FRIENDZONE [BakuDeku] (Omegaverse)

VI

Omnisciente

Pasaron unos pocos días y el celo de Izuku terminó, lo que significaba regresar a clases con total normalidad.

Katsuki estaba tranquilo con esto, estuvo hablando con el omega y para su suerte no mencionó nada de lo que pasó.
Al parecer no lo recordaba y eso era lo mejor por varias cosas.

Una, honestamente se sentía como un aprovechado por besar y tocar a Izuku mientras estaba en su celo.

Dos, tenía miedo del rachazo del peliverde.

Tres, su secreto no tan "secreto" estaría a la luz para Izuku.

En si todas sus preocupaciones rondaban en tanto al omega.
Así que estaba esperándole en la entrada cómo hace cada día.

Ignoraba a todos los que pasaban por ahí e incluso a quienes le hablaban, estaba con la mente ocupada.

Hasta que sus ojos encontraron a esa verde cabellera, para Izuku nunca está ocupado, se levantó de la banca para recibir el fuerte abrazo de Izuku.

Siempre se saludaban de esa forma.

Aunque ahora Katsuki estaba más nervioso e Izuku más feliz.
Le apretaba las costillas con ese abrazo.

— ¡Ya quería regresar a clases! — se separó sin dejar de sonreír — Siempre pasan cosas divertidas cuando no estoy —

Izuku era de esos a los que le gustaba ir a clases, razón por la cual muchas personas le miraban raro.

Mientras muchos iban con cara de cansancio y sin ánimos, Izuku iba feliz.

— No pasó nada importante — levantó los hombros mientras caminaban por los pasillos.

— Para mí sí pasó algo importante mientras estaba en celo — Katsuki abrió los ojos en grande.

Si Izuku mencionaba algo sobre lo que pasó en su visita no sabría ni que hacer.
Tal vez desaparecer de la ciudad sea una buena idea.

— ¿En serio? — lo miró por unos segundos — ¿Que pasó? — Katsuki llevaba ambas manos dentro de sus bolsillos para que Izuku no se de cuenta de cuánto estaba sudando por los nervios.

— Mmh... — miró hacia arriba pensado — Un chico me invitó a salir — dijo con una pequeña sonrisa — tengo unos días hablando con él —

Katsuki sintió alivio por una fracción de segundo.
Los nervios que tenía de haber sido descubierto ahora eran enojo y malestar.

— Oh... Eso — sentía un vacío en el estómago — ¿Quién es? — quería enojarse con Izuku y simplemente ignorarlo por el resto del día.

Pero simplemente no podía, se conoce a si mismo y sabe que no podría aguantar sin saber de él.

— Es de otra escuela, no creo que lo conozcas — no le dió mucha importancia.
Cualquiera sentiría la pesada vibra que Katsuki emana pero Izuku no.

— ¿Quién es? — repitió la pregunta intentando no parecer tan molesto.

— Se llama Shindo Yo, es simpático — habló como si nada, estaba tranquilo — de hecho estuvo aquí la vez pasada que fue el torneo — honestamente Katsuki estaba ignorando la mitad de lo que Izuku decía.

Quería ponerse a hacer berrinches y dar golpes a quien sea que se le cruce.

— ¿A dónde irán? — tomaron asiento en sus lugares, estando uno delante del otro podían conversar en lo que llegaba el profesor.