La semana paso lenta para Ángela ya que tenía muchas ganas de ver la luna de colores.
Desde pequeña, sus padres la llevaban a verla y no dejaba de mirarla hasta quedarse dormida.
El miércoles, al salir de la escuela, Ángela y Willow fueron juntas a casa como de costumbre.
- Has oído ka leyenda de la luna de colores? - Le preguntó Ángela a Wilow
- Cuál, la que cuentas todos los años? - Respondió Willow en tono sarcástico
- Por lo menos podrías no haber sido tan borde-
- Lo siento - dijo Willow- haber, cual es esa leyenda-
- Ya no importa - contestó Ángela en tono dramático y después empezaron a reír.
Cuando se dieron cuenta ya estaban en frente de sus casas.
Después de unos cuantos días de madrugar para ir a la escuela, llego el viernes.
Wilow, Lucas y Ángela quedaron a la tarde, fueron a comprar refrescos y los guardaron en la neverita que había traído Wilow junto con los sándwiches de jamón y queso que había echo su madre.
Cuando llegaron al descansillo, tendieron las toallas que habían traído y empezaron a hablar de la teoría del doctor John.
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Los cuatro mundos
FantasyDependiendo de tus cualidades, te asignan un mundo, en el que podrás vivir rodeada de las personas más compatibles contigo. Pero un día una joven muy curiosa decide atravesar sola la barrera de su mundo enzarzando así a sus amigos y todo el reino en...