kookie [Yoonmin]

Kookie

🐰Historia y capítulos cortos.
🐰Omegaverse.
🐰Los errores serán corregidos después.
🐰Sus comentarios son importantes.

Sus pequeñas manitas sostuvieron con fuerza el suéter de su mami, el frío era terrible en esos días.

Ella le decía que en esos fríos días se convirtiera en su forma animal para que se mantuviera calentito fácilmente entre los brazos de su mami.

Jaló suavemente la tela, ella tomaba siestas cortas pero profundas.

Ella seguía dormida.

Arrugó su naricita al tratar de concentrarse para convertirse en su forma, lo logró un par de intentos después.

Se acurrucó contra ella.

🐰

Cuando salieron del supermercado los copos de nieve comenzaban a caer, su mano fue sujeta por la de su esposo.

Casi llegaban a donde habían dejado el auto estacionado cuando algo entre los contenedores llamó su atención.

Soltó la mano de su Alfa que sin dudarlo lo siguió.

-Gigi, ¿ella? -observó a su esposo.

-No creo, ella debe estar durmiendo o bebió algo, tal vez -los ojos preocupados de su Omega le hicieron querer acercarse a la mujer -Llama al 911, corazón.

Él era un ángel.

Jimin tomó rápidamente el celular para marcar, cuando estaba dando la dirección su Alfa le indicó que ella no tenía signos vitales. Cuando terminó la llamada se acercó a ella.

-Es tan joven, Gigi -era una joven y bella mujer pero con deteriorada vestimenta y demasiado delgada.

-Si y una Omega -se levantó para acercarse y tomar la mano de su esposo -Vamos a casa -tiró de la manita para llevarlo al auto, sin embargo él no lo siguió.

-Espera, Gigi.

Su Omega se agitó en su interior al ver el pequeño algodoncito blanco acurrucado entre la ropa de la mujer, un cachorro, ella tenía un cachorro.

Con lágrimas en los ojos y con el pequeño conejito dormido entre sus brazos se alejó de ella.

-Gigi, es un cachorro.

-Ya hemos hablado de esto, cariño. Debemos esperar a las autoridades y entregar al cachorro.

Negó.

-No.

-Jimin.

-No, Yoongi. No abandonaré a este cachorro.

-Ellos tal vez tengan familia.

-Si la tuvieran tal vez no hubieran terminado en esta situación. Ella viviendo en la calle con su cachorro -comenzó a caminar al auto.

Abrió la puerta y encendió la calefacción, el pequeño conejito se acomodó en sus brazos.

Sintió la presencia de su esposo en el lugar del piloto.

-¿Por qué nunca puedo decirte que no? -tomó un poco de aire -esto nos traerá muchos problemas y será difícil. Y lo haremos juntos, corazón.

Una pequeña sonrisa atravesó el rostro del Omega.

Su mano libre fue sujetada fuertemente por la de su esposo, las lágrimas no tardaron en salir.