For You [HUALIAN]

Adolescencia 1

Xie Lian: 15
Hua Cheng: 13

- Oh, dios mío, San Lang. - Exclamó Xie Lian, mientras presionaba frenéticamente los botones del control Xbox. - ¡Mi auto acaba de superar al tuyo! -

Hua Cheng gruñe al lado de Xie Lian. - Estaba distraído, Gege, solo espera. -

Distraído por la pierna de Xie Lian que estaba sobre la suya, es lo que no agregó.

Estaban sentados en el sofá de la casa de Hua Cheng un sábado por la tarde, disfrutando de videojuegos. Excepto que Xie Lian decidió, casualmente, colocar su pierna izquierda sobre la derecha de Hua Cheng, el contacto distraía un poco al menor. Ambos llevaban pantalones cortos, y la sensación de la suave piel de la pierna de Xie Lian contra la de él hizo que el corazón de Hua Cheng comenzara a latir mil veces por segundo.
No deberías sentirte así, se dijo a sí mismo, Xie Lian es tu mejor amigo, pero Hua Cheng sabía que siempre se había sentido de esa manera, desde que Xie Lian vió como un grupo de niños lo golpeaban y se metió para defenderlo.

- Deja de dar excusas, San Lang ¿Que hay aquí para siquiera distraerte? - Xie Lian se rió, mientras seguís presionando desesperadamente los botones del control con los ojos pegados a la pantalla del televisor.

Tú estás aquí para distraerme. Tu pierna sobre la mía es suficiente para distraerme.

Pero la competitividad de Hua Cheng tomó control, se quitó la pierna de encima sin querer ser demasiado brusco, fallando un poco ya que se ganó un quejido por parte del mayor.

- Tu pierna es pesada. - Mintió Hua Cheng, y continúo jugando con toda su concentración desde que la "distracción" desapareció.

Con la mente de Hua Cheng en el juego, fácilmente superó al auto de carreras de Xie Lian.

- ¡Oye! - Chilló Xie Lian al ver que el auto de su mejor amigo dejaba atrás al suyo.

Hua Cheng río de lo lindo que había sonado Xie Lian, terminó la carrera, ganándose un trofeo de oro en el juego por terminar en el primer lugar. Colocó su control a un lado y miró al mayor. Las cejas de Xie Lian estaban arrugadas y juntas, y estaba melodramaticamente haciendo pucheros con sus regordetes y rojos labios. Sus mejillas se veían tan lindas, Hua Cheng solo quería mordérselas.

Hua Cheng se rió al verlo, y Xie Lian lo miró, abriendo los orificios de su nariz con fastidio.

Llevó su mano hacia la suave mejilla de Xie Lian h la apretó. - Eres tan lindo, Gege, no te preocupes, la próxima vez te lo haré más fácil, ¿Está bien? -

Xue Lian apartó la mano, refunfuñando. - Cállate, San Lang. - Pero estaba reprimiendo una sonrisa, solo con ver la sonrisa de Hua Cheng fue suficiente para hacerlo sonreír. Además, no puedo evitar encontrar divertido como su San Lang era tan bueno en todo (dale una hoja y un lápiz y veamos que tan bueno es), a pesar de eso, a Xie Lian todavía le gustaría ganar contra Hua Cheng al menos una vez, sin contar las veces dónde Hua Cheng se dejaba ganar, en los días que Xie Lian parecía estar cansado o preocupado. Pensó que era dulce por parte de Hua Cheng el dejarlo ganar, pero ahora había crecido y se enamoró de la amabilidad de Hua Cheng al dejarlo ganar.

Xie Lian, de la nada, comenzó a hacerle cosquillas a Hua Cheng, teniendo ganas de ver sus dientes por una sonrisa y teniendo la necesidad de molestarlo, ya que había vencido a Xie Lian en el juego de nuevo.

- De-detente... Detente, Gege. - Hua Cheng logró gritar en medio de una risa incontrolable. Las manos de Xie Lian estaban por todo su cuello. Él también se estaba riendo junto a Hua Cheng, sintiendo demasiado placer al ver cómo Hua Cheng perdía el control. La risa de su mejor amigo calentó el corazón de Xie Lian, hizo que perder valiera la pena, hizo que todo valiera la pena.