Capítulo 22 - Planes de contingencia O revelaciones

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Draco Malfoy frunció el ceño ante la carta que el elfo doméstico de su padre le había entregado esa mañana junto a su cama. Sabía que Lucius generalmente no enviaba a los elfos domésticos a Hogwarts para entregar mensajes. La última vez que su madre había estado enferma con fiebre alta. El rubio Slytherin temía lo que contendría la carta y se apresuró a leerla, incapaz de ocultar sus ojos que se agrandaban gradualmente. Solo para estar seguro, el adolescente volvió a leer la carta hasta que finalmente comprendió que la carta realmente decía lo que pensaba que era. Su padre le estaba diciendo que se mantuviera bajo, jugara bien con Potter y evitara el Slytherin marcado lo más silenciosamente posible, pero no en pocas palabras. La razón había sorprendido a Draco. Aparentemente, su padre ya no pensaba que el Señor Oscuro estaba lo suficientemente cuerdo como para tener sentido. Una segunda carta llegó justo después de que terminó de estar desconcertado por la primera. éste del elfo de su madre, explicando lo que su hermana, la loca tía de Draco había revelado. A Draco no le había sorprendido que Bellatrix ni siquiera hubiera pensado que lo pondría en peligro a él, a otros Slytherin ya los hijos de los leales seguidores de Voldemort. Lo que ambas cartas le ordenaron fue que se quedara en el castillo durante el fin de semana de Hogsmeade y la sugerencia de que trató de arreglar las cosas con el Niño-Que-Vivió. Draco podría fácilmente hacer el primero y en cuanto al segundo ... Lo que ambas cartas le ordenaron fue que se quedara en el castillo durante el fin de semana de Hogsmeade y la sugerencia de que trató de arreglar las cosas con el Niño-Que-Vivió. Draco podría fácilmente hacer el primero y en cuanto al segundo ... Lo que ambas cartas le ordenaron fue que se quedara en el castillo durante el fin de semana de Hogsmeade y la sugerencia de que trató de arreglar las cosas con el Niño-Que-Vivió. Draco podría fácilmente hacer el primero y en cuanto al segundo ...

Potter no estaba tan mal ahora que la Comadreja y la bruja que lo sabía todo no estaban rondando por él. Longbottom, con su nueva columna vertebral y su tranquila dignidad también era mucho mejor que esos, incluso la extraña bruja más joven de Ravenclaw con la que estaba saliendo era mejor. Desde principios de año, los Slytherin habían notado que Potter había cambiado y todo era para mejor. Cuando le había ofrecido un consejo sobre Umbridge, había sido un capricho, pero el tono cordial con el que Potter lo trató había sorprendido más a los Slytherin que el hecho de que Draco se hubiera portado bien. La tregua extraoficial había sido un cambio agradable y el rubio había logrado ocultárselo a sus padres. Los otros Slytherin habían pensado que Draco solo se estaba portando bien con el Niño-Que-Vivió para mantener abiertas sus opciones, todos ellos fueron criados para tener planes de contingencia, por lo que no había recibido ninguna queja de ellos. Ahora, aunque sus padres prácticamente admitían haber desertado del Señor Oscuro por su culpa, porque ese mago incluso había insinuado que Draco estaría en peligro. La perspectiva de que él fuera Marcado el próximo verano se desvaneció y Draco sintió como si le hubieran quitado un peso de encima.

"¿Draco?" La voz de Blaise sacó al rubio Slytherin de sus pensamientos. "¿Qué estás haciendo despierto? Es demasiado temprano."

"Carta de casa. Y son casi las siete. Vamos, tenemos a Binns y tenemos que prepararnos. Puedes tomar una siesta más tarde, en clase".

Zabini resopló y comenzó a prepararse mientras se quejaba de los amigos mandones.

Los pasillos de Hogwarts estaban llenos de estudiantes. Neville llevaba los libros de Harry sin prestar atención a las miradas de dicho adolescente de ojos verdes.

"Están deletreadas ingrávidas," protestó Harry.

"Lo sé", respondió el heredero de Longbottom. "Pero es el principio de la cosa. Así que deja de quejarte, ¿de acuerdo?"

"¿Qué les pasa a ustedes dos?"

Los dos Gryffindor se volvieron cuando Draco Malfoy se dirigió a ellos.

Un indulto de inviernoWhere stories live. Discover now