!--Gritó negando y comenzando a arrastrarse hacia atrás tratando de llegar a la puerta
--Ven aquí estupida!! No escaparas de mí!!--Dije arrastrandola, tomándola de su cabello y tirando su cabeza hacia atrás
