Solamente un tierno pikachu⚡18+ [DenkixFem! Reader] Lemon

Pequeño Desastre

Narras tú

No sé que pensar. Es obvio que ya no encuentro a Neito atractivo, pero mi niña de secundaria interior me suplica que lo deje pasar y lo escuche, tan sólo por un momento. Sería inmaduro no hacerlo, después de todo su rechazo fue hace años, además, gracias a su padre mi mamá ahora tiene un nuevo trabajo mejor pagado y mucho más interesante que vender casas; aunque sea temporal.

Podría incluso preguntarle sobre eso. Mamá es muy cuidadosa en ese sentido. No le gusta platicar acerca de sus días de investigadora y no parecía  querer darme detalles del proyecto en el cual participa ahora mismo.

Monoma... Es decir, Neito sabrá algo?

Esta también podría ser una oportunidad excelente para explicarle que no estoy interesada en lo que sea que intenta y saber porqué es que ahora se muestra tan diferente conmigo pudiendo tener a cualquier chica de Kanto a sus pies. Perdóname Denki, por favor, intenta soportarlo.

"Ah, pero qué casa tan acogedora tienes"  el rubio exhala al sentarse en el sillón con una gracia que es casi de otro mundo. "No te lo había dicho pero encanta. En serio, es tan... Cómoda y sencilla, pero en el mejor sentido".

Su mano derecha intenta acariciar a Denki, pero este simplemente sisea y le da la espalda.

"Ya veo que no le agrado a tu Pikachu, cierto?" Monoma alza los hombros calmado "Bueno, realmente no importa. Ciertos pokemon no son de mi estilo, igual que Pichu y Raichu son un poco comunes para mi gusto".

Denki exhala y finalmente se aparta cuando tomo asiento, colocando una bandeja con vasos y jugo en la mesa al centro de la sala.

"Qué clase de pokemon te gustan entonces?"

"Todos en realidad. Lo que quise decir es, tú sabes... Siempre me encuentro buscando algo especial. Algo único... Algo que me recuerde que en este mundo todavía quedan las sorpresas"

Sus ojos voltean a verme de forma cálida.

"...Neito".

"Dime"

"Tengo muchas preguntas que hacerte desde el otro día.

" Oh, eso es terrible"

Parpadeo algo confundida, pero él simplemente sonríe y sus manos se acercan peligrosamente a las mías, tocándolas con delicadeza.