-shinichiro, tu, ¿quieras tener un hijo?- pregunté al lado de este mientras "mejoraba" algo de mi moto.
-hm.- dijo automáticamente quedando estático pensado en lo que había preguntado.
Me volteo a ver se quedó unos segundos viéndome a lo ojos y yo sonrei, sonrrio al mismo tiempo que yo y bajo a ver mi vientre.
-Nono, no estoy embarazada.- dije negando con la cabeza mientras reía levemente.
-tonta, entonces dime a qué viene tu pregunta.- me dijo para luego fijar su atención en la motocicleta de nuevo.
-tu, ¿tu quisieras adoptar un niño conmigo?- pregunte mirándolo fijamente mientras el arreglaba unos cables y luego quedó de nuevo estático pensó y sonrrio de inmediato y me volteo a mirar.
-¿Quieres adoptar a kakucho verdad?.- me respondió a mi propuesta con una sonrrisa boba mirándome fijamente yo imite esa sonrrisa.
-si, ¿tu quisieras ser el padre?- dije todavía con una sonrisa en mi rostro jugando con mis dedos, estábamos cara a cara.
Tomo mi mejilla y con su pulgar e hizo una pequeña caricia a esta y todavía seguía con esas sonrrisa boba.
-me impresiona lo buena que eres con esos niños, eres un ángel.- me respondió para luego darme un pequeño beso y volver a concentrar su atención en la moto.
-yo solo quiero que puedan tener alguien a su lado la cual puedan confíar algo que yo nunca pude experimentar cuando era pequeña.- respondí para bajar mi mirada a mis manos.
Sentí que me volvió a mirar y coloco sus manos en sus rodillas y hubo un silencio un poco incómodo de no saber que decir y luego mire las de el, estaban llenas de aceite de moto, para romper el hielo de ese comentario, Tome un poco con mi índice y la únte en su mejilla.
-AHHHHH,- grito ya que era un aceite muy difícil de quitar a lo que yo me levanté lo más rápido posible y este fue detrás de mi.
-YA VERAS CUANDO TE ATRAPÉ!!- me grito mientras yo salía corriendo del garage mientras reía y este me perseguía entre furioso y riendo igualmente.
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-sientate.- le dije a torá que estaba pasado al frente mío.
Había venido con shinichiro pero sentía que para contarle esto era mejor yo decírselo a solas.
-que hice.- me dijo sentandose en el sillón haciendo un leve puchero.
-nada mi amor, solo quiero contarte algo importante.- hablé haciéndole un pequeño mimo en el cabello junto con una sonrisa para que se tranquilizara.