Sentimientos sin recuerdos || Wigetta

Sentimientos sin recuerdos -- Wigetta || Capitulo 4

-Narra Willy-

Después de desahogarme en lo brazos de Samuel, cosa que necesitaba desde que desperté en ese hospital, me había sentido mucho mejor. Quería ver a mi familia y amigos que recordaba pero… Ahora quería conocer a Samuel, no parecía mal chico y despues de todo, es el único que ha estado conmigo estos días.

Me preguntaba a cuanta gente habría olvidado, si mis gustos habrían cambiado o quizás incluso había dejado Youtube, aunque eso no lo creía posible ya que me encantaba a pesar de tantas criticas. Últimamente me estaba haciendo inmune a todo lo que me decían y a veces me daba un poco de miedo. Quería preguntarle a Samuel muchísimas cosas pero se veía bastante cansado, lo mejor sería descansar en cuanto llegásemos a… casa.

Cuando llegamos al departamento, me fije que era bastante amplio y me resulto extraño lo cómodo que me sentí al entrar, como si mi cuerpo estuviera acostumbrado a estar ahí. Me sentí con la suficiente confianza de entrar y investigar por mi cuenta, observando el salón y la cocina en un principio pero antes de que Samuel pudiera indicarme donde se encontraba mi cuarto, quería averiguarlo por mi propia cuenta. Quizás sí que recordaba, al menos, cual era mi habitación. Me atreví a pasar de largo de la primera puerta que encontré, pensando que sería la habitación de Samuel y pasando directamente a la segunda puerta que ahora tenia frente a mi, dispuesto a entrar hasta que la voz de mi compañero, que desde que llegamos solo se había dedicado a observar cada uno de mis movimientos, me interrumpió.

-Esa es mi habitación.- Se acerco a mi relajado, abrió la puerta y me invito a entrar.
-Creí que era mi habitación… Supongo que mi instinto me ha fallado…
Estaba un poco desilusionado, había tenido la sensación de que esa habitación me había llamado la atención por algún recuerdo vivido pero… ¿Que haría yo en una habitación que no era mía? Seguramente no era nada especial y simplemente me había dejado llevar por mi confianza.
-Ven, quizás reconozcas algo de tu habitación.- Samuel salio para dirigirse a la puerta que anteriormente yo había dejado atrás, la abrió y me dejo que pasara primero.
Al entrar puede ver una cama bastante más grande que la que recordaba que tenia en España, unos posters enmarcados que estaban en el suelo ¿Que hacían ahí? Después un escritorio con un ordenador que al parecer era nuevo, pues todavía estaban las cajas de este en el suelo, al lado del escritorio había una estantería repleta de vídeo juegos, la mayoría no los conocía aunque sospechaba que seguramente ya me los habría pasado y aparte de todo eso, había un armario.
-¿Que tal? - Pregunto Samuel que se había quedado en el marco de la puerta mientras yo revisaba la habitación.
-Tu cama es más grande.- Dije sin más, era lo primero en lo que me había fijado cuando antes me enseño su habitación, su cama era enorme y tenia barras de madera en cada esquina, aunque prefería la mía, no me gustaba mucho ese estilo de cama.
-¿Eso es todo? - Dijo, mientras reía, me quede observando su sonrisa, no sabia por qué pero me parecía muy atractivo.
Me preguntaba si la primera vez que lo conocí, aquella vez que no recuerdo, también había pensado lo mismo. Hasta donde yo recuerdo, nunca me había fijado en un hombre, tampoco me había fijado mucho en las mujeres aunque recuerdo que me había enamorado de una chica llamada Alicia hace 1 año atrás, bueno 5 años atrás en realidad. Ella había sido mi primera vez en todo y aunque acabáramos, recuerdo que no tenia ninguna clase de rencor hacia ella, tampoco la había vuelto a ver, pues meses despues se tuvo que mudar.

-¿Willy? ¿Estas bien? - Samuel interrumpió mis pensamientos, olvide donde me encontraba sumiéndome en los recuerdos que… que más presentes estaban ahora en mi cabeza.
-Si, perdona… solo estoy un poco cansado.- A pesar de que había dormido bastante en el hospital, me notaba bastante cansado.

Quería preguntarle mil cosas pero al observarle note como el necesitaba aun más que yo un buen descanso, así que lo mejor sería que descansáramos los dos y despues preguntar lo que se me ocurriera.