✨️ 𝑲𝒊𝒎𝒆𝒕𝒔𝒖 𝑵𝒐 𝒀𝒂𝒊𝒃𝒂 ✨️ 🍋 𝑶𝒏𝒆 𝑺𝒉𝒐𝒕𝒔 𝑳𝒆𝒎𝒐𝒏 🍋 𝐓1

《𝑲𝒂𝒎𝒂𝒅𝒐 𝑻𝒂𝒏𝒋𝒊𝒓𝒐》

🌸 𝑳𝒆𝒎𝒎𝒐𝒏 𝑺𝒐𝒇𝒕 🌸

⚠️ ᴘʀᴏɴᴏᴍʙʀᴇ ғᴇᴍᴇɴɪɴᴏ ⚠️

Lemmon: Escritos explícitos con descripción de actos sexuales.

𝑪𝒐𝒏𝒕𝒆𝒏𝒊𝒅𝒐:
ʟᴇɴɢᴜᴀᴊᴇ ᴠᴜʟɢᴀʀ
ʟᴇᴄᴛᴏʀᴀ ᴅᴏᴍɪɴᴀɴᴛᴇ

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Eran los primeros días de invierno, sin embargo, la finca del Pilar de la llama, de quien eras discípula, estaba ya decorada con la blanca nieve, ibas caminando con la mirada abajo, inmersa en tus pensamientos: Tenías ya algún tiempo enamorada de un cazador que era sumamente conocido por llevar consigo a su hermana, quien era un demonio, sin embargo, estabas convencida que sólo te consideraba una simple amistad más.

No eran muy cercanos, en realidad, sólo habían pasado tiempo juntos gracias a tu tutor, quien se ofreció a ayudar también al chico de tus suspiros.

(Dudo que guste de mi, ni siquiera me conoce demasiado, que envidia me da Kanao...)

Pensabas, hasta que fuiste interrumpida y devuelta a tu realidad, por accidente, chocaste con la espalda del susodicho, quien rápidamente se giró a mirarte.

Oh, ¿estás bien, ___-chan? ¿Todo en orden? —Preguntó tomándote de los hombros, y regalándote una dulce mirada, de esas que tanto lo caracterizan.— ¿Uh? Si, si... Lo siento... Espera- ¿___... Chan? —Lo miraste sorprendida.— Oh, este... Espero que no te moleste, es sólo que pensé que podría... Ya sabes... —Las mejillas del chico comenzaron a teñirse de rojo.— No, para nada... M-me gustas. —Reaccionaste ante lo que dijiste, y con notorio sonrojo y enorme vergüenza corregiste— ¡Me gusta! El... Honorífico, ¡Que vergüenza! M-Me tengo que ir.  —Sin siquiera dejarlo hablar, saliste corriendo rumbo a tu pequeño hogar dentro de la finca.

Este lugar se componía de un pequeño pedazo de terreno en el que contabas con una recámara, baño y cocina, además de un lindo jardín y una pequeña sala.

Tan pronto como llegaste, cerraste fuertemente la puerta detrás tuyo, intentando volver a recobrar tu respiración normal, tu cara, ahora fácilmente podía ser comparada con el rojo del fuego, y claramente tu color sería más intenso.

Después de la vergüenza atravesada, te sentaste a descansar en tu cama ya con la pijama puesta acompañada de un libro y café, para darle batalla al frío que se empezaba a sentir.

Giraste tu cabeza hacia la ventana abierta de tu habitación, por donde pudiste apreciar a Tanjiro entrenado con su nichirin como de costumbre, te diste cuenta que unicamente llevaba puesto su característico haori.

Sin comprender como es que no se estaba congelando en el frío de afuera, lo llamaste nerviosa.

¡Tanjiro-kun! ¿Cómo es que no tienes frío? ¿No quieres pasar por un poco de café o chocolate? Ya entrenaste mucho por hoy. —Tanjiro te miró con una gran sonrisa, gustoso aceptó tu invitación.— Adelante —Le dabas la bienvenida mientras abrías la puerta para que pasara.—Siéntete como en tu casa —Le regalaste una sonrisa junto a una taza de chocolate caliente.

Ya eran las 10:30 de la noche, ustedes seguían conversando sobre sus misiones, objetivos, metas y sueños, te parecía sumamente maravilloso aquel chico, la forma en la que contaba lleno de emoción sus metas, te contagiaban su sentir, dándote la sensación de querer estar con él cuando se hicieran realidad sus planes.