Cap. 14

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— Jinni... Digo, Seokjin — Corrigió Namjoon cuando ambos se encontraban ya en casa del menor. Su casa era pequeña, muebles limpios y todo muy en orden, si era una casa peculiar pero linda.

— Hyung, sientase como en su casa — Dijo Seokjin.

El mayor asintió dejándose caer en el sofa del menor, rascó su nuca con nerviosismo, ¿qué hacía allí? ¿por qué no escapó cuando fue el momento?

Es más, ni siquiera recordaba como fue que llegó hasta ahí, solo recuerda haberse quedado embelesado con las manos de Seokjin sobre las suyas. Eran tan pequeñas y lindas, podía sentir su calor aún.

— ¿Quiere comer, hyung? — Musitó el menor. El nombrado nego rápidamente, quería solo pensar, pero no podía, siempre que lo hacía terminaba haciendo lo contrarió a lo que se proponía.

— ¿Quiere algo de tomar?

El mayor volvió a negar.

— ¿Y...? — El pequeño ya no sabía que hacer, sabía que Namjoon estaba en otro mundo, en primera, podía sentir lo incómodo que estaba su hyung, en segunda, Seokjin presentía que habían obligado a Namjoon a ir con él.

Y se sintió mal, porque él sabía que su hyung nunca haría algo como eso.

— Bueno, no tenía que venir ¿sabía? Se puede ir si quiere, le dire a sus amigos que usted si se quedo conmigo, no tiene por que quedarse a la fuerza.

Namjoon abrió lentamente los ojos, vio dolor y decepción en los ojos del pequeñito. No, no le gustaba eso, de un tiempo para otro, le comenzó a importar y mucho si Seokjin se sentía mal.

— N-no, no Seokjin, yo no me quiero ir aún.

El menor hizo un puchero y no aguantó más.

— Ya basta hyung, se que lo obligaron a venir, tal vez hizo una apuesta y usted perdió, por eso tiene que comportarse tan bien conmigo, por eso tiene que tomar mi mano, por eso tiene que tratarme con delicadeza, lo se hyung, usted jamás sería lindo o atentó conmigo, por que usted me odia y mientras usted sigue con esto, el único afectado, soy yo, por que soy yo quien se ilusiona, por que soy yo quien sigue queriéndolo inclusive amándolo, tal vez se esta aprovechando de mi y quiero que pare, porque duele mucho, en serio.

Namjoon no supo que hacer o que responder, solo se mantuvo callado, el menor tenía razón, él tenía que aclarar sus pensamientos respecto a lo que estaba haciendo, más bien, tenía que aclarar sus sentimientos, eso sentimientos que se negaba a creer que existían.

— No, Seokjin, y-yo...

— H-hyung, por favor... Solo, solo váyase.

El menor comenzó a sollozar, tomo el hombro de Namjoon y lo jaló fuertemente fuera de su casa, o al menos eso intento, pues el mayor era más fuerte.

— Jin...

— No, ya n-no siga con e-esto...

Estaba llorando, pero le era inevitable, él quería que su hyung se fijara en él, pero no de esa manera y le dolía.

A Namjoon también, jamás, en su corta vida que tenía con Seokjin, el pequeño se había comportado de esa forma, lo quería lejos de él y eso no era bueno.

— P-por favor, solo váyase...

— No.

Y Seokjin lloro más.

— ¡Hyung! Solo quiero que se vaya, no lo quiero ver, no hoy, por favor — Dijo con las lágrimas bajando por sus mejillas.

— No me iré.

— ¡Kim Namjoon! ¡Vete de aquí, ya! — Grito Seokjin completamente enojado y triste.

— ¡No me iré a ningún lado, te guste o no! — Grito él mayor.

— ¡Ya váyase! ¡No quiero verlo!

Namjoon no lo aguanto más.

Lo había hecho.

Lo había besado.

Ámame [FINALIZADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora