Capítulo 1: Inicio Sangriento

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Como un mar, alrededor de la soleada isla de la vida, la muerte canta noche y día su canción sin fin.

-Leo Buscaglia


Nos remontamos minutos antes de que Darius hiciera explotar la casa de los caníbales deformes. En el interior, Dientes de sierra, El tuerto y Tres dedos, heridos y agonizando por el ataque de los campistas hacia ellos, luchan por poder salir y evitar ser consumidos por el fuego de la casa, que cada vez mas va extendiéndose.

Tres dedos, el menor de los hermanos, logra pararse y quitarse el hacha que previamente Darius le había incrustado en el pecho. Una gran cantidad de sangre le empezó a brotar, pero no le importaba, su mayor prioridad ahora era sacar a sus hermanos fuera de la casa.

Dientes de sierra estaba tendido en el suelo, tratando de sacarse la flecha que Brooklynn le había lanzado en la parte trasera de su cabeza. El tuerto había quedado atrapado debajo del auto que Darius estrelló contra la casa. Tres dedos se acerco a Dientes de sierra, y lo trato de jalar hacia la parte trasera de la casa, pero él respondió dándole un golpe con sus pocas fuerzas en los brazos para que se detuviera.

¡Huye! —Le gritó Dientes de sierra a Tres dedos en su lengua nativa. Pero Tres dedos no pensaba abandonar a sus hermanos en una situación así—Ya es tarde para nosotros, sálvate, busca a padre —Dijo Dientes de sierra a su hermano por ultima vez, antes de caer inconsciente.

El fuego se empezó a expandir aun mas, dada la situación Tres de dedos se vio obligado a huir y dejar a sus hermanos, pues en su estado actual, hubiera sido inútil tratar de ayudar. Se arrastró lo mas rápido que pudo hacia la parte trasera de la casa, rompiendo un tablón de madera de la pared para lograr salir al exterior.

Ya una vez afuera, trato de ponerse de pie, para ir en busca de su padre. A lo lejos, escuchó un disparo, y en un abrir y cerrar de ojos, la casa exploto, mandándolo a volar varios metros lejos, cayendo inconsciente.

Tendido en el pasto, y en unos pequeños parpadeos, logro ver como su casa era consumida por las llamas de la explosión, y muy probablemente sus hermanos habían sido calcinados al instante. Al desviar su mirada, alcanzo a ver a Brooklynn y a Darius huyendo del lugar. La rabia se impuso en todo su ser, quería ir a por ellos, sabia que esos dos fueron los causantes de todo esto, pero su vista se fue oscureciendo, hasta que todo se puso se puso en negro.

Varias horas mas tarde, el viento de la noche resoplaba con intensidad, esparciendo el olor a humo por todo el bosque de la isla. Varias cenizas salían volando, una de ellas cayo sobre la frente del caníbal. Se empezó a despertar, a su frente estaba la casa ya totalmente consumida por las llamas, las cuales ya habían extinguido su fuego. Tres dedos se levanto, y se fue corriendo a inspeccionar el lugar.

La casa daba un ambiente de muerte y desolación. El caníbal empezó a buscar entre los escombros algún rastro de sus hermanos, al hacer eso, sus manos se tornaban negras por los restos de cenizas en los tablones de madera. Al mover una de estas, vio el cuerpo calcinado de uno de sus hermanos, Dientes de sierra, el fuego se había encargado de borrar cualquier rastro de lo que fue alguna vez. Cerca de él, estaba el auto que había ocasionado la explosión, y debajo de este, estaba los restos de El tuerto. Tres dedos soltó un llanto de dolor al cielo por la perdida de sus hermanos.

 Tres dedos soltó un llanto de dolor al cielo por la perdida de sus hermanos

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