Creció leyendo historias de princesas que eran salvadas por príncipes, rescatadas de torres muy altas y despertadas de sueños profundos con besos de amor de verdad.
Por muchos años deseó ser ellas, deseó que alguien llegara y le diera la mano para salir del hoyo donde estaba, anheló que vinieran a rescatarla de la torre, pero nadie corrió a su socorro.
Entonces comprendió que su cuento era diferente a aquellos que había leído. Aquí las princesas se salvan ellas solas , no matan al dragón, lo domestican y salen juntos a volar por el mundo.
En este cuento las princesas no usan vestidos , sino una armadura. Sus accesorios son la espada , las heridas y las cicatrices ; el reino , es el campo de batalla llamado realidad y día a día ; su corona son las victorias.
Comprendió que en su cuento las princesas son guerreras. No se amedrentan, no se rinden. Si se caen , se limpian el polvo y siguen. Son resilientes ,inquebrantables, cada batalla las hace más fuertes. No le temen a la tormenta , al peligro , van erguidas a hacerle frente.
En este nuevo cuento no se necesita a un príncipe para tener un final feliz porque ellas son más que suficientes.
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Gris en un arcoíris
PoezieBúscame más allá de los colores de la alegría , donde veas el leve rastro de una lágrima fugitiva , en el sendero nublado de la melancolía , donde mis pensamientos se convierten en poesía.
