Capítulo 19

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Unos pequeños destellos de luz se asomaron por una hendija de la ventana, justo lo que necesitaba para terminar de reunir las fuerzas necesarias y levantarme de la cama. Con cautela me deshice del amarre que me proporcionaba su brazo y me senté en el extremo de la cama, mire de reojo a Toby, su respiración constante y tranquila casi imperceptible, los músculos de su cara completamente relajados y sus cabellos alborotados caían desordenados sobre su frente, parecía un niño, acaricié su mejilla izquierda dejado un rastro invisible de mi tacto pero él lo sintió, lleno de oxigeno sus pulmones haciendo que su pecho se infle y luego de contener por unos segundos el aire lo soltó en un ruidoso suspiro, con mucho pesar entreabrió unos pocos milímetros sus ojos dejándome ver ese azul cielo que los cubría.

-Hola -me dijo con voz soñolienta regalándome una sonrisa

-Hola -le respondí acariciando sutilmente con la yema de mis dedos su omóplato, Toby volteo su cabeza y estiro la mano en busca del pequeño reloj de mesilla.

-Son las 8:30hs de la mañana Spencer -ronroneo volviendo a mirarme

-Shhh, tu tranquilo yo suelo madrugar - le sonreí, me coloque mis jean y me dirigí al baño, lave mi cara y amarre mi pelo en una cola alta; fui hasta la cocina decidida a hacer el desayuno pero mi propuesta se desvaneció en cuanto abrí la heladera y la encontré vacía ¿Qué acaso este hombre vivía a base de comida chatarra? Por suerte a solo unos pasos del departamento había un mini supermercado, fui en busca de mis zapatillas a la habitación de Toby quien se había vuelto a sumir en un sueño no se qué tan profundo y me dirigí allí. Me tomo unos veinte minutos hacer las compras, para cuando volví Toby ya había despertado pero aun seguía en pijama (si es que esos únicos short que llevaba puesto se consideraban pijama).

-¿Has ido a la despensa? -me pregunto extrañado al verme entrar con la mercadería.

-¿A ti que te parece?- le dije levantando las bolsas que llevaba en mis manos

-¿Y toda esta comida?- husmeo contenido cuando las deposite en la encimera de la cocina.

-Mi pregunta es... - utilizando mi tono sarcástico - ¿Para qué tiene una heladera si no le vas a poner nada dentro?

-¿Que todo esto es para mí? -se veía realmente sorprendido

-Si -dije indiferente mientras guardaba los productos en sus respectivos lugares o, más bien, en los que yo creía que iban.

-Spencer no tenías que... -chiste para hacerlo callar, él revoleo los ojos y carcajeo -aunque sea déjame darte algo del dinero que has gastado

-Cortesía Hastings -él intento convencerme reiteradas veces en tan solo unos pocos minutos pero viendo que no iba a ceder, se dio por vencido y se quedo mirando como terminaba de prepara el desayuno.

Nos sentamos juntos a la mesa a disfrutar de un exquisito café con crema (calificado así por Toby) y tostadas con dulce de arándanos. Fue una mañana muy agradable, luego del desayuno fuimos a dar unas vueltas al parque, al cruzar por la esquina donde había sido "atropellada" no pude evitar recordar el momento y una pregunta salió de mi boca sin siquiera darme el tiempo a pensar en ella.

-Toby ¿en qué consiste tu trabajo? -él volteo su mirada a mí y parecía que estuviera meditando la respuesta pero al ver mi ceño fruncido solo dijo -es solo trabajo, ya sabes.

-No, la verdad es que no se, por eso te pregunto -pareció rendido antes de que empezara a insistir reiteradas veces sobre la misma pregunta.

-Encargos, solo eso -su sonrisa había sido sustituida por una fina línea - encargos que debo cumplir - ¿encargos? No creo que esos "encargos" tengan que ver con proyectos de arquitectura en absoluto pero solo haciendo preguntas simples y bobas (como esta) podía sacar una porción ínfima de información.

-Interesante... ¿Qué clase de encargos?- pregunte con interés.

-Encargos de todo tipo -dijo y cambiar de tema - ¿iras a la fiesta de esta noche? - ¡la fiesta! Lo había olvidado de nuevo.

-Lo olvide, ¡no tengo que ponerme!

-¿En serio? -Respondió sarcástico - tienes tanta o más ropa que la misma Paris Hilton.

-Toby es una fiesta de gala, necesito un ejemplar digno.

-Corrección es una fiesta con temática, la cual es "alfombra roja"- carcajee

-Adivina que... - le dije

-¿Qué?

-Has salido sorteado para acompañarme esta tarde a comprar un vestido - le guiñe un ojo y rodee su cuello con mis brazos.

-Noo, no me tortures -reí con ganas ante aquella declaración.

-Mmm si, además eres mi pareja ¿no?

-Está bien, si no hay más remedio...

-No lo hay - dije bromeando

-Bien pero antes vamos a comer algo, muero de hambre - la mañana se nos había pasado volando entre risas, besos, abrazos y conversaciones banales. Parecíamos una pareja por primera vez, miramos el reloj ya eran las 12 del día, wow ahora entiendo cuando dicen que "lo bueno dura poco".

*

Toby POV

Recorrimos toda la calle principal de Rosewood y calles aledañas, entramos a cada tienda que había en cada cuadras y ningún vestido era el "indicado", uno era muy largo, el otro demasiado corto, este tenía linda espalda pero feo color, el otro era muy grande y bla bla bla cosas irrelevantes para un hombre, armar un rompecabezas es seguro más divertido que acompañar a tu novia de compras.

Spencer no cesaba de probarse vestidos y hallarle defectos a cada uno de ellos, "defectos" que, por cierto, yo no encontraba.

-¿Qué tal este? -me pregunto por milésima vez ya rendida, levante mis ojos dejando de lado el mensaje que acaba de llegar a mi móvil y quede embobado al verla, boqui abierto, no tenia palabras que decirle -Me doy por vencida- anuncio frustrada y se dio la vuelta para dirigirse nuevamente al vestidor, le tome de la mano para detenerla, su cara reflejaba amargura lo que me daba mucha gracia, creo que no sabe lo bella que se ve en aquella prenda.

-Eres hermosa, no necesitas un vestido para verte bien -le dije tomándola de la cintura - pero... creo que este es el indicado - Spencer sonrió

-¿Tú crees?

-Absolutamente -delibero unos breves segundos frente al espejo y termino optando por él. Lleve a Spencer hasta su departamento, luego de aquel incidente y sabiendo que Áaron Griffin merodeaba implícitamente su entorno no la dejaría sola, porque si fue capaz de aquel "accidente" ¿Por qué no algo peor?

Detuve el auto frente a la entrada del edificio - Paso por ti - dije

-¿Eso fue una pregunta?- una sonrisa picara se dibujo en su cara.

-No, fue una afirmación - se acerco y beso la comisura de mis labios.

-Pues, nos vemos en unas horas - esperé que entrara y retomé el camino a mi hogar.
Abrí la puerta de mi residencia dispuesto a pasar directo al baño a ducharme, apreté el botón de la luz y...
-¿Que haces aquí?

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HOLAAA lectoras, mil disculpas por el milenio de años que paso entre el cap anterior y este, no tengo excusas solo espero que lo disfruten. VOTEN Y COMENTEN PLISS

XOXO Cam

Mas allá del Horizonte (Terminada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora