Hola queridos lectores, siento que he perdido la inspiración y me serviría mucho que me dieran ideas por privado :[
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Ambos se miraron, así que era verdad lo de la sombra y no una broma
— Tu... ¿también la has visto?
— Solo de reojo, hace unos días ha empezado a aparecer en la ventana de mi habitación...
— Mierda, si May no me decía seguro no me daba cuenta — se golpeó la frente enojado
— ¿Tienes alguna idea de que podría ser esa cosa? — se sentó encima de una de las cajas — No es que nuestra vida fuera taaan interesante
— La verdad que no, me he retirado de las peleas desde hace mucho a menos que...
No acabo de hablar para cuando la campana de la puerta principal sonó, había un nuevo cliente
— Hoola ¿hay alguien? — tocaba la campana del mostrador repetidamente
Mikellino reconoció la voz, no, no es posible, él iba a llegar en tres días ¿Como...?
Salió apresuradamente del almacén dejando a un exe confundido pero corrió tras el y se pocisiono en su puesto, pero se encontró con un escenario un tanto inesperado
— Mikellino ¡no sabía que trabajabas acá! ¿Como has estado? — un chico hibrido de cabello blanco y puntas azules con unas alas blancas que revoloteaban abrazaba del cuello al más alto
— No esperaba verte acá ¿no llegabas en unos días recién? — se le notaba feliz, pero el exe notó un brillo en sus ojos “Que alegría para tus ojos” — Dioos ¡tengo mucho que contarte! — movía fuertemente su cola
— Okey okey, calmado perrito, primero presentame a tu amigo ¿no? — giro su cabeza hacia un exe qué estaba muy incomodo e internamente deprimido — ¡Hola! Mi nombre es Riumba ¿eres un amigo de Mikel, cierto?
— Soy Mike, un gusto — le tendió la mano a lo que el otro la estrecho — Y si, soy un... amigo de Mikel, el me estaba ayudando a atender el lugar jeje...
— El gusto es mio Mike, pero ¿te importaría mucho si te robo a Mikellino un rato? Es que tenemos muucho de que hablar — puso una mano en el hombro del pelinegro y soltó una pequeña risa
— Solo será un rato, no tardaré mucho exi — se dio cuenta que el exe aún estaba un poco incomodo, se acerco a él y tomo sus manos para después darle una tierna sonrisa — Volveré para ayudarte ¿okey?
Un leve rubor se pocisiono en sus mejillas, pero era casi invisible — Supongo que puedes ir... Cuídense mucho — les dio una sonrisa a ambos, pero se sentía mal consigo mismo por finjir felicidad
🧡
Me siento muy alegre que Riumba este acá, aunque me tomo por sorpresa que llegase así nada más, espero que eso sea lo que esté sintiendo en mi pecho y no otra cosa, mis sentimientos por el quedaron en el pasado pero... ¿Porque me siento como en aquella época?