⇠⇠⇠⇠⇠Narradora
—Es una gran suerte que mañana ya te den de alta— dijo Fumiko mientras pelaba una manzana roja como aperitivo— por mucho que has estado inquieto en querer continuar con tu rutina de ejercicio, tu cuerpo no ha presentado ningún signo de molestia, los doctores piensan que por eso tu cuerpo a logrado recuperarse rápido
—fueron muy exagerados, se preocupaban de más, solo fue un pequeño rasguño— dijo como broma y sin pensarlo mucho, en el momento de dirigir su mirada hacia la pelinegra, se dio cuenta de su insensibilidad— espera Fumi, no me mires así, lo dije sin pensarlo mucho— un poco nervioso trataba de arreglar su error, los ojos ámbares de la contraria lo miraban con enojo, pero también se los visualizaba cristalizados al recordar el tremendo pavor de haberlo perdido por unos momentos
—¿no te das cuenta acaso del tremendo susto que me diste? —detuvo su acción de continuar pelando la fruta para comenzar a hablarle con seriedad— Takemitin me comento que cuando estabas en la ambulancia, tuviste un paro en el corazón... y tus últimas palabras en ese momento era que dejabas a él el cuidado de Manjiro y esperabas que yo te perdonara— aun con sus ojos vidriosos, negó con la cabeza— ¿enserio estabas preparado para dejarme sola? Me lo habías prometido... que no me dejarías
—por favor Fumi, no llores, no me gusta verte así— se levantó de la camilla para aproximarse hacia la fémina, quien con rapidez se deshizo de la pequeña lágrima que resbaló lentamente por el rabillo de su ojo— no te voy a mentir... de verdad pensé que mi momento había llegado dentro de esa ambulancia, y aunque he tenido maravillosos momentos y recuerdos vividos con la ToMan... lo único en que me lamentaba y deseaba con toda mi fuerza... era estar más tiempo contigo, poder ver el desarrollo que estás teniendo ahora, presenciarlo junto contigo; y sobre todo encargarme con mis propias manos a aquel que te está haciendo la vida imposible... cuando estaba inconsciente tuve varios recuerdos, y en uno de ellos aparecías tú, siendo una niña pequeña, inocente, parlanchina, curiosa y sobre todo alegre... y por una vez había anhelado poder volver a ver a esa Fumiko que conocí el primer día, verla de esa forma en la actualidad, sin mostrarse insegura ni actuar de otra forma frente a los demás, esa es la Fumiko de la que me enamore y en la que hoy en día aún sigo con ese sentimiento.
Al ver la expresión sorprendida y sonrojada de Fumiko, Draken se quedó tieso al captar lo que dijo, no era su intención soltar más allá de sus sentimientos, le explico aquella corta trayectoria que paso en su casi muerte que, sin darse cuenta, también le expreso lo que realmente sentía por ella
—ol... olvida lo que dije Fumi, no era mi intención—
—¡gustarme tu! —grito de repente la pelinegra, sonrojándose más al decirlo de forma desordenada— quiero decir, que tu también me gustas Kentin
Ambos quedaron en silencio por unos segundos, procesando el momento en el que anhelaban vivirlo desde hace mucho. El primero en terminar de procesarlo fue Draken, que con intenciones de hablar al respecto de lo sucedido, abrió la boca para proseguir
—¡por fin paso! —ambos adolescentes dieron un pequeño brinquito por el susto que ocasionó el repentino grito femenino— ¡mierda, lo hubiera grabado para enseñárselo a las chicas!
—guarda silencio Remi, avergüenzas a los recién novios— comentó otra voz femenina
—siempre pensé que Fumiko terminaría confesándose, veo que me equivoque... agh, no puede ser, perdí 500 yenes en esto
Draken se aclaró la garganta y se recostó nuevamente en la camilla mirando hacia la ventana queriendo deshacer la vergüenza del momento, mientras que Fumiko continúo cortando y haciendo cuadrito la manzana que tenía en manos, su rostro estaba rojo por las cosas que decían Remi, y más al ver como Mare y Masamichi, los habían pillado en mal momento
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Nuestro Futuro (Draken X OC) [Finalizado]
RomancePasaron 12 años desde la muerte de Draken, y las cosas en ese presente no andaban nada bien. Los asesinatos, la venta de droga, la prostitución, todo acto delictivo sufría con constancia la ciudad de Tokyo. Hasta que ocurrió un accidente en el que e...