a comenzado lo más inesperado? cap 2

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...en sí mi vida era muy aburrida, solo que  hace unos días, todo fue muy diferente. Les explico porque:
- una noche, estaba durmiendo hasta que un ruido que provenía del suelo de mi casa me despertó, parecía ser como de una máquina, no se exactamente qué era, pero me asustó mucho, de un momento a otro empezó a temblar levemente, podía sentir el movimiento en el suelo, rápidamente procedí a llamar a mi papá y a mis hermanas, estaba asustado, pensé lo peor, fuí a la  habitación de mi papá, cuando entré ví que se estaba poniendo sus zapatos...
Yo: papáa está temblando salgamos de la casa!
-aunque era leve el movimiento, me asusté mucho-
Mi papá: de seguro fué, un sueño, hace rato estoy despierto y no he sentido nada
En ese momento mis hermanas entran en el cuarto de mi papá, asustadas por los gritos míos.
Mi papá les contó que había tenido un sueño y que me asusté por eso
La verdad no fué un sueño, yo dije que depronto debió de haber sido eso, pero sabía que realmente no era así, después de todo eso todos nos fuimos a muestras habitaciones.
No les miento, soy muy cobarde en el tema de los rayos y todo lo relacionado con eso, me asusta mucho, en sí no hay nada más que me asuste excepto eso, después de eso me fuí a mi habitación, estaba lloviendo fuertemente, y tronando muy feo, traté de no darle importancia, me volví a acostar en mi cama, no me cogía el sueño después de eso, me quedé pensando en lo que había pasado, después de 1 hora empecé a cerrar mis ojos, por fin me había cogido el sueño pero de repente empiezo a escuchar unos gritos muy fuertes !provenían del suelo! Eran gritos de lamentos, me inquieté demasiado, empecé a tener demasiado miedo esos gritos no paraban, cada vez eran más fuertes, no reconocía si eran de un hombre o una mujer, pude sentir mis manos y mis piernas temblando, mi papá entró en mi cuarto, alarmado, cuando el entró los gritos pararon, no me había dado de cuenta, pero resulté en una esquina de mi cuarto sentado con las manos en mis oídos, mi papá me dijo que qué había pasado, que porque gritaba mucho, lo cual no me había dado de cuenta que lo había hecho, yo le conté lo que había escuchado, mi papá me dijo, que el me entendía, pensé que me hiba a decir que lo había inventado, pero el me dijo que cuando pequeño el también lo escuchaba, pero eran voces que lo llamaban por su nombre, y le decían que hiciera cosas, pero después de un tiempo se le pasó, me dijo que tenía que aprender a controlarlo, ya que fué así como desaparecieron esas voces de su cabeza, pero lo que no sabía mi papá es que lo mío, era más grave de lo que el pensaba, después de eso el se quedó conmigo y espero a que me durmiera, y después se fué, la verdad me cogió el sueño muy rápido,  estaba muy cansado y mi garganta me dolía, al parecer había gritado muy duro. Al otro día me levanté, me alisté para ir a la escuela, intenté olvidar lo que había sucedido esa noche, pero no me era posible, estaba muy distraído en clases, mi profesora me castigo porque no le había puesto atención y pensó que no le quería hacer caso a lo que decía, la verdad mi mente estaba muy ocupada por lo del suceso anterior ya que nunca había tenido algo así anteriormente, la profesora me escribió una nota dirigida a mi padre, debido a mi comportamiento.
Yo normalmente soy muy inquieto, me gusta hacer enojar a la gente, pero esa vez me pasé, empecé a tener un comportamiento muy brusco con mis compañeros, le jalaba en cabello a mis compañeras y a mis compañeros les pegaba, la verdad ellos eran más pequeños que yo, pero habían otros niños que me hacían bullying, obviamente eran más grandes que yo a mi no me quedaba más que aguantar que me pegaron y descargar mi ira con mis compañeros. Las voces en mi cabeza no paraban, eran cada vez más constantes, y me obligaban a hacer cosas que no quería.
Yo soy una persona atractiva, por lo cual las niñas se enamoraban de mi, pero después de que me conocían ya no me querían, nunca he estado enamorado de alguna niña, ningúna me atraía, todas me parecían muy insignificantes, y me parecían tontas, constantemente recibía cartas de niñas, diciendo cosas "bonitas" de mi, y varias invitaciones a salir, en sí la cursilería no es lo mío, lo detesto, -lo aprendí de mi hermana mayor- en si le encontré sentido a lo que ella había dicho una vez...

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