Tanya Degurechaff y la piedra filosofal

6.- Lección de vuelo

Harry Potter

Las primeras tres semanas en Hogwarts aparentemente pasaron volando en un instante. Se hicieron amigos, se asistió a clases y se estudió mucho. Todos hicieron la tarea durante las sesiones de estudio, aunque Ron probablemente podría terminar la suya más rápido si se quejara menos.

Casi lo único que estaba arruinando el tiempo de Harry en Hogwarts era Malfoy, quien regularmente intentaba molestar a Harry por una cosa u otra, alardeando de lo genial que supuestamente era o tratando de insultar a Harry y sus amigos. Era particularmente molesto que Malfoy pareciera esperar hasta que Tanya se fuera porque sus ataques verbales contra Malfoy parecían enfurecer mucho al chico.

Y ahora la presencia de Malfoy iba a arruinar la clase que Harry más esperaba. Se anunció que las lecciones de vuelo comenzarían el jueves con la Casa Slytherin.

"Justo lo que quería", se quejó Harry a Ron mientras Tanya estaba leyendo un libro. Era difícil leer sus emociones, pero Harry sintió que entendía bien que ella se sentía feliz en ese momento. "Hacer el ridículo frente a Malfoy."

"No sabes que te harás el ridículo", dijo Ron razonablemente. "De todos modos, sé que Malfoy siempre está hablando de lo bueno que es en el Quidditch, pero apuesto a que eso es todo hablar".

Harry no estaba tan seguro de eso como Ron. Si bien era cierto que Malfoy exageró sus historias al hablar de helicópteros muggles que escapaban por poco, todos los niños de familias mágicas hablaron sobre cómo habían volado y jugado juegos de quidditch cuando eran niños. La única excepción fue Neville, cuyos gramos se negaron a dejarlo en una escoba. Considerando los accidentes que Neville ha tenido con ambos pies en el suelo, Harry pensó que era una decisión sensata.

Donde casi todos los niños de hogares mágicos tenían confianza, los de los no mágicos estaban más nerviosos. Harry estaba emocionado, pero había una sensación de nerviosismo en sus entrañas de que sus pies no tocaran el suelo por primera vez. Hermione estaba intentando lo imposible y tratando de aprender a volar con los libros. Incluso Dean parecía un poco inseguro de sí mismo. La única que estaba relajada por volar por primera vez era Tanya.

Harry no sabía mucho sobre su amiga, Tanya parecía ser un individuo bastante privado, pero se las arregló para descubrir que creció en un orfanato no mágico. Le costó trabajo lograr que ella abriera tanto con él, pero Harry solo quería hablar con alguien más sobre no tener padres. Ninguno de los otros de primer año lo entendió realmente. Neville parecía el más cercano, ya que solo había mencionado sus gramos, pero incluso ella era más madre de lo que los Dursley habían sido para Harry. Tanya, sin embargo, pudo entender. No tenía una familia real, incluso una odiada como la que tenía Harry, y eso era algo de lo que Harry quería hablar. Ver si algunos de sus deseos de infancia ni siquiera tenían a los Dursley hubiera sido mejor.

Harry no estaba seguro de cuál era la respuesta todavía, pero conocía a Tanya y estuvo de acuerdo en que era mejor estar en Hogwarts, donde la comida era abundante y había gente a la que le gustaba cerca. Incluso si a veces parecía que él era el único al que le gustaba.

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Tanya Degurechaff

En mi vida anterior, volar fue una de mis mayores alegrías. Incluso con las balas volando, la metralla golpeando mi escudo y los enemigos que buscan acabar con mi vida de una manera sangrienta, volar nunca perdió su encanto. El viento en mi cara, la ingravidez de flotar a cientos o miles de metros en el aire, y la vista del suelo tan lejos debajo de mí, sabiendo que tenía el control de cuando se acercaba. Fue estimulante y fue una de las pocas cosas por las que lamento haber dejado atrás esa vida.

Esta vida también tiene métodos de vuelo con el uso de escobas. Probablemente podría adaptar el hechizo de vuelo a esta vida, lanzando con mi varita, pero el palo de escoba probado y probado que se usa aquí sería mucho más seguro que intentar un hechizo experimental que no estaba del todo seguro de que funcionaría como quería. Quizás algo en lo que trabajar en el futuro una vez que tuviera una mejor comprensión del arte de hechizos que nos estaban enseñando.