Capítulo 4: Conociéndonos

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Habían pasado ya unos pocos meses desde que Jack y Sassa se conocieron por primera vez.

En un principio O' Conner la intentaba evitar, ya que intuía que esa pelirrosa le movía algo por dentro desde ese día en el hospital. Pero daba igual lo que hiciese puesto que, por unas situaciones o por otras, siempre terminaba viéndola.
Parecía que todo el mundo la conocía, sobre todo el Canario, que cada vez que tenía patrullaje con él, que era algo habitual, siempre terminaba en el hospital socializando con la señorita Sassa.
Por estos pequeños momentos, se fueron conociendo cada vez más. Hasta que llegó un día que Sassa le propuso quedar para ir a ver las montañas de Marbella. Desde ese día, le siguieron otros en donde quedaron, como amigos, para ir a diferentes lugares o para simplemente tomarse algo.
Por otro lado, Sassa en esos meses se dio cuenta que el agente O' Conner la estaba volviendo loca. Que con él le sucedían cosas que con los demás chicos no.

En la actualidad, Sassa se encontraba conduciendo rumbo a la comisaría, le habían robado y destrozado su amado Pettirosa .

Cuando llegó aparcó la ambulancia y se bajó, y fue hacia la puerta.

- Buenos días señor Agente.

- Buenos días, señorita. En qué puedo ayudarla.

- Miré vengo a poner una denuncia, me han robado mi coche y me lo he encontrado en otro lugar bastante destrozado. Ya sabe puertas forzadas, carrocería llena de golpes y arañazos...

- Ok, señorita tome este cheque para que arregle su coche, ahora circule.

- No, no señor agente. No puedo aceptarlo, yo lo único que quiero es....

- Insisto tómelo y retírese...- dice el agente metiéndole el cheque en uno de los bolsillos del uniforme..

- Pero que no es necesario....- intenta decir pero el agente, al cual reconoció como Cano, caminó hacía la comisaría perdiéndose en el interior de esta.
Sassa ya estaba por marcharse, cuando vio como llegaba Jack a donde se encontraba ella.

- Buenos días señorita Sassa.

- Buenos días, agente O'Conner. Que tal como le va el día.

- Normal, la ciudad ahora mismo está tirando a calmada. Y tú, que tal la guardia.

- Pues muy tranquila la verdad, venía a poner una denuncia.

- Ah sí, pues vamos dentro y te ayudo..

- No, no el agente Cano ya lo hizo. No quiero tampoco molestarte a ti-

- No es molestia.-

- En serio, que ya me ayudaron. Oye lo que veo ahí es una herida , quieres que te la revise.

- No hace falta, solo es un pequeño corte.

- ¿Estás seguro?

- Si, si no te preocupes.-

- Vale, vale que .... Agente Cano.- le llamó cuando le volvió a ver.

- Dígame.-

- Que a mí me sabe muy mal, en serio. Que....escuché , déjeme su teléfono y.....-

- Lo siento señorita soy gay-

- Y que más me da a mí eso, no le estoy pidiendo el teléfono para ligar- contestó mientras observaba como Jack se llevaba la mano a la cara .

- Yo creo que sí, pero bueno , lo siento, soy gay me gustan los hombres.

- Pero ... Jolines que no es eso.-

- Ujum, te gusta este hombre eh- dijo tasser

- Hola Tasser.- contestó sassa

- Dígame señorita.- le respondió el agente Cano.

- No, se lo pido por qué tengo la sensación ,de que ahora tengo que hacerle a usted un favor muy grande y mi conciencia no me deja irme sin más.

- Como me dijo usted que se llamaba señorita.

- Soy Sassa ,Sassa velar. Paramédico-

- Sassa, no pasa nada señorita Sassa si usted no me debe nada. Si a mí me gusta ayudar a los muertos de hambre.-

- Uy..- saltó O'conner.

- Pero que yo solo quería poner una denuncia.-

- Pues no hace falta así usted me ahorra el papeleo.-

- Pero muchas gracias, muchas gracias. Si algún día usted necesita un favor avíseme, suelo estar en el hospital.-

- Como le dije no se preocupe.-

- Bueno pues les dejo trabajar, que tengan muy buen día .-

Después de ese raro acontecimiento, el día para Sassa pasó sin ningún contratiempo. Ahora, ahí se encontraba fuera del hospital, tomándose un descanso.

- Pero bueno, bueno si aquí tenemos a la pelicaneadora mayor, que pasa Grey.- dijo desde sus espaldas el canario.

- Como que la pelicana mayor, ese es tu título mi querido amigo Tasser.-

- Me parece que no, haber hagamos un recuento. El motero, Arnulfo, O' Conner, Cano, yo mismo....-

- Pero que yo no pelicaneo, todo lo que dices es falso. Además que Cano es gay-

- Si, si y yo soy santo y virgen ahora.-

- Pero porque dices eso, ¿no es gay?.

- Claro que no Sassa, a Cano le encantan las chicas. Pero ahora poniéndonos serios.

- ¿ Tu serio? Haber, dime que me tienes que preguntar.

- Que hay entre tú y O'Conner, porque últimamente os he visto muy juntitos.

- Nada , no hay nada.

- Ya, ya Grey que nos conocemos.-

- En serio, que no hay nada solo es un conocido nada más.-

- Que yo os he visto, y esas miradas y gestos no son sólo de unos conocidos.-

- Nos has estado espiando agente.

- Nooo-

- Es que me lo imagino- dice la pelirrosa cogiendo una libreta y un boli de la ambulancia- Es que te imagino, te imagino en la puerta del hospital.. Uy esa es Sassa, uy ese es O' Connor, voy a tomar nota a ver qué.... Uy quien es, uy...

- Shuu, se ha ido , se ha ido- 

- Disimula, disimula...¿ Porque aparca ahí?.- dijo vigilando a O'conner.

- Disimulamos, disimulamos.-

- ¿Por qué aparca ahí?

- Vamos a hacer como que estamos hablando..- dijo sassa.

- Es que es lo que estamos haciendo... Ah claro ,claro-

-Pero seguimos así, pero hablando.-

- Dile que se acerque pobrecito.

- No...Venga para acá O'Conner, venga para acá.-

- Si si entonces, nada pero bien. Buenas agente.-

- Buenas- saludó Jack.

- Buenas, buenas. Pues eso... -

- Bueno O' Conner seguimos patrullando.- dijo Tasser dirigiéndose a su moto.

- Si , si claro.-

- Y usted qué tal agente ¿ Todo bien?

- Todo bien.-

- Oye , lo del observatorio mañana sigue en pie ¿no?- le dice la pelirrosa cuando ve que no hay nadie cerca.

- Si claro, ¿mañana a las 6 de la tarde?

- ¡Vamos, O'Conner!

- ¡ Ya va! Manda cojones, el está aquí mil quinientas horas , y ahora tiene prisa. Entonces quedamos así.

- Hecho, que tenga una buena noche agente O'Conner.

- Lo mismo digo, señorita Sassa.

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