Decisiones

Capitulo 3.

Era Ji-min, él estaba sentado mirando hacia arriba, sus ojos estaban perdidos y por sus mejillas escurrían lágrimas, lágrimas gruesas, ella se apresuró a acercarse a él y lo abrazó con fuerza.

Ji-min que percibió el aroma de cítricos del perfume de su prima, se apresuró a abrazarla de igual forma, la estrechó con tal fuerza, como lo necesitaba en estos momentos, necesitaba a la persona en que más confiaba en el mundo.

Después de unos momentos ambos se separaron y Myeong-suk se sentó aún lado de él en silencio por unos minutos, después de eso Ji-min suspiró y empezó a frotar sus manos de una forma tan brusca, como si estuviese intentando darse valor y después de eso habló:

— La audición se adelantó a mañana, Luz, siento que no estoy listo que no lo lograré, temo decepcionar padre, a madre, a tus padres y a ti, que tanto confían en mí. – las lágrimas de Ji-min empezaron a bajar de nuevo, se encontraba asustado, se podía ver en sus ojos, Myeong-suk lo notaba. —No quiero decepcionarlos, me han apoyado tanto estos días y tengo mucho miedo de no hacerlo bien el día de mañana.

Myeong-suk qué había escuchado como la voz de Ji-min se quebraba cada vez que decía una oración apretaba los labios para evitar llorar, él era muy sensible, ella lo sabía, entre los dos él era tal vez el más sensible, pero en está ocasión ella sentía su miedo y su dolor la forma en como el decepcionarlos lo estaba matando, él había bajado de peso se veía más pálido, y eso le preocupaba mucho, pero el siempre cambiaba el tema. Ella quería decir algo, pero sentía que las lágrimas saldrían si incluso suspiraba, por lo que ella se acercó a él y lo abrazó escuchando como él lloraba y decía: no quiero decepcionarlos, perdóname Myeong-suk, si no lo logro, perdóname. Acarició su cabello y fue entonces que decidió armarse de valor y hablar:

— Lo has hecho bien, todos estos días lo has hecho de maravilla, Jimjim, sé que te irá genial mañana, no importa cuando haya sido, mañana, pasado o dentro de 15 días, eso no importa tu igual te habrías sentido como hoy, tienes miedo, se trata de ti de tu futuro, no nos decepcionarás, quedes o no quedes dentro de la agencia, sé que habrás dado lo mejor de ti y si no lo logras podemos intentarlo después, así que, por favor, no te hagas esto. — estas últimas palabras le salieron a Myeong-suk como un lamento, las lágrimas ya no se detuvieron, ella lloró mientras abrazaba a su hermano con fuerza. — No te hagas esto, por favor, no te mates por dentro, mañana lo harás bien, confío que lo harás genial, sé que entrarás y te convertirás en un gran artista, yo estaré ahí, te apoyaré y seré tu fan número uno, por favor, ya no más. — dijo ella mientras se alejaba de él y le limpiaba las lágrimas, con delicadeza, el empezaba a tranquilizarse y fue cuando él la miró a los ojos, sus ojos empezaban a verse tan brillosos y llenos de esperanza como siempre y ella le regalo una sonrisa que le decía que todo estaría bien.

— Gracias, Luz, muchas gracias por estar conmigo y animarme— él aproximó sus manos a los lados de cada mejilla de ella y quitó los rastros de lágrimas que quedaban y después apretó su nariz, lo que trajo una pequeña sonrisa en los labios de él. ­— Es asqueroso, toque tus mocos. — él miró como ella reía y se sentaba aún lado de él, miró sus sombras en la pared delante de ellos y suspiró, el en verdad sentía demasiado miedo. —Daré lo mejor de mí mañana, por favor, apóyame mañana, hermana.

— Por supuesto que te apoyaré, hermano. — le dio un pequeño golpe en su hombro y se levantó, miró hacía su sombra e hizo una pose de gallina, que hizo reír a Ji-min, él se paró y una batalla por ver quien hacía la pose más graciosa, fue la que despejo los nervios, el miedo y la tristeza de Ji-min en cada pose.

Al día siguiente Ji-min no se presentó en la escuela, pero Myeong-suk, ella estuvo nerviosa todo el día, miraba la hora a cada momento, miraba la hora del reloj y la hora en que sería la audición de Ji-min, así que cada vez que veía que se acercaba más la hora, sentía como su estómago dolía de vez en cuando. Cuando terminó la última clase, salió corriendo del salón y de la escuela, pasó rápido a la cafetería que solían frecuentar Ji-min y ella cuando podían hacerlo y pidió permiso de entrar al baño, cuando lo hizo se cambió rápido el uniforme por un vestido suelto floreado, se soltó el pelo y se dejó los tenis blancos, salió compro los panecillos favoritos de Ji-min y corrió directamente a la academia de baile de Ji-min, cuando llegó había mucha gente afuera, revisó su reloj, faltaban 15 minutos para que comenzara la audición, por lo que ella simplemente se apresuró a entrar, trató de encontrar a Ji-min entre la multitud de participantes que adicionarían.