Parte 14

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Luego de un rato de intercambio de balas de cañón entre ambos barcos el Sunny escapó disparándose un kilómetro lejos del barco de big mom, luego de escapar el ambiente en el barco se tornó mas tranquilo y el cocinero del barco se marchó a la cocina para preparar una merienda, mientras tanto Nami puso al día a Jo sobre lo que pasó en la isla gyojin y sobre el plan con Caesar, Law, etc. Jo escuchó atentamente los detalles, tal vez le cuente una que otra cosa a shanks, después de todo siempre hablaban de todo. - Creo que tomaré un baño e iré a la biblioteca un rato, en lo que sanji termina la merienda - Jo se sentía algo cansada, pero más que nada no podía sacar de su mente lo que había sucedido por la mañana, aun podía sentir las manos de doffy recorriendo parte de su cuerpo y no le gustaba, a Jo nunca le había gustado el contacto íntimo con los hombres, pues sabía de lo que eran capaces, Jo quería limpiar su cuerpo y cambiar su ropa y quería borrar de su mente y su boca cualquier contacto que tuvo con doflamingo.

Una hora después el rubio llamó desde la puerta de la cocina a todos para comer, pero no vió llegar a la pelinegra - nami - san, dónde está Jo -san? según lo que nos contó no debe haber comido nada en todo el dia- el rubio tenía razón, Jo no acostumbraba desayunar y por todo lo que sucedió en la tarde no había podido probar bocado en todo el día - me dijo que tomaría un baño y que iría a la biblioteca mientras terminabas la merienda, si quieres puedo ir por ella - la pelinaranja estaba a punto de levantarse - no no, esta bien nami - san, le llevaré yo mismo un poco a Jo - san - el rubio tomó una porción y se dirigió a la biblioteca, donde esperaba ver a Jo concentrada en algún libro o algo similar, pero lo que encontró dejó una mirada enternecida en su rostro.
Jo se encontraba dormida sobre el sofá de la biblioteca, un libro se encontraba en el suelo y su cabello se veía algo despeinado, el rubio miró a la chica recostada y subió al cuarto de las chicas por una manta, la cubrió de los pies a los hombros y acomodó su cabello, no podía apartar la mirada de la hermosa chica, el rubio había visto muchas chicas hermosas en su vida, pero la señorita que se encontraba frente a sus ojos hacía su corazón palpitar de una forma distinta, el rubio se agachó quedando de frente a Jo, sin notarlo su a mano se posó sobre la suave mejilla de la pelinegra y la acarició, la chica se movió un poco al sentir el contacto en su rostro, pero el toque era cálido, suave y gentil, cuando este se dió cuenta de lo que hacía rápidamente apartó su mano de ella y un fuerte color rojo invadió su rostro hasta las orejas.

El rubio dejó dormir a Jo y subió en silencio a la cocina con el plato en la mano, puso un poco de plástico sobre él y lo guardó para que la pelinegra comiera más tarde.

*****

Jo escuchaba sonidos de cañones, disparos y gritos de personas siendo cortadas por espadas, abrió los ojos y estaba en la guerra de los grandes, pero no podía moverse, estaba de rodillas sobre el piso y solo podía observar lo que sucedía a su alrededor, buscó a luffy, a Ace y a Sabo entre la multitud, quería saber si sus hermanos estaban bien. Luego de unos segundos pudo ver a Sabo, pero lucía diferente, como si tuviera la mirada vacía, Jo recordó que Sabo no estuvo en la guerra con ellos, pero no fué lo único que recordó, su mirada buscaba desesperadamente al resto de sus hermanos, y entonces los vió, sobre el suelo yacían sus dos hermanos, Ace tenía un hoyo en el pecho y luffy estaba tendido a su lado con una herida similar, Jo gritó, gritó de dolor, ver a sus hermanos muertos frente a ella, se sentía impotente, las lágrimas brotaban sin parar de sus ojos, su voz ya no salía, sentía un dolor sordo en el pecho y su garganta ardía.

*****

- JO - SAN! DESPIERTA!! - El rubio estaba limpiando después de la cena pero había escuchando gritos provenientes de la biblioteca, bajó corriendo alarmado, la única persona que estaba ahí era Jo, cuando la vió ésta estaba de rodillas sobre el suelo, lágrimas caían de su rostro y había dejado de gritar, pero tenía una expresión de dolor en su rostro, el rubio comenzó a moverla para que despertara - JO - SAN!!- Jo seguía prisionera en su pesadilla hasta que sintió calor alrededor de ella, un sentimiento de alivio y paz la invadió de repente - Jo, por favor despierta - el rubio desesperado por ver que la chica no abría los ojos la abrazó, sintió impotencia, sintió una presión en el pecho por ver a la pelinegra con esa expresión tan profunda de dolor, apretó un poco su abrazo, lo único que el rubio quería era transmitirle paz y que Jo despertara - Sanji? - una voz apagada salió de entre los brazos del rubio - Jo!  estas bien?? gritaste y yo... - sanji soltó su agarre - quería saber si estabas bien - sintió el calor subir a su rostro así que agacho un poco la cabeza - no te detengas - una adormecida Jo se recostó sobre el regazo del rubio tomando su manos y abrazándolas en su pecho, por lo general al sentir esa cercanía el rubio hubiera estallado y una hemorragia nasal habría comenzado, pero éste no fue el caso, su rostro se coloro aún más hasta llegar a las orejas, pero también sintió un calor en el pecho donde antes había presión, soltó una de sus manos del agarre de Jo y comenzó a acariciar el cabello de la que estaba recostada en su regazo, poco tiempo después los demás bajaron, también habían escuchado los gritos pero tardaron un poco en reaccionar - awww que lindos - dijo en un susurro el esqueleto, un susurro que solo la pelinaranja y el reno pudieron escuchar, asintieron juntos y dejaron la habitación en silencio, en el sofá se encontraba Sanji siendo abrazado y con una mano sobre la cabeza de Jo, quien dormía plácidamente sobre su regazo.

Apenas unos rayos de sol comenzaron a iluminar el cielo nocturno, el rubio comenzó a abrir los ojos, sintió algo de calor en sus piernas y entonces vio a Jo recostada sobre él, su rostro no tardó en ponerse de colores, levantó las manos por el nerviosismo, pero al quitar la mano que estaba siendo abrazada había movido a Jo, ésta se comenzó a mover un poco sobre el rubio, quien solo se puso aún más nervioso y rojo - Jo - san, buenos días - dijo nervioso y aun con las manos arriba - buenos días - contestó adormilada, Jo comenzó a abrir los ojos lentamente, la primera vista que tuvo fue a un rubio con las manos levantadas y un notorio color rojo en el rostro, en cuestión de segundos Jo se dió cuenta de la situación, se levantó de golpe y cayó al piso, teniendo en su rostro los mismos colores que el rubio - Jo-san! estas bien? - el rubio bajó una de sus manos y se la tendió a la menor - bien!..estoy bien - la pelinegra recordó lo que había pasado hace unas horas y se levantó del suelo rápidamente - lamento los problemas de anoche - hizo una semi reverencia intentando ocultar los colores de su rostro - está bien Jo-san, me alegro de que estés bien - el rubio aun apenado se levantó del sofá, tomó los hombros de la menor y le sonrió - ahora iré a preparar algo para el desayuno, asegúrate de subir, ayer no comiste nada durante el día, bien? - Jo miró el rostro del rubio, adornado por un leve sonrojo y una hermosa sonrisa en sus labios, Jo asintió y enrojeció aún más.

Sanji salió de la habitación rápidamente y entró en la cocina, su rostro era del color de una cereza, mojó su rostro con un poco de agua del lavaplatos y se dispuso a cocinar el desayuno, hablando de la pelinegra, también tenía el color de una fruta, con las pocas pecas que adornaban su rostro, parecía una fresa con expresión de no saber lo que pasaba.

Todo por ti (Sanji x reader)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora