ɪɴᴛᴀᴄᴛᴏ. [KM 국민]

5

Capítulo 5

Jungkook

"Eso fue mejor que cualquier cosa sobre la que haya leído alguna vez." Jimin pronuncia después de unos momentos de silencio.

"Estoy tan contento de que me hayas encontrado." Puedo escuchar el asombro en su voz y me da ganas de inflar mi pecho con la certeza de que lo puse allí. Le acaricio el cuello con la nariz y le doy un mordisco de la piel y él se ríe. El sonido se hunde en mí, haciéndome sonreír. No sabía que la risa de alguien podría hacerte eso. La idea de no tenerlo nunca me asusta. Lo abro más fuerte.

"Ahora me perteneces, pequeño. Soy tu dueño." Creo que sigo diciéndolo en su beneficio y en el mío. Él siempre será mio, sin importar lo que pase y quiero asegurarme de que lo entienda. Especialmente ahora con mi polla desnuda enterrada dentro y mi semen se escapa de su culo. Estoy seguro de que podría quedar embarazado con lo mucho que le puse, pero seguiré haciéndolo solo para asegurarme de que eche raíces. Para asegurarme de poseer cada parte de él. Lo necesito.

"¿Por qué estabas aquí solo y esperándome?" Estoy seguro de que esta es una pregunta que debería haber hecho antes de tomarlo, pero no hubo suficiente tiempo entre verlo y la necesidad de que él me pegara como un maldito camión. Deslizo la mano entre sus piernas y le doy cobijo a su pene, jugando con ella y sosteniéndola posesivamente mientras él cuenta su historia.

"Fui criado por mi abuela. Murió hace unos meses y he estado solo desde entonces. Tuvimos algunas personas que vivían aquí y me ayudaron a cuidar el lugar, pero se marcharon el otro día y yo no sabía lo que iba a hacer. Nunca me llevo a ninguna parte para ver cómo es el mundo exterior. Todo lo que sé, lo aprendí de los libros, y ni siquiera eso es mucho". Suspira y me acaricia.

"Estoy tan contento de que me hayas encontrado, Jungkook. Estaba empezando a asustarme. Nunca antes había visto a otra persona a parte de las que ya vivian aqui, y te vi de pie allí, sabía que vendrías a rescatarme." Lamo el caparazón de su oreja y lo beso justo debajo.

"Si otra persona te habría visto, no tengo ninguna duda de que habrían intentado tomar lo que ahora es mío." Empujando un poco en él, le muestro lo que quiero decir.

"Pero te he tenido primero, y tú serás mío para siempre." Escucho la sonrisa en su voz y no puedo esperar más. Lo tomo de nuevo. Una vez más y luego podemos hablar, entonces puedo cuidar de él.

Salir, odio la pérdida de su culo, pero tiro a Jimin sobre su espalda y luego sobre él, no puedo evitar sentirme como un dios. Su dios. Lo poseeré y gobernaré sobre su cuerpo por el resto de su vida.

"Tienes suerte de ser yo quien te encontró, Cariño. Nadie te tratará mejor que yo. Tendrás todo lo que siempre has soñado y más. Todo lo que tienes que hacer es preguntar y lo haré aparecer. Serás el que me posea, el que posea mi corazón dulce niño."

Sus brillantes ojos de gatito me miran y sonríe convirtiendolos e medias lunas. Sus manos se juntan alrededor de mi cuello y levanta sus caderas en invitación para que vaya más profundo. Inclinandome, presiono mis labios en los de él. Su dulce sabor inunda mis sentidos y empiezo a empujar. Sus delgadas piernas se envuelven alrededor de mi cintura y pienso en cuánto tiempo ha pasado desde que ha comido. Él es demasiado delgado y necesita aumentar de peso. Me ocupare de todo eso sin embargo.

Moviendo mi boca por su cuello, muerdo y chupo la suave piel a medida que avanzo. Cuando llego a su pecho y veo sus pezones endurecidos, no puedo evitar llevarlos a la boca. Los chupo tanto como puedo en mi boca y lamo a su alrededor. Su cuerpo se estremece ante la sensación, sus dedos cavan hacia atrás.

"Solo una vez más, pequeño. Solo te necesito una vez más y luego puedo cuidarte." Ladeo su cuerpo y me sumerjo en su pequeño culo, teniendo posesivamente su pene en mis manos, brindandole el suficiente placer por ambos lados, acercandolo a su climax además de tambien estar acercándome a mi propia liberación. Él va a tener marcas pero todo lo que hace es encenderme más. Me aseguraré de que esté cubierto. Formar una familia con él es lo siguiente.

"Mío." gruño en su cuello, sintiendo su culo apretándose ante mis palabras. 

"Sí." Su voz es solo un susurro mientras llega al climax sobre mí, aferrándose a mi cuerpo sobre el de él. Él grita mi nombre y empujo tan lejos como puedo una última vez y vacio un montón de esperma caliente dentro suyo. Sintiendo cómo cada pulso se cuela dentro de él me hace apretar los dientes. Está desprotegido, lo que significa que impregnarlo será tan fácil. Cuando recupero el aliento y me balanceo sobre él para que mi peso no aplaste su cuerpo, miro hacia abajo y aprecio su delicado y brillante rostro. Sus brazos suben a mi soporte y me acaricia, como si quisiera asegurarse de que yo también fuera real.

"¿Qué tal si te limpiamos?" Me inclino y le beso la punta de la nariz, haciéndolo reír. El sonido es tan inocente y dulce. Esto hace que mi polla se mueva dentro de él. Me pregunto cómo sonaría esa risa con mi polla en su boca.