The Big Lie ~Larry~

Parque de diversiones

~3:00am~

-Lou- susurraron a su oído -Lou- volvió a sonar esa suave voz en su oído suavemente

De inmediato, al escuchar esa voz repetidas veces y percatarse de que no era parte de sus profundos sueños abrió sus ojos rápido incorporándose con la fuerza de su abdomen de inmediato asustado de lo que podría estar sucediendo con su chico.

-¿Que pasa? ¿Te sientes mal? ¿Necesitas algo?- respondió agitado prendiendo la luz de su mesita de noche

-No puedo dormir- confesó Harry mirándolo aún acostado con un puchero en sus labios

-¿Te duele algo?- cuestionó llevando su mano a su frente tibia asegurándose de que no tuviera ningún tipo de fiebre o algo similar

-No, solo, no puedo hacerlo- susurró derramando una lagrima silenciosa de sus jades verdes

Una lágrima de esas que llevaba aguantando todas esas horas en las cuales escuchaba la respiración de Louis tranquila junto a su oído y solo necesitaba su voz para no derrumbarse.

-Hey, está bien, está todo bien- contestó Louis en cuanto observó aquella gota de agua en la pálida mejilla de su novio volviendo a acostarse para acurrucar al rizado en su pecho

-Se que estás cansado, perdón por despertarte- se disculpó mientras las lágrimas ya corrían sin rumbo hacia la piel caliente bajo su mejilla

-No, nunca estoy cansado para ti- le dijo soltando un beso en sus rizos mientras lo acercaba más hacia él en un tierno abrazo

-Yo-yo perdóname por favor- jadeo llorando sobre su pecho

-No tengo nada que perdonarte, está todo bien- acariciaba su espalda tratando de calmarlo

-No debes amarme, no debes hacerlo, yo-yo-

-Shhh no digas eso bebé, no lo digas- susurró calmándolo, sentía el cuerpo del rizado temblar y pequeñas gotas saladas caer sobre su pecho descubierto

-Te amo- jadeo Harry sintiendo una presión en el pecho, sabiendo que nada de eso duraría, sabiendo que tendría que aprender a vivir sin el.

-Yo a ti bebé, yo también te amo- contestó besándole sus rizos satisfaciéndose de aquel suave aroma que desprendían

-¿Sin importar nada?- jadeó deseando nunca perder ese tacto sobre su cuerpo

-Sin importar nada- contestó en un suave susurro

Se quedaron callados, Harry lloraba y Louis depositaba besos y suaves caricias en su piel, brindándole su incondicional apoyo, haciéndole entender que ahí estaba, que ahí estaba para él, ese día y el resto de sus vidas estaría ahí.

-¿Quieres ver una película?- susurró Louis después de unos minutos cuando comenzó a sentir que las lágrimas paraban un poco y ya no temblaba

Propuso aquello tratando de levantar sus ánimos y que el rizado pudiera conciliar el sueño, lo necesitaba, su chico necesitaba descansar.

-Mhm- afirmó Harry aferrándose más al ojiazul

Encendieron la televisión y Harry pidió una comedia romántica, su favorita.

Diario de una pasión

Ese novela que le hacía creer en todo aquello que se llamaba amor, que le hacía creer que el felices para siempre existía, que le hacía creer que ese "hasta que la muerte nos separe" que las parejas solían prometerse era real cuando el amor era verdadero.